●~Caught Up~● ○△☆☂

Capítulo 17

Narra Myeong:

Tomé el primer taxi que cruzó la calle y una vez dentro di la orden al chofer de seguir al auto de enfrente; el mismo en que el detective Hwang se encontraba. Poco a poco durante el trayecto, la lluvia empezó a desaparecer dejando un ambiente frío y húmedo.

Le pedí al conductor ser un poco precavido para evitar que se dieran cuenta que estábamos siguiendo a un auto. Recorrimos un par de calles a destiempo hasta que comencé a darme cuenta de que el rumbo que estábamos tomando me resultaba un poco familiar. Mis sospechas de que Hwang regresaría a Ssangmun-dong resultaron ser ciertas. El detective dio vuelta en la intersección final que te lleva directo frente a la casa del señor Seong Gi-hu. Por obvias razones le pedí al conductor del taxi que se detuviera a unos metros para evitar levantar sospechas.

Permanecimos estacionados un par de minutos hasta que vimos a alguien salir de la casa de enfrente. Al parecer se trataba del señor Seong. Lucía bastante extraño ya que llevaba puesta una gorra y sus manos dentro de los bolsillos delanteros del pantalón, también miraba hacia diferentes puntos de la calle evitando ser descubierto por alguien.

El auto de Hwang se encendió nuevamente y se puso en movimiento dispuesto a seguir al señor Seong. Luego de unos minutos llegamos a una zona donde habían dos circuitos en los que a estas horas no solían ser muy transitados. Seguimos manteniendo distancia mientras observábamos al señor Seong esperar a alguien parado sobre la acera. Fueron demasiado rápidos aquellos sujetos extraños de una camioneta negra al momento de llegar y estacionarse frente Seong Gi-hu esperando a que subiera.

Cuando las puertas del auto cerraron de nuevo, se pusieron en marcha hacia una nueva dirección. No demoré en darme cuenta de que nos dirigíamos hacia las afueras de la ciudad, para ser más precisos, a un puerto. 

—Detective... estoy dispuesto a ayudarla en su investigación pero me temo que no puedo llevarla más lejos —comentó el taxista sonando un poco nervioso—. Todo esto, siento que es demasiado peligroso, y tengo una esposa e hijos que alimentar, creo que no podré ir más lejos —continuó mientras sostenía el volante con fuerza.

—No se preocupe, al parecer ya llegamos... —respondí mientras desabrochaba mi cinturón y miraba a través del cristal.

La camioneta negra en la que el señor Seong se había subido, acababa de entrar al puerto donde el camino era más estrecho y de lenta circulación. Supe que era momento de bajarme para adentrarme más al lugar. Incluso tampoco sabía dónde estaba el auto del detective Hwang justo ahora.

—No traje mi cartera... puede llamar a la estación en la que trabajo o a este número para recordarme del pago —le extendí una tarjeta con mi teléfono impreso.

—Está bien detective —la recibió temeroso.

Decidí bajarme del taxi rápidamente, y tratando de ser lo más cautelosa posible caminé hasta la cabina de seguridad del puerto donde no pudieran verme. Lentamente empecé a acercarme mientras me refugiaba entre los puntos ciegos que me cubrían. También buscaba angustiada al detective pero no lograba dar con su paradero.

Empecé a percatarme de que se trataban de muchas camionetas negras iguales, todas ellas se dirigían en fila por el puente mientras se estacionaban dentro de un gran barco transportador de cargamento pesado. 

Después de esperar a que el último auto subiera, entré al barco del mismo modo escondiéndome detrás de un par de barriles y cuerdas que acostumbran llevar en este tipo de embarcaciones. Intenté contar a simple vista el número de camionetas pero me fue imposible, parecían ser demasiadas. El barco había comenzado a avanzar evitando retrasos.