Platón sin empanada

500 30 16
                                    

Les dejo un regalito, un capítulo más para este Sábado por la buena onda y sus  comentarios que me hacen re feliz.

Capítulo nueve

Platón sin empanada

Rubi

Concón - Julio 2028

Estoy sentada donde quedamos de juntarnos hace un año atrás. Llegué media hora antes y fui a comprar dos empanadas vegetarianas para esperarla. Esto de quedar en juntarse de un año a otro sin tener la posibilidad de hablar me ha tenido muy ansiosa. Definitivamente no soy la misma y ella tampoco debe serlo, pero me muero de ganas de verla y de ver si podemos retomar algún tipo de relación. Me acomodo en el mismo lugar en el que hace un año nos sentamos a conversar sobre darnos un tiempo. El reloj marca la hora y no la veo por ninguna parte. Como una película se viene todo lo que ha sido estar sin ella, todo el proceso del que tengo terror revivir pero no puedo no darme la oportunidad.

Flashback

Estoy sentada sobre ella en el auto, me besa con tanta pasión pero con tanta tristeza, se que esto se termina hoy y la presiono contra mí para no dejarla ir. Pasa sus manos por mi cuerpo, por todo mi cuerpo y susurra un te amo.

¿Te acostaste con Marce? - le pregunto.

No Rubí, y dudo que yo pueda rehacer mi vida después de ti - me habla con sus manos en mi cara para seguir besándome.

Maca escúchame - esta vez soy yo la que tomo su carita - Maca, si llego a estar con alguien más, ten claro que nunca, nadie se va a comparar a lo que siento por tí, pero a mí me cuesta estar sola y no puedo prometer eso.

Lo sé mi amor y es lo que más me mata de todo eso, pero olvidemos eso por hoy, por favor.

Inventemos una despedida digna de lo que tuvimos Maca, aunque toda la vida no sería suficiente para despedirnos, lo necesitamos.

Me besa, estamos en el auto y no nos importa. Me levanto la polera para sentir su boca en mis pezones, pasa su lengua tibia y ella gime, gime con su boca en ellos. Pasa su lengua con tanto cuidado y siento que no necesita nada más. Baja su mano por mi espalda y sigue su recorrido hasta meterla por la parte trasera de mi pantalón la dirige hacia adelante, toca mi clítoris y sonríe porque ella entiende lo que me provoca.

¡Ay Rubí! - me respira en el pecho - me vas a matar.

Comienzo a moverme en sus dedos tan ricos que me hacen perder la cabeza. Ejerzo presión con mis caderas y los introduce con un poco de fuerza, gesto que me saca un gemido brutal y me tapa la boca suavemente con su mano. Levanto su polera mientras paso mi lengua por su boca y toco sus pechos.

¡Ay me encanta Maca! - le muerdo el mentón y sigo moviéndome con sus dedos dentro de mí.

Escuchamos un auto cerca de donde estamos y Maca para de inmediato. Me bajo y quedo exhausta en el asiento del copiloto. La miro y empiezo a tocarme. Me mira y siento como la vuelvo loca, muerde sus labios y me besa sin tocarme dejando que lo haga por mí misma.

¿Vamos a algún lugar? - me dice

A donde querai rica - le digo

Enciende el auto, marcha atrás y toma la calle. Me mira, sé que no puede manejar así por lo que dejo lo que estaba haciendo y la abrazo para darle besos por toda la cara.

¿A dónde se te ocurre ir? - pregunto.

Me da lo mismo Rubí, solo quiero estar contigo ahora ya - me responde.

¿Pero un hotel?

Si po, tu sabi que no me gustan los moteles Rubí - me dice con carita de amurrada.

Después de una hora más o menos encontramos un hotel piolita, no tan caro y con vista al mar y cama matrimonial. Pienso - ¿Qué más podemos pedir para amarnos? Tiempo - me respondo - tiempo es lo que no tenemos.

Entramos a la habitación, Maca se acomoda con sus cosas y la veo de espalda con esos rulos que me vuelven loca, la abrazo con fuerza para sentir todo su cuerpo en el mío. Se va a voltear pero no la dejo.

¡Quédate así mi amor!

Levanta las manos en signo de que hará lo que yo quiera. Saco su polera y beso sus hombros, la guío hacia el ventanal, beso toda su espalda y desabrocho su pantalón. Sin dejar de pasar mi lengua por su espalda hasta sacar su sostén. Llevo mis manos hacia adelante y toco sus pechos. Echa su cabeza hacia atrás entregándose a mí, mientras hace sus manos hacia atrás para tocar mis caderas que se mueven solas al ritmo de sus gemidos y los míos. Meto mi mano en su pantalón y la toco, pienso en que conozco su cuerpo como si fuera mi propio cuerpo y me excita tanto, ella lo siente y desliza su mano por el interior de mi pantalón para tocarme también. Es alucinante tocarnos al mismo tiempo a pesar del trabajo que conlleva concentrarnos en la otra mientras el placer recorre nuestros cuerpos. Se da vuelta y me toma por la cintura para llevarme a la cama. Cae sobre mí y vuelve a tocarme, esta vez estamos frente a frente y me mira mientras me hace llegar al orgasmo, pareciera que quiere grabarse mi placer, entre temblores de mi cuerpo me dice te amo,te amo, te amo. La sigo tocando mientras ella está sobre mí, tomo su cara con la otra mano y acaricio su pelo. Es una despedida y así se siente, tiene un orgasmo en mi boca y la beso con locura. La hago descansar en mi pecho.

Esa noche hicimos el amor hasta el amanecer. Nos despedimos en Santiago, entre llantos y una vida que dejábamos atrás.

Término de flashback

Han pasado tres horas desde que estoy aquí congelada esperando a que me de alguna señal de que va a venir. Pero en mi interior sé que ya no vino, Maca es la más puntual, jamás llega tarde. No tengo hambre así que intento darle las empanadas a un perrito pero creo que no es vegetariano entonces las boto por ahí. Me voy caminando, esta vez para despedirme yo para siempre de esta, nuestra historia.

Siempre pensé que ella me amaba, pero hoy entendí que no. No puedo dejar de llorar, la gente que pasa por el lado me mira y yo no puedo contener este llanto que viene desde lo más desgarrada de mi alma. Mi corazón, hace cuatro horas, estaba brincando pensando en una nueva oportunidad y ahora está completamente roto. Así me dejaste Maca, rota. 

Antes de OlvidarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora