Capítulo 4.- Invitación
Pov Yoohyeon:
El frío se hacía más y más presente, mucho más en estás épocas.
Abrazando con fuerza mis brazos esperaba a Sunghoon fuera de su aula, razón suficiente para explicar el porqué de aquí e inesperadamente apareció la persona con quién trataba menos.
— Yoohyeon — me miró con sopresa — ¡Dios santo mujer!, ¿qué planeas hacer aquí a fuera con este frío?
— Es...pe...ro a Sung...hoon — le respondí mientras tintineaba.
— Ven pasa, no te quedes ahí a fuera — y con suavidad me llevó hasta algunos asientos vacíos — ahora ten toma — señaló el café que llevaba en las manos — lo necesitas más tú qué yo.
— Gracias — respondí tímidamente y aunque no congeniaramos tanto, tampoco éramos tan distantes por lo que me animé a preguntarle respecto a Park y esa chica de rasgos bonitos.
Con los hombros encogidos se limitó a decir unas cuantas palabras pero que sin duda aclaraban todas mis sospechas.
— No creo que tenga un interés amoroso o al menos no Sunghoon pero ella jamás se le despega — me dijo con una mueca en sus labios — tampoco hemos podido tener mucho contacto con él y aunque parezca tonto, Yugyeom ha tratado de averiguar pero ella aparenta insinuarle a más de uno.
Atónita la miré con preocupación a Tzuyu, ¿es qué acaso está tal Yoo Rim era una casanova?
Una chica extranjera que buscaba beneficiarse a su gusto.
[...]
Luego de esperar por tanto tiempo, aquel chico nunca había llegado, es más parecía como si se lo hubiese trago la Tierra, porque nadie sabía de su paradero o eso querían aparentar pues al salir de aquel edificio, los observé muy acaramelados a los susodichos.
Con el corazón latiendo a mil, mientras apretaba mis labios con fuerza me pase de largo hasta mi aula.
En otro momento hablaría con él, a solas y cuando estuviera mucho menos ocupado.
Y si bien las ganas de llorar no faltaban pero no creía que fuera el momento correcto, si no hasta ver a aquel hombre de sudadera blanca para así balancearme en sus brazos y acurrucarme en su pecho.
— ¿Qué sucede pequeña? — me preguntó siendo que la respuesta era muy obvia — está bien, no me digas nada — respondió con enfado — ten por seguro que ese idiota las pagará.
[...]
Pov ____:
— ¡Vamos por favor, solo cállense! — exclamé ante las burlas de mis amigos.
— ¿Cómo nos pides eso, sí aún nos da tanta risa el beso que le planteaste a aquel poste? — rieron descaradamente.
— ¿Es qué ____, cómo sucedió?, es decir, no te ví pero si me lo he de imaginar — expresó a carcajadas.
Cansada y sumamente molesta, le había soltado un fuerte codazo en la boca del estómago haciéndome reír con satisfacción al escuchar las quejas de mi querido amigo.
— ¡Heeseung cariño! — imite la voz de SuA quién me miraba con enfado mientras que yo le reprochaba con mi cara de ¿qué?
Luego de que aquellos dos me dejarán en paz, logré ver a Jungwon con Sulli.
Estando juntos aparentaban divertirse y parecían estar tan concentrados que preferí no interrumpir.
Y si bien, tal vez era un poco molesto verlos juntos pero tampoco quería decir de debía desconfiar de él.
No había sospechas de un amorío entre ellos, entonces no había problema.
