La presión fue quien me hizo así,
Porque nadie creyó en mi, nadie me hizo relucir,
No había amor, no había a quien querer de verdad,
Solo un choque de realidad.
Solo en el universo, cayendo cada vez más profundo en la tierra,
Notando el frescor de la tierra mojada bajo mis ojos,
Cerrando los puño del ardor en mi pecho, cargado de anhelos.
Queda una caída libre que nada podrá detener,
Solo queda arder.
Hundiendo mis labios en magma, sabor a miel,
Porque perdonarme sabe más dulce,
Que cualquier cosa que me dijera él.
Él me olvidó, nos dejó en un bosque perdido en la noche,
El me sonrió, mientras cargaba su furia en mi piel con azotes,
Él me ignoró, cuando tras varios juicios me llamó mentiroso estando él entre barrotes,
Recibí tanto dolor, cambió tanto de mi, que le devolví hasta el último golpe.
Y nunca te perdoné, y nunca lo haré,
Porque la muerte te apartó de mi vida,
Como un regalo que jamás admitiría.
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UN PADRE AL QUE NO ABRAZARÉ.
PoetryEste es el poemario "Un padre al que no abrazaré", una colección de versos que exploran la complejidad emocional del autor hacia su padre. Desde la indiferencia hasta la rabia y la tristeza, estos poemas reflejan los sentimientos encontrados del aut...
