꧁Epílogo: En otra vida꧂

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En un mundo y tiempo distinto, un pequeño peliverde, de brillantes esmeraldas y tiernas pecas había nacido, trayendo consigo la felicidad de sus padres junto a la de su reino natal, quienes celebraron con algarabía la llegada del primogénito.

El dulce bebé de nombre Izuku, creció en aquel armonioso ambiente que el reino de Yuei ofrecía, gozando de buena salud y asombrando a todos desde su corta edad por su gran inteligencias y destrezas que demostraba.

Todo parecía perfecto en la vida de aquel pequeño..

Mas en realidad no lo era..

Desde que tuvo uso de razón sintió como algo le faltaba, por lo que un vacío permanecía siempre presente en su interior sin reconocer ni conocer la causa de ello.

Se sentía incompleto..

Y dicha situación empeoró cuando cumplidos sus doce años comenzó a tener extraños sueños que lo hacían despertarse en medio de lágrimas a mitad de la noche.

En cada uno de ellos se visualizaba a si mismo de una mayor edad y con extrañas vestimentas, pasando diferentes momentos junto a otro joven cuyo rostro le era imposible de identificar al verse este borroso; sin embargo, por alguna razón que desconocía le encantaba estar a su lado, sintiéndose amado y sin aquel vacío que lo atormentaba.

No obstante...

Siempre en los últimos momentos de los sueños llegaba a visualizar a dicha persona con muchas heridas y algo extraño atravesando a su pecho, siendo invadido su ser por la tristeza y un dolor que creía que lo asfixiaría y el joven en todas las ocasiones decía las mismas últimas palabras antes de cerrar sus ojos y no volver a abrirlos.

"Encuéntrame"

¡No tenía idea de cómo haría eso!

Y lo peor de todo es que ninguna persona del reino compartía las pocas características que había sido capaz de apreciar del desconocido, como sus cenizos cabellos, su temperamental carácter o aquella voz que se le dificultaba describirla.

Intentó por años averiguar algo al respecto; no obstante, no fue capaz de encontrar algún indicio o pista que lo guiase hacia ese joven, sintiéndose frustrado por ello.

Conforme pasaba el tiempo dichos sueños se iban haciendo menos recurrientes hasta que a sus 16 años dejó de tenerlos de manera repentina, pareciéndole demasiado extraño. Por sus propias labores como príncipe y demás actividades, fue dejando atrás poco a poco esa búsqueda, centrándose por completo en su preparación como futuro rey.

Aquella mañana por fin contaba con un poco de tiempo libre, razón por la que decidió explorar el bosque que se encontraba a las afueras del reino, estando interesado por encontrar alguna planta o animal que no estuviese descrito en los numerosos libros que había leído.

Pronto por su curiosidad acabó por hacer que se internara mucho más de lo que pensó en un inicio, llegando a una zona del bosque en la que jamás había estado antes.

Especies desconocidas capturaron su atención de inmediato, sacando su libreta que siempre llevaba consigo junto a un lápiz para anotar varios detalles al respecto, realizando también bocetos de lo que admiraba.

Tan concentrado estaba en ello que sin habérselo imaginado tocó una trampa que provocó que de un minuto a otro una cuerda atrapara uno de sus pies, lo jalara por los aires y dejara su cuerpo colgado de la rama de un frondoso árbol.

Pronto intentó conseguir liberarse mas por la posición como se encontraba le hacía imposible el lograrlo. La situación empeoró de un minuto a otro cuando escuchó pasos acercándose, temiendo de quien se tratara puesto que ahora se encontraba vulnerable a cualquier ataque u ofensiva.

Poco a poco pudo admirar un poco de la persona que se iba aproximando...

Y simplemente no lo pudo creer

Sus latidos se aceleraron al reconocer aquel cabello cenizo y por primera vez aquel rostro borroso de sus sueños anteriores se hizo claro en su mente, coincidiendo con las facciones de la persona que tenía frente suyo.

Una gama de emociones lo invadieron en ese momento, empezando las lágrimas a deslizarse por sus mejillas y hasta olvidó por aquel instante que todavía yacía colgando del árbol.

-K-kacchan..

No supo el porque lo nombró de esa manera; sin embargo, el desconocido al escucharlo llamarlo de esa forma le sonrió.

-Deku

Y aquel reencuentro se consolidó como el inicio de su nueva historia, una en la que Izuku se aseguraría de no perder a su amado Kacchan por segunda vez.

Y aquel reencuentro se consolidó como el inicio de su nueva historia, una en la que Izuku se aseguraría de no perder a su amado Kacchan por segunda vez

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Hasta aquí el capítulo de hoy. Espero que haya sido de su agrado y gracias por su apoyo!

Con esta última parte el fanfic oficialmente queda concluido. ¡Muchas gracias por sus lecturas y comentarios! Y de igual forma me disculpo por las demoras que tuve al actualizar.

Le agradezco a chikypaz  por haberme permitido adoptar su idea y espero que haya sido de su agrado la forma en como desarrollé la historia.

Qué les pareció?

Les gustó?

Alguna sugerencia?

Nos vemos en otro fanfic ~ ❄︎

❣︎En otra vida [Katsudeku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora