💜✨22. It's been so long ✨💜

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Pov. Aiken Smith

Me había despertado al lado de mi esposo, y mientras él seguía durmiendo, mi padre tocó la puerta.

Me levanté de la cama y fui con él.

-Buenos días, padre -dije amablemente.

-Aiken -respondió serio-. Iremos a ese circo, avísale a tu marido.

-Claro.

Le respondí, mi padre se retiró a su habitación. Me acerqué a mi esposo y lo desperté, compartiéndole la noticia que mi padre me había dado.

-Amor, mi padre ha decidido que vamos a asistir al circo del que tanto se habla. Parece que es un evento importante para la alta sociedad de Manhattan.

Mi esposo bostezó y se estiró, sonriendo mientras se acomodaba en la cama.

-Bueno, parece que tendremos un día emocionante por delante. ¿Qué sabes sobre este circo?

-No mucho, solo que ha causado un gran revuelo y que mi padre considera que debemos estar presentes. Aparentemente, es un espectáculo excepcional.

Mientras nos preparábamos para el día, mi mente se llenaba de curiosidad. Si bien estaba acostumbrada a la opulencia de la alta sociedad, algo en esta situación me intrigaba. Era raro que mi padre prestara atención a eventos de entretenimiento, especialmente uno como un circo.

A medida que nos dirigíamos hacia el circo, me preguntaba qué podría haber motivado a mi padre a tomar esta decisión. Sabía que tenía una gran influencia en la alta sociedad de Manhattan, y sus decisiones a menudo tenían un propósito más profundo que simplemente el entretenimiento.

Al llegar al lugar, me encontré con un ambiente efervescente. La multitud estaba llena de caras familiares y algunas nuevas, pero lo que más me llamó la atención fue la carpa roja que se alzaba majestuosamente ante nosotros. Parecía haber una energía especial en el aire, diferente a cualquier otro evento al que hubiera asistido.

Mientras mi esposo y yo nos acomodábamos en nuestros asientos, observé a la gente que se mezclaba en la multitud. Había una sensación de anticipación y emoción, como si estuviéramos a punto de presenciar algo verdaderamente extraordinario.

El telón se alzó y el espectáculo comenzó. A medida que los actos se desarrollaban ante nuestros ojos, me encontré sorprendida por la destreza y la pasión de los artistas. Cada acto parecía llevar consigo una historia, una emoción, y me sentí cautivada por la forma en que el circo lograba evocar respuestas tan intensas en la audiencia.

A medida que el espectáculo avanzaba, mi padre y yo compartimos miradas de asombro y admiración. Era evidente que este circo era mucho más que un simple entretenimiento. Había una magia palpable en el aire, una conexión entre los artistas y el público que trascendía las diferencias sociales y nos unía en una experiencia compartida.

Y cuando llegó el acto más esperado por toda la multitud, el mundo se desvaneció por completo, un chico de cabellos morados como los míos apareció.

Mi corazón se detuvo un instante al reconocerlo, pero luego latió con una emoción abrumadora. Era él, mi hermanito. Los recuerdos de dolor y confusión que había sentido en aquellos días oscuros de su supuesta muerte se desvanecieron en un instante. No podía creer lo que estaba viendo, pero a la vez sabía que era real. Mis ojos estaban llenos de lágrimas y una sonrisa incrédula se formó en mis labios.

Mis pensamientos volaron a aquellos momentos en los que creí haber perdido a mi hermano recién nacido. El dolor que había sentido, la tristeza que había guardado en lo más profundo de mi ser, todo parecía desvanecerse ante esta revelación. Había vivido tanto tiempo con la idea de su pérdida, que verlo allí, en medio de la carpa roja del circo, era como un milagro.

✨ Rewrite the stars BxB ✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora