Capítulo 7- La tormenta consume tu recuerdo

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La alarma se digno al fin sonar a las cuatro de la mañana, no había podido dormido nada por la emoción. Decidí a eso de las dos de la mañana quedarme en el patio mirando el cielo mientras fumaba, en lo único que podía pensar era en la hermosa vista que se reflejaba en el lago...
Cuando era de noche, el cielo se pintaba de estrellas donde cada una se veía reflejada en el lago como si fuera un espejo. Cada vez faltaba menos para volver a verlo y sentir de vuelta ese sentimiento de libertad y que los recuerdos de esos años me consuman de vuelta.
Me había puesto una remera negra talle xxl enorme de "los peaky blinders" además de ser una de mis remeras favoritas tenia valor sentimental, era la remera que me regalo mi prima por mi cumpleaños. Me puse eso con un short suelto con mis converse negras, necesitaba estar cómoda aunque siempre en el camino además de ir descalza me quedaba dormida. Ni siquiera me llegué a peinar que ya estaba arriba del auto esperando a mis viejos para irnos una hora antes.
Sentía que mi pulso iba a mil, todas los recuerdos de Lautaro de las últimos días estarían ocultos por uno días y no me sentiría vacía con ganas de llamarlo , olvidarme de todo lo malo que me hizo. Llegue a cuestionarme que pasaría si lo busco de vuelta y olvidarme de todo lo malo solo por la necesidad de uno de sus abrazos aunque me destruya el corazón de vuelta.
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El viaje fue manteniendo las costumbres de hace años , la parada por unas facturas y algo de música, con charlas sobre recuerdos que nunca son innecesarios olvidar aunque se recuerden constantemente. Esos recuerdos que siempre generan una sonrisa y algunas risas.
Algunos dirían que ver el campo que rodea la ruta por horas es aburrido pero los paisajes son hermosos y únicos. Son pinturas únicas que no volveras a contemplar nunca más aunque los busques, además de que con música correcta son  sacados de un museo. Las nubes con un degrade anaranjado de fondo dándole comienzo al amanecer era perfecto.
Estos lugares, estos momentos son únicos cada sitio cambia constantemente y todos los segundos en el son lo más preciado que hay.
La radio anunciaba lluvia para eso de las cuatro de la tarde más o menos a la mitad de nuestro viaje. La emoción por la lluvia generó que la horas pasarán más rápido leyendo.
Lo que más anhelaba de todo el viaje, ver como los rayos iluminan los campos mientras la lluvia cae.
Tenía los auriculares puestos ignorando la conversación de mis padres mientras a nuestro alrededor la tormenta nos rodeaba.
"Anda' buscando una excusa para irte de aquí.
Entre yo que busco una pa' poder seguir
Siempre creo escuchar la luna hablándome de ti.
Pero son las misma' duda' que me cuestan dormir.
Anda' buscando una excusa para irte de aquí.
Entre yo que busco una pa' poder seguir
Siempre creo escuchar la luna hablándome de ti.
Pero son las misma' duda' que me cuestan dormir."
Ya tenia los ojos borrosos intentando que ninguna lágrima cayera, la lluvia ya empezaba a mojar la ventana con sus primeras gotitas. Y la carrera de gotitas comenzó.
Los recuerdos me terminaron de destruir y ya no pude contener las lágrimas. Sentía que estaba dejando todo atrás, las cosas buenas y malas. Y Samir no estaba acá para hacerme reír.
Me había mentalizado que solo en el viaje me permitiría sentirme así por que cuando llegara seria una nueva yo sin que nada me atara al pasado.
Los rayos ahuyentarán esas pesadillas y solo quedara el arcoíris al final.

𝕷𝖔𝖘 𝖗𝖊𝖈𝖚𝖊𝖗𝖉𝖔𝖘 𝖉𝖊𝖑 𝖆𝖑𝖒𝖆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora