Habían pasado muchos meses después de la ascensión de Lexa. Titus había supervisado su transición a Polis y la seguridad que ahora la rodeaba. Como el pasado nos ha enseñado a pesar de que el cargo de Heda se llevó a cabo con gran honor, Pero el asesinato por parte de los descarriados siempre fue una posibilidad. La Orden de la Llama estuvo siempre alerta.
Ante la oposición de Titus, Lexa eligió a sus propios generales, aliados de confianza que conoce desde la infancia. Me paré con orgullo a su lado como uno de ellos. El jefe de guerra de mi padre, Gustus fue otro e Indra de TonDC fue el tercero. Cada uno de nosotros leales a nuestra Heda.
Nuestro tiempo juntos se dedicó principalmente a resolver el problema actual de quienes vivían en Mount Weather. En el pasado, parecíamos impotentes para luchar contra ellos. Sus armas igualaron a las nuestras, la niebla tóxica que liberaban cada vez que marchamos por la montaña mató a nuestros guerreros instantáneamente y luego estaban los segadores. Hombres mutados que alguna vez fueron nuestros parientes, custodiaban los túneles de acceso a la montaña. Los experimentos que los Hombres de las Montañas estaban realizando con aquellos que secuestraron de nuestros clanes resultaron en la muerte o en los monstruos que se alimentaban de nuestra carne.
A medida que desaparecíamos más y más, Lexa estaba decidida a encontrar una manera de acabar con los horrores que estaban trayendo sobre nosotros. Esta fue la primera vez que la escuché hablar de una unión de clanes.
Ella se dirigió a todos sobre la visión que ahora tenía para su gente: "¿Cuándo dejará de arrebatarnos la montaña? ¿Cuando caminen libremente por estas tierras sin trajes protectores, curados de la radiación que ahora los mantiene a raya? Ganaran. ¡No debemos detenernos! Ellos nos toman ahora y nos tomarán cuando estén libres. ¡No permitiré que seamos aniquilados por estos hombres de la montaña! Solo la unión nos dará la fuerza que necesitamos para terminar esto de una vez por todas. " Habló desafiante.
Fue un movimiento audaz, un objetivo que parecía imposible de lograr. Titus tenía sus dudas al igual que el resto de nosotros, pero Lexa ni una sola vez vaciló. Su mente estaba puesta en la unificación de clanes que luchaban por nuestro futuro. Las luchas internas de los clanes tenían que cesar. Al permanecer fracturados como sociedad, les estábamos dando a los Hombres de las Montañas exactamente lo que querían. Nos tomaron con mayor facilidad cuando estábamos distraídos por la guerra, pero todos los clanes tenían sus disputas y algunos no se olvidaban tan fácilmente.
Tal unión parecía inalcanzable, una quimera para nuestro pueblo que, desde la muerte de Becca Pramheda, había estado en conflicto entre sí de una forma u otra. Ningún comandante había logrado tal objetivo, y tampoco ninguno de ellos era Lexa Kom Trikru.
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Two Warriors. | Traduccion | Clexa
FanfictionA través del vínculo de una guerrera y su segundo, se desarrolla una historia no contada del pasado. Anya Kom Trikru nos cuenta los primeros años de vida de la Comandante Lexa. Desde la joven guerrera de los bosques de Trikru, su ascenso al trono de...