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- ¿Por qué? ¿Por qué ibas a hacerle eso? ¿Por qué serías tan cruel como para apartarlo del único hogar que ha conocido, de la única familia que siempre ha tenido?

Namjoon suspiró y se levantó de la cama antes de atravesar la habitación para situarse frente a la ventana. Tenía los hombros estirados y la columna igualmente rígida.

- Tiene otra familia, mi familia. Somos los últimos de una estirpe que agoniza, lo que le convierte en una persona muy preciada. Es una señal de esperanza para el futuro.

- Me parece que ésa es demasiada presión para poner en un niño pequeño, Namjoon. Me dijiste que tienes hermanos; a mí no me parece una estirpe que agonice. ¿No estás siendo irrealista con la importancia de Yeojin? -le preguntó el rubio.

- No, según la maldición.

- ¿La maldición?

- Deja que te lo explique. Hace trescientos años, uno de mis antepasados tuvo una amante; la institutriz a la que había contratado para educar a sus hijas. Con el tiempo, le dio tres hijos; hijos que él necesitaba para continuar con el apellido familiar, sobre todo porque su esposa le había dado tres hijas. Él educó a los chicos como si fueran legítimos. Cuando su esposa murió, su amante dio por hecho que se casaría con ella. Después de todo, él ya le había regalado La Verdad del Corazón, un collar de rubíes que tradicionalmente se daba como regalo de compromiso a una futura esposa de un Kim. Pero él decidió casarse con otra y, el día de la boda, la amante se presentó en la celebración y lo acusó ante todos los presentes de haberle robado a sus hijos. Mi antepasado dijo que estaba loca y ordenó que se la llevaran. Las historias cuentan que ella les imploró a sus hijos que fueran fieles a su verdadera madre, pero se mantuvieron al lado de su padre y le dijeron que su verdadera madre estaba muerta. Antes de que los guardias pudieran expulsarla del banquete, la institutriz lanzó una maldición a la familia Kim y juró que, si en nueve generaciones no aprendíamos a vivir nuestra vida mediante el lema familiar del honor, la verdad y el amor, cada rama de la familia acabaría muriendo. Los guardias se la llevaron, pero se escapó y saltó por un acantilado y se estrelló contra las rocas del fondo. Antes de caer, sé arrancó el collar del cuello y lo lanzó al océano gritando que sólo cuando se rompiera la maldición podría regresar la joya a la familia. Recuperaron su cuerpo, pero nunca encontraron el collar.

Jimin se quedó callado. Namjoon no podía creerse todo aquello. Era ridículo.

- ¿Y tus hermanos y tu creen en esa maldición?

- No, no creíamos. Pero nuestro abuelo sí cree y es por él por el que accedimos a casarnos y a formar familias para que sus últimos años fueran felices y estuviera rodeado de los bisnietos que puedan demostrarle que no estamos malditos.

- Y aquí estás tu, con una familia ya formada - Jimin no pudo disimular la amargura que se filtraba de sus palabras.

- Park, esto no es algo que haya elegido yo. Mis hermanos y yo hicimos un pacto de honor los unos con los otros, y juramos mantenerlo. Puede que a ti te suene arcaico, pero Namseok y Yerim ya han dado los primeros pasos para hacer feliz a nuestro abuelo. Ahora depende de mí.

- ¿Pero por qué tiene que ser Yeojin? ¿Por qué no puedes casarte con otra hombre o mujer y formar una familia con esa persona?

Namjoon se apartó de la ventana y la miró antes de responder.

- Porque ya no puedo tener hijos.

Jimin ni siquiera cuestionó la veracidad de su declaración; podía verlo en sus ojos.

- ¿Por el accidente? ¿Las lesiones? Ésa es la razón?

Él asintió.

De pronto todo cobró sentido. Por eso se había mostrado tan convencido de que Yeojin era hijo suyo, por eso quería que él lo admitiese a toda costa, y por eso había insistido en que se le realizara una prueba de paternidad para estar completamente seguro de que el niño era suyo. Pero aun así no podía evitar sentir que Jin no era más que una herramienta en todo aquello. A él no le parecía bien. No había hablado de amor, ni hacia Yeojin ni hacia él. ¿Cómo iba a aceptar que su hijo se marchase a un mundo que no conocía, que tuviese la vida planeada por un hombre que ni siquiera lo quería?¿Pero qué otra cosa podía hacer? Namjoon tenía poder económico sobre Jimin.

- ¿Tenemos que vivir en Francia? -preguntó.

- Es mi hogar y el hogar de mi familia. Mi negocio está allí, así como el resto de cosas que me son preciadas.

- ¿Y qué hay de mi hogar, de mi familia, de mi negocio? Aquí es donde nació Yeojin. El Complejo Park también es parte de su herencia.

- Podemos contratar a un administrador para que se haga cargo. Estoy seguro de que mediante Internet y el teléfono podrás mantener el control sobre el lugar. Si deseas continuar con tu terapia de masajes, no me cabe duda de que Yerim considerará tus habilidades como un gran reclamo en las instalaciones que nuestra familia tiene en Francia. En cuanto a lo que queda de tu familia, Minhee podrá instalarse con nosotros. De hecho, lo preferiría porque sé que te preocuparía estar lejos de ella.

- Qué generoso por tu parte -respondió Jimin sarcásticamente.

- Muy generoso por mi parte, Jimin, deberías recordarlo. No sufrirás por esto, te lo prometo. Y las veces que regresemos a Nueva Zelanda, tendrás el anonimato y la privacidad que el dinero puede comprar. Ten en cuenta que estoy dándote todos los incentivos para hacer esto de la manera correcta, pero, si no lo haces, apelaré a la cláusula de nuestro contrato actual en la que se estipula que me devolverás todo el dinero si no se satisfacen los términos a los que llegamos. Supongo que lo que ha estado ocurriendo aquí es una prueba irrefutable de que llevas las de perder, Jimin. No había otra opción. Bajo unas circunstancias sobre las que no tenía ningún control, se veía obligado a aceptar sus exigencias. El rubio se envolvió en la sábana con más fuerza y se puso de pie frente a él, con la barbilla levantada y los ojos libres de lágrimas que lloraría en privado.

- De acuerdo, haré lo que tu digas. Pero sólo porque no me das otra opción.







¿Qué opinan sobre la maldición fumada que me aventé sobre la familia Kim? ¿Qué opinan sobre Namjoon? ¿Creen que es real? Quiero saber.

De aquí en adelante los caps serán cortitos y trataré de actualizar más seguido. Besos y gracias por leer.

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