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Hasta que un barril se cae y deja ver un pequeño túnel. Sin más opción, la mujer se agacha y empieza a atravesar dicho túnel el cual estaba lleno de telarañas

- Edith no pienses en arañas...piensa que esto lo haces por Defne...y por Stangar...que no se lo merecen...pero es el reino de Defne... vamos

Se repite una y otra vez la mujer con los ojos cerrados mientras gateaba por aquel horrible túnel, hasta que finalmente, llega hasta una sala con luz tenue, suficiente para ver a varias criaturas enjauladas y ver el gigantesco dragón de luz que había.

Contenta por tal logro, se va hacia el dragón emocionada para liberarlo cuando de repente se escucha una voz masculina a sus espaldas

- No tan rápido cuerva...

Edith al instante reconoce la voz y se gira, observando como dos hombres tienen presa a Defne y junto a ellos Kraith

- ¡Suéltala..!

Grita Edith desde su posición preparando sus plumas afiladas

- ¿Desde cuándo ayudas a la realeza?

- No te incumbe...sueltala

- ¿Como voy a soltar a tal belleza cuando puedo hacer lo que me plazca con ella?

Ante las palabras del hombre, Edith enfurecida se dispone a lanzar un par de plumas hacia el hombre, pero este en un movimiento rápido, realiza un chasquido haciendo que la mujer quede totalmente paralizada

- Dejarme a la rubia atada en mi cuarto y a la cuerva congelada en una esquina

Ante las órdenes de Kraith, los dos guardias llevan presa a la mujer hacia el cuarto del hombre. Defne forcejea para intentar no entrar a dicho lugar, pero sin éxito entra. Al entrar, la mujer ve una habitación bastante oscura con las paredes pintadas de rojo y en medio del lugar se encuentra con una cama con grilletes en sus esquinas.

Luz contra OscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora