Luz contra Oscuridad

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Mientras tanto en el bosque, las dos mujeres se encontraban caminado hablando de cosas triviales cuando de repente se ven rodeadas de chimpancés venenosos

- Defne...¿ves su colas que la punta es de color morado ?

- Si...¿Que ocurre con eso?

- No dejes que te toquen con ellas...son venenosas...

Dice la mujer sin hacer el mínimo movimiento, cuando de repente una cagada de cuervo le cae a Edith en el hombro

- ¡Steve serás guarro!

Grita la mujer mirando hacia arriba enfada, provocando que los chimpancés se lanzarán sobre ellas, ante eso, Defne corre hacia la mujer y se tira encima de ella para crear un escudo de luz alrededor suyo, quedan cara a cara encima de ella, Edith al tenerla tan cerca no puede evitar desviar su mirada hacia sus labios, tenía un impulso inexplicable de juntar sus labios junto a los de las mujer hasta que los gritos de esta le hacen volver en sí

- ¡¿Edith que hacemos?! ¡Haz algo!

La rubia se levanta de encima de Edith y esta se concentra haciendo que todos los cuervos que se encontraban volando cerca del lugar caigan disparados hacia los monos,  matando así alguno de ellos pero el escudo de luz cada vez era más debil, Edith al ver eso prepara algunas plumas afiladas que salen de sus dedos

- Cuando te siga dejas de hacer el escudo

- Vale...

Dice con algo de dificultad la mujer al intentar aguantar el escudo

- ¡Ahora!

Como habían acordado, la mujer después de gritar, Defne deja de hacer el escudo y rápidamente Edith lanza las plumas afiladas en los ojos de los monos, mientras que la rubia con los rayos de sol ciega a los chimpancés, pero de repente una mano gigante dorada sale de la tierra y agarra a las dos mujeres sin escapatoria.

Ante la mano, los chimpancés dejan de atacar y se quedan inmóviles mirando como las dos mujeres intentan escapar de la gigantesca mano dorada, mientras que al frente se iba acercando un hombre con máscara azteca de infinidad de colores y plumas, con un taparrabos con detalles dorados que conjuntaban con la capa, un colgante con una gran decoración de colores azules y dorados en su descubierto pecho y una gran cantidad de tatuajes dorados por todo su cuerpo

- Oh no un aztekis...

- Exacto soy un aztekis aunque tengo un nombre propio, me llamo Azaem pero tú no me interesas, me interesa su majestad

Después de eso, la mano suelta a Edith que enseguida es atrapada por los chimpancés mientras que la mano dorada aún sujetaba a Defne

- Chimpancés, llevarla junto a las panteras explosivas, seguro que quieren cuervo chamuscado

- ¡No, soltarme!

Grita Defne intento liberarse de la mano al ver que se llevaban a la mujer lejos de ella