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Xiao, el pequeño Adeptus, se encontraba realmente nervioso al escribir aquella carta, no sabía cómo expresarse mediante palabras, normalmente se iría a otro lugar a maldecir las pocas palabras mencionadas por este, así que optó por hacerlo por escrito y mostrar sus sentimientos más abiertamente a su respectivo amante.

Zhongli intentó ayudar al Adeptus con la pequeña carta, pero este se negó, dijo que era un asunto privado entre prometidos... o quizá.. pareja(?). El ex arconte no insistió, lo que le resultó raro al Adeptus.

Normalmente insistiría en ayudarlo pero en estos momentos Zhongli no miraba de la misma manera a Xiao,
el Adeptus notaba aquellas expresiones en él, le resultaba raro, pero no dijo ni una sola palabra para no empeorar la situación.

Antes, el ex arconte le miraba de forma segura y tal vez.. cariñosa, a Xiao no le molestaba, más bien se sentía seguro a su lado, pero todo cambió cuando un día se despertó en medio de la oscuridad, habían atacado Liyue pero él cayó inconsciente y despertó a la medianoche entre la multitud, cabe destacar que su prometido en esos momentos seguía con él y ayudó en aquella pequeña guerra entre el Abismo y Liyue. Desde aquel día, Zhongli, miraba al Adeptus con una expresión de tristeza y nerviosismo, el Adeptus siempre se preguntaba si había hecho alguna cosa mal o había enfadado al ex arconte.

Xiao dejó a Zhongli paseando por la posada Wangshu mientras él intentaba escribir su carta, ya había escrito varias, pero ninguna acabó como esperaba, muchas fueron hechas trizas, otras fueron conducidas por el viento a algún lugar lejano, y una en especial fue rota por el mismo lápiz que usaba el Adeptus.

Empezó a escribir sobre si el chico estaba bien, si estaba en un lugar a salvo de algún peligro. Cada vez que escribía se le escapaba alguno que otro suspiro, no podía ver al amor de su vida y eso le afectaba bastante, había sido abandonado por su actual pareja, no se había despedido de él, no lo había abrazado como siempre hacía cuando ambos se separaban, no lo había besado...

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20 de febrero de 2022

Querido Aether:

Aether, soy Xiao, ¿estás bien?,¿te encuentras bien?,¿estás cuidando de ti?,¿dónde estás?,¿por qué te fuiste sin avisarme?------ olvídalo, no te arriesgues y ve con cuidado, di mi nombre si necesitas ayuda, sabes perfectamente que iré a ayudarte si estás en las zonas de Liyue.

Por favor vuelve conmigo, en Liyue te extrañamos bastante, sobre todo yo.. te fuiste sin decir nada, no sé cómo reaccionar ante ello.
Cuando desperté no me acordaba de lo que había ocurrido posteriormente, me explicaron que había caído inconsciente y que tú te habías marchado a otra nación, pero.. ¿Por qué?,¿por qué justamente en ese momento?,¿por qué no esperaste a que despertara?,¿hice algo mal?, si es así te pido mil disculpas.

Dejando el tema de lado, la señorita Ningguang vino hoy a visitarme sin ninguna razón en concreto, no lo entendía, me miraba de forma extraña, pasaba lo mismo con el maestro Zhongli, me miraban con tristeza(?), no lo sé, nunca llegué a sentir algo, así que no estoy seguro.

Zhongli me comentó de que vendrían a visitarme constantemente, pero no dió ninguna explicación, no respondió a mis dudas como siempre lo hacía, ignoré la situación para no empeorarla.

¿Sabes qué? Tengo hambre, quiero comer tofu de almendras, pero.. no quiero un tofu de almendras cualquiera, quiero uno hecho por ti, por tus pequeñas y frágiles manos, cada vez que degustaba el plato ya mencionado, algo en mí comenzaba a vibrar,¿era mi corazón?, no lo creo, cuando vuelvas, por favor, prepárame uno.
Un abrazo,

Tu querido Xiao.

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─¿Xiao?,¿estás ahí?─ Preguntó el ex arconte asomándose por el marco donde finalizaba la habitación. Zhongli miró a ambos lados en busca del pequeño Adeptus, hasta que visualizó a un pequeño sujeto abrazándose a si mismo mientras miraba un trozo de papel.─ Xiao,¿estás llorando..?

𝘿𝙖𝙧𝙠𝙣𝙚𝙨𝙨─-.𝘟𝘪𝘢𝘰𝘵𝘩𝘦𝘳-- (SE IRÁ PRONTO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora