EL PRECIO DE UNA PROMESA ROTA

8. AURORA

NARRACIÓN DE ABRIL
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- Amor ya es hora de irnos, es día en el cual nos indicaran si la demanda prosigue.

- Amor, y si nos quitan a mi pequeña, tengo miedo.

- Tranquila lucharemos por nuestra hija, no estás sola, me tienes a mí, y a toda tu familia - mientras me da un cálido abrazo, no dejo de sentir miedo

Esta era la primera audiencia para la demanda que había colocado Alexander en mi contra, los resultados que hablamos junto a Will, y con la  prueba de ADN, la misma iba a proceder.

El entrar a la sala fue la peor experiencia de mi vida, los nervios me consumían, tenía tanto miedo, como nunca antes lo había hecho, tome asiento junto a mi abogada, Era una chica con cabello negro, ojos miel, alta, muy bonita.

- Abril, necesito que respires - me dijo Tatiana, era amiga de mis hermanos, y trabajaba en uno de los bufete de abogados más prestigiosos del país.

- Lo intento- pero no sientes las miradas

- No es momento de eso, te pido que respires, no puedes estar así de alterada.

Todo transcurrió, según lo que habíamos planeado, hasta que el abogado Lombardi, el cual defendía a Alexander pidió la palabra.

- Buenos días estimado Juez Fiore , queremos solicitar que mientras se realice el jucio, la custodia de la niña Aurora Sanders, sea dada a su padre Alexander Sanders- todos nos quedamos viendo, no tenía sentido solicitarlo en la primera audiencia, pero lo hicieron, la sonrisa burlona con la que me miraba me decía que tenía un as bajo la manga, y no me equivoque.

- Señor Lombardi, eso solo se haría si tuvieran pruebas de que la menor se encuentra en riesgo junto a su madre. - pero eso no tenía sentido nunca sería capaz de lastimar a mi  pequeña.

- Si, me permite quiero presentarle este informe médico, sobre la salud mental de la señorita Rossi- esto no me lo esperaba, acaso era posible

Y así, uno de mis mas grandes secretos salió a la luz, mis ganas de llorar estaban presentes, pero sentí la mano de mi amor en mi hombro.

- Tienes que estar tranquila, no debes dejar que ella salga, cariño intenta controlarte - me decía con un tono calmado.

- Deme las pruebas que dice que tiene- dice el Juez en cuanto empieza a leer los docimemtos que tiene en sus manos, veo que intenta estudiarme con su mirada, me muestro lo más serena posible.

-Además, señor juez tenemos un video, de la señorita Rossi, haciendo un escándalo en la casa de mi cliente. - en cuanto reproducen el video me quedo congelada, realmente soy yo, con una bata de hospital, mientras golpeo, a pesar de no tener sonido, parezco una loca, pero no recuerdo nada de eso.

- Señor juez, la información médica de mi cliente, es un documento médico legal, al cual ellos no deben tener acceso. - dijo mi abogada, mientras yo me encontraba recordando como respirar

- A lugar.

- Señor juez, las imágenes grabadas en el departamento de mi cliente, demuestran que la señora Rossi, es un peligro tanto para ella misma, como para su hija, además si una vez ella escapo del país, nada asegura que vuelva a hacerlo.

Todo lo demás, solo sonaban como palabras vacías, Alexander había usado bien sus cartas y ahora estaba a punto de perderlo todo, estos casos podían durar meses, en los cuales podría estar lejos de mi pequeña. Hasta que escuche la decisión del juez.

- Dado a las pruebas presentadas por la parte demandante, se toman las siguientes decisiones:

1. Le concedo que se cambie el apellido de la menor de Brown por Sanders
2. La custodia la tendrá en padre de la menor, durante este proceso legal.
3. La madre debera ser sometida a un estudio psiquiátrico semanal, durante un mes, y al final deberá traer el informe de la capacidad mental de la misma.
4. Podrá tener visitas supervisadas, tres veces a la semana durante dos horas.

Realmente no puedo creerlo tengo el corazón destrozado, me quitan a mi pequeña Aurora, la sonrisa triunfante de Alexander no puedo olvidarla, todo lo que podía salir mal, lo hizo, terminé llorando en ese mismo lugar, sentía que me faltaba en aire, como podían separarme de mi pequeña, me sentía
destrozada.

Todos empezaron a salir, pero no podía ni moverme.

- Princesa debemos ir por Aurora, necesito que estes fuerte, ella nos necesita. - me dijo Will, mientras me ayudaba a levantarme.

Me sentía perdida, deseaba que saliera aquella mujer que acaba de arruinar mi vida, pero yo no controlaba nada de esto, al llegar a mi casa, intente dejar de llorar, porque tenía que hablar con mi niña, mientras Iker fue a preparar su maleta, nos dirigimos junto a mi amor al patio, donde se encontraba jugando junto a su abuela.

En cuánto nos vio corrió a abrazarme

- Mami, no llores, yo te amo- me dijo mientras estiro sus brazos para que la cargue

- Mi princesa, te acuerdas de la historia que te sabemos contar.

- ¿ Cuál papi?

- De la que tu eres una princesa muy afortunada, porque tienes dos papitos.

- Si soy una princesa, quiero ser Mulan- dijo mientras soltaba una risa

- Si mi amor, como ella debes ser muy valiente, porque el papito que tuvo que viajar lejos para proteger tu otro reino, ahora quiere pasar unos días contigo.

- Mami, mi otro papa te hizo llorar verdad, me dijo mirándome a los ojos

- No mi niña, solo te voy a extrañar mucho, por eso lloró

- Y ustedes no pueden venir conmigo- decía mi pequeña mientras secaba mis lágrimas

- Mi amor, tómalo como una nueva aventura-

- No quiero papi, les prometo ya no hacer travesuras y ser una niña buena, pero no me manden lejos de ustedes, yo los amo. - mi pequeña se puso a llorar

- Lo eres mi amor, nunca lo dudes- dijo Will mientras nos abrazaba a las dos, el también le salieron unas lágrimas.

En este momento, existían tres corazones rotos, Will nos dio besos en nuestras frentes, e intento limpiar las lágrimas, como desearía que mi hija sea realmente de mi amor, ahora no se como haría con este dolor.

- Hija, llego Alexander- dijo mi madre, con lágrimas en los ojos- Me dolía tanto separarme, era como si me quitaran un pedazo de mi corazón.

- Tranquilos yo puedo llevarla - nos decía Iker, pero mi pequeña estaba bien sujeta con sus bracitos alrededor de mi cuello, Will poso su mano en la parte baja de mi espalda y así fuimos a la puerta de entrada, al verlo por primera vez desde que lo conocí, relamente sentí odio por Alexander, era un ser desalmado.

- Pequeña soy Alexander tu papá- Dijo mientras mi pequeña se aferraba a mi.

- Mami no me dejes porfavor - llorando

Baje con mi pequeña hasta quedar de rodillas a su altura, tome su carita entre mis manos - mi amor te amo con todo mi corazón, tu papito quiere pasar unos días contigo, eso significa que vas a tener mas amor

- Si pequeña, ven conmigo- el extendió su mano, pero ella no la tomó, corrió a donde Will, y el también se arrodillo para estar a su altura.

- Mi princesa, ya no llores, recuerdas que quieres ser como Mulán

- Si papi, te prometo ser valiente, prometan no olvidarse de mi. - nos acerca a los dos y nos abraza.

Veo como nos da un beso a cada uno, y acepta la mano de Alexander, al verla salir por esa puerta, me desarme, seguí llorando como una niña, Will me llevo en brazos a nuestra habitación, no podía pensar en nadie más, solo me acurruque en su pecho y lloré toda la noche.

REALMENTE QUERÍAS DESTRUIRME, LO CONSEGUISTE, AHORA DIME SI TODO VALIÓ LA PENA.

Realmente lloré mientras escribía este capítulo, cuantas veces se pone a los niños en el medio de batallas de adultos, han escuchado esta canción es hermosa.

Espero que disfruten este capítulo, no se olviden de comentar que les parece, ¿Qué piensan que sucederá?, y voten gracias por el apoyo