CAPÍTULO 3

1.8K 169 86
                                    

El trabajo hasta ahora transcurría con calma, habían llegado más o menos como 6 clientes en un lapso de 2 horas.
Agradecías que la carnicería tuviera aire acondicionado, sino habrías terminado desmayada por el intenso calor de Texas.

Hasta ahora los clientes que habían llegado parecían ser personas amables y parecían conocer ya este lugar, Drayton había saludado a un par de personas cuando venía a echarse sus rondas para ver cómo es que estaba yendo el negocio o si necesitabas algo.
Él te había mencionado que las personas que venían eran del pueblo cercano y que era muy raro que a veces vinieran turistas a comprar carne aquí.

Una pareja de personas de la tercera edad entraron y enseguida pidieron la carne que llevarían a casa.
A paso rápido te acercaste a la habitación que Bubba usa para hacer sus cortes y abriste la puerta algo apresurada sorprendiéndolo, eso provocó que el cuchillo se resbalara de sus manos y cayera al suelo con un ruido sordo, incluso habías notado el chillido de cerdo que escapó de él.
-¡Bubba!, lo siento muchísimo no quería asustarte- te acercaste a él y levantaste el cuchillo para entregarlo de vuelta a sus grandes manos.

—A la próxima creo tocaré- tu voz sonaba nerviosa, estabas apenada por el susto que le diste al pobre chico.

Bubba soltó las mismas galimatías que escuchaste salir de él cuando lo defendiste ayer, era cierto que no pudiste captar lo que dijo pero por su tono pensaste que era su forma de decirte "no te preocupes, estoy bien".

—¡Oh! Cierto, vengo a entregarte el próximo pedido- le entregaste la pequeña hoja de notas y él la recibió con gusto dándote un leve asentimiento.
Estabas dispuesta a salir de la habitación pero te detuviste justamente en la entrada.
Anteriormente habías pensando en darle tu número de WhatsApp a Bubba para que los pedidos fueran más rápidos y él estuviera enterado al momento sin que tú tuvieras que ir y volver a cada momento.

—Eh, Bubba, escucha estaba pensando en que tal vez podrías pasarme tu número telefónico- le dijiste sin rodeos.
Los ojos de Bubba se agrandaron, y dejó con notable lentitud el cuchillo en la mesa de cortes.

—¿Y cómo para qué necesitas el número del imbécil de mi hermano?- la voz de Drayton apareció detrás tuyo provocando que soltaras un agudo chillido.
Tus mejillas se colorearon de un rojo intenso al escucharlo, ni siquiera le habías explicado a Bubba para qué querías el número, debe hacer pensando otra cosa al igual que Drayton.

—¡E-Es para que la productividad sea más rápida! Y bueno... espera... ¿¡hermano!?- cambiaste de posición para que tu mirada estuviera puesta en los dos hombres, tus ojos se movían de un lado a otro a los rostros de los dos hermanos.

—Ah, sí creo que había olvidado decirte que Jed es mi hermano menor, ha seguido el legado familiar.
Esta carnicería al igual que la gasolinera ha pertenecido a la familia Sawyer desde los años 70's- tus ojos se agrandaron con sorpresa, ni siquiera se te vino a parar en la cabeza que estos dos compartieran sangre, la diferencia entre ambos es demasiado notoria.

—Y bueno, ¿ibas a explicar algo?- te recordó.

—Oh, sí, claro bueno había pensado que si Bubba me pasaba su número de celular la productividad sería más rápida y no tendría que dar vueltas y vueltas para darle un nuevo encargo.
Los pedidos le llegarían enseguida y él podría avisarme al instante cuando esté listo- explicaste luchando por no tartamudear.
Drayton se vio pensativo por unos segundos, seguramente procesando lo que le dijiste.

—¡Parece que tenemos aquí al futuro del negocio de los Sawyer!, bien pensado, señorita. Es una gran idea-

—Qué, oh, eh... ¿E-Enserio?-

—¡Totalmente! Así que ya escuchaste, Bubba, ¡que sea rápido tenemos clientes esperando!- finalmente salió de la habitación dejándolos solos.

—Espero que no te moleste, pero de verdad verás que esto nos beneficiará a ambos- le sonreíste mientras sacabas tu celular.
Las manos temblorosas de Bubba se despojaron de los guantes ensangrentados, desechándolos en la basura para después sacar su celular del bolsillo delantero de su pantalón y finalmente ponerse ambos manos a la obra en el intercambio de números.

Pedazos de amor (Leatherface X Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora