CAPÍTULO IX: VERDADES

64 30 55
                                    

CAMPAMENTO IMPROVISADO DEL ESCUADRÓN:

Después de esa trágica noche, Mel sintió que se había quitado un peso de encima, al menos Kendall lo había aceptado, ahora solo debía esperar a decir su secreto ante los demás del escuadrón, en especial Lazarus; sin embargo no era el único que tenía un secreto oculto, ninguno y a pesar de llevar tantos años trabajando juntos, descubriendo un propósito, podía decir que conocía a la perfección a sus compañeros, todos ocultaban algo que tarde o temprano saldría a la luz. La mañana transcurrió de manera normal, pero Mel estaba algo angustiado, miró casi con desespero a Herzel, quien terminó de curar (hasta donde su poder se lo permitió) a Lazarus, tenía la mitad de su cuerpo para arriba vendado, él solamente tenía una venda en sus brazos, los recuerdos de la pasada noche llegó a él haciendo sacudir la cabeza para deshacerlos, tomó aire antes de preguntar.

-Se recuperará, ¿Verdad?-.

-Sí, aunque será un proceso doloroso, noto que Lazarus ha podido reponer la mayoría de sus heridas dado su naturaleza Nosferatu , sin embargo la herida del pecho le tomará más tiempo-. Terminó de cambiarles las vendas cuando Kendall entró a la carpa.

-Buenos días-. Ambos le respondieron el saludo. -Venía a buscarlos, los mellizos ya terminaron de preparar el desayuno-.

-Bien, dejaremos que Lazarus termine de recuperarse-. Habló Herzel mientras salía de la carpa acompañada de Kendall, este al ver que Mel no se movía se dio vuelta para verlo.

-Adelántense, necesito hacer algo-. Kendall asintió y los dejó completamente solos, no sabía por donde empezar, mientras pensaba un quejido lo sacó de sus pensamientos, era Lazarus que intentaba alcanzar su poción de sangre sin éxito. -Veo que necesitas ayuda-. Le tendió la poción, Lazarus lo miró con algo de enojo antes de gruñir a modo de quejido y mirarlo fijamente.

-Qué ironía, ayudado por el casi me mata anoche, ayudado por el que me tiene postrado en esta cama como un inválido -. Dijo Lazarus mientras recibía la poción y se levantaba para beberla, Mel se sintió un poco apenado, pensaba en rendirse, pero sabía que eso sería un acto de cobardía. -¿Es una oferta de paz?-.

-Podría decirse-. Habló con bastante nerviosismo haciendo que Lazarus lo mirara con una ceja arqueada mientras abría la poción y miraba los vendajes de su blanquecino y trabajado cuerpo negando con la cabeza. - Escucha tal vez no me creas, pero no quería hacerte daño anoche-.

-¿En serio?-. Preguntó irónicamente antes de darle un sorbo enorme a la poción y reír por lo bajo de manera irónica, Mel trató de imitarlo pero sin éxito, tenía ganas de salir corriendo y dejarlo todo así, pero eso significaría que su confianza fuera puesta en duda, sentía que Amoux se estaba aburriendo, carraspeó.

-Te dije que no me creerías, sin embargo mi alter ego Amoux, que creo que ya lo conociste anoche-. Lazarus asintió antes de acabarse la poción y acostarse de nuevo suspirando agradecido por la poción. -Él y yo somos diferentes, yo soy alguien amable y entregado a su trabajo y Amoux, bueno, él era algo retrogrado y estaba cegado por el odio y la rivalidad entre  Werewolves   y Nosferatus , solo le importaba destrozar y alimentarse-.

-¿Estaba?-.

-Sí, anoche creo que recapacitó aunque no es muy sentimental y odia cuando la gente actúa de esa manera, se disculpó y renunció a esa rivalidad, sin embargo no significa que no ataque cuando vea uno de tu clase, actuará por instinto, actuaremos querré decir-. Se quedaron callados un momento. -Así que, ¿Estamos en paz?-.

-Tal vez-. Le respondió mirándolo de reojo antes de reírse y contagiar a Mel. -No eres el primer Hombre Lobo con el que tuve un enfrentamiento y no serás el último, pero al menos tendré un aliado-.

EMBLM- LIBRO 2 / EL ATAQUE DE LOS MUNDOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora