EMBLM- LIBRO 2 / EL ATAQUE DE LOS MUNDOS

CAPÍTULO FINAL XIX: VICTORIA

*De vuelta con Kobus y Scorpius en la guerra*

Kobus, quién ahora parecía tener el poder infinito en la palma de su mano, manejaba la espada que Ramsey le había regalado para acabar contra los centauros corruptos y demonios que trataban de aniquilarlos, usaba sus pesadas y enormes alas de dragón para cubrirse de las flechas que lanzaban sus rivales, además de que a veces giraba con su espada y desintegraba a los demonios con solo tocarlos, Jawzahr lanzaba enormes llamaradas que ayudaban al dueto a mantenerse a raya, Scorpius usaba su báculo y sus poderes ancestrales para mandar a volar a sus enemigos y hacer un escudo mágico, cuando tenía que enfrentar a los demonios, los golpeaba tres veces con su báculo en la cabeza para posteriormente elevarse y clavárselos, luego elevarlos con magia e invocar su báculo para finalmente atravesarlos por la mitad. Ambos seguían luchando bajo la atenta mirada de Zigor Bastián quien los observaba a lo lejos detrás de un matorral, sonreía de lado porque sabía que poco a poco  estaba consiguiendo su objetivo.

-Nos veremos muy pronto, amigo mío-. Dijo antes de desaparecer sin dejar rastros, los dos estaban aniquilando a los últimos centauros mientras Jawzahr se alzaba por los cielos para posteriormente desintegrar a tres de los rivales con sus enormes llamaradas.

-Casi que no termina esto-. Comentó Scorpius mientras clavaba su báculo con punta en el pecho de uno de los centauros, para posteriormente rematarlo, sacar su arma, girarla y guardarla finalmente.

-Tenemos suerte de estar vivos-. Corroboró Kobus después de haber decapitado a un demonio  patear su cuerpo para que cayera, guardó su espada y fue a corroborar si su Nidhogg estaba bien, cosa que por fortuna así era, sin embargo Jawzahr estaba en guardia.

-Me pareció ver a alguien a lo lejos-. Con su hocico señaló hacia el lugar donde minutos antes estaba Bastián. -Parece que estaba bastante feliz por algo, además de que no dejaba de mirarlos, parecía interesado en algo-.

-O más bien alguien-. Habló Scorpius con seriedad mientras miraba el horizonte, Kobus se asustó un poco porque pensaba que seguramente el director  había enviado a alguien para seguirlos el mismo Simeone los estaba buscando por venganza y llevarlos a rastras al Castillo.

-No lo sé pero tengo dos opciones: O alguien de la escuela como el exdirector o nuestro exlíder podrían estar buscándonos para hacernos pagar por incumplir las normas o tal vez mi hermano que es algo sobreprotector y no quería que abriera mi mente-. Comenzó a hablar con algo de nostalgia, sin embargo cambió su semblante rápidamente. -Como sea, ojalá no tengan suerte encontrándonos, acamparemos y saldremos mañana al alba a la primera fuente de poder-.

-Bien, yo me encargaré de hacer la carpa y la fogata, ahora es tu turno de buscar comida-.

-Como digas, "Jefe"-. Le respondió sarcástico Kobus mientras hacía un saludo militar y caminaba de espaldas, Scorpius solamente rodó los ojos mientras se ponía a recolectar ramas y leña para la fogata con ayuda de la mascota de su mejor amigo, Scorpius no quería parecer un chismoso por meterse en la vida de Kobus o sonsacarle información a Jawzahr, pero debía admitir que también no había sido del todo sincero con él y viceversa porque no le había contado sobre Jeremy y su secreto, el cual algún día tendría el valor de decirle...

INFRAMUNDO:

Por otro lado Zigor Bastián, después de haber desatado un gran caos y haber abandonado la guerra sin apenas pelear o apuntar su arma, actuaba desde las sombras haciendo daño a los mundanos, todo por un deseo de superioridad y complejo de Dios castigador, sin embargo buscaba atraer a Kobus para convertirlo en su aprendiz y así dominar el mundo,  dejarle un legado por si algo malo llegara a pasar; había aprovechado para vigilar a Kobus y estaba contento con lo que había logrado, sabía que Kobus tarde o temprano despertaría su deseo de saber más acerca del mundo mágico, siguió caminando hasta llegar a su trono de huesos.