Capítulo 23

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Hoy es el 2do día de tests en Bahrein, estoy emocionada porque la temporada está a punto de empezar y los autos de mis pilotos favoritos rinden muy bien de momento. Admito que me lo he pasado muy bien aquí, me llevo muy bien con todos.

Mi mejor amigo, Charles terco Leclerc, pidió una habitación para mi sola, le dije que no era necesario pero dijo "Necesitas tu espacio, pero no tanto asique estarás al lado de mi habitación. No es tema de discusión Sara, o aceptas o aceptas" pero eso no es una novedad ya sabemos como es Charles.

Llegamos juntos al paddock en uno de los ferrari de Charles. Bonito por cierto pero por nada cambio el McLaren.

- ¡Sara! - gritó alguien desde lejos, obviamente era Lando, quien más podía ser.

- ¿Decidiste correr al paddock? - le dije entre risas. Charles reía conmigo.

- No, sólo que no encontré un estacionamiento cerca y necesito hablar contigo - dijo Lando secándose el sudor de la frente.

- Esa es mi señal - dijo Charles despidiéndose - te veo en un rato pequeña.

- Bien, no hay cámaras ni nada, asique es tu momento de hablar - le dije a Lando señalando a los alrededores.

- Necesitamos un tiempo - dijo Lando sin rodeos, se le notaba un tanto triste.

- Lo sé, eso te dije hace unos días - le respondí obviamente.

- Si, pero me refiero a tiempo - dijo Lando - yo necesito pensar que haré con Tamara, tengo claro que te quiero Sara. Pero para intentar algo contigo necesito ver como le hago para alejarme de una vez por todas de Tamara. Y eso incluye darte tu espacio también, sé que dices que "no lo necesitas" pero no quiero hacerte daño. Volveré a ti cuando todo esté mejor. Pero que quedé claro que no te dejaré sola ni un momento, si me necesitas ahí estaré independientemente de cualquier cosa.

- Asique si reflexionaste - le dije sonriendole - me alegra que pienses las cosas Lando. Obviamente aún podemos seguir siendo buenos amigos eso no tiene por qué cambiar. Aquí estaré cuando decidas volver.

- Bien, entonces...¿vienes al paddock de McLaren conmigo? - pregunto con una media sonrisa.

- Me lo pensaré, tal vez mañana me pase por ahí - le respondí devolviendole la sonrisa.

Luego de eso charlamos unos minutos más y cada uno se fue para un lado. Lando hacia McLaren y yo hacia Ferrari.

Claramente ahí me esperaba Charles, le conté lo que sucedió y el dijo que tal vez de momento eso era lo mejor. No niego que extrañaré a Lando, pero eso no me preocupa, siento que él y yo tenemos algo real y si es así, tarde o temprano estaremos juntos.

La tarde fue tranquila, al terminar el test de hoy me puse a caminar por el paddock.

- ¿Te gustan los atardeceres? - preguntó el piloto mayor de Mercedes mientras se me acercó.

- Les tengo un cariño especial - le dije regalándole una sonrisa amistosa.

- Imagino que tiene una explicación - dijo curioso Lewis.

- Me recuerda cuando mis padres me llevaban a ver los atardeceres - le dije - en mi ciudad era muy difícil encontrar un lugar tranquilo asique mis padres se las ingeniaban para llevarme a ver cada atardecer. Decían que era algo que siempre nos mantendría unidos a pesar de la distancia.

- Ellos están en Chile, ¿verdad? - preguntó.

- Sí, de hecho Lando me ayudó a conseguirles entradas para el gran premio de Gran Bretaña - le dije a Lewis - ahí los conocerás.

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