Capitulo 41 (Maratón 6/7)

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ĺbamos ya de regreso a casa de los Meyer, después de pasar prácticamente la mitad del día en los juegos de la heladería.

Mi celular comenzó a sonar, escarbé en el desorden que había en mi bolsa hasta que lo localicé. Era el número de mi casa.

-¿Si?

- Señorita Emilia - se escuchó del otro lado de la línea - Su madre pregunta que a qué hora llegará.

- Dile que no llegaré - contesté seria y noté como Claudio volteaba a verme y luego regresaba su mirada al camino - Dile que me quedaré en casa de Silverio. - Luci, una de las encargadas de la casa, tapó la bocina y escuché como le repetía mis palabras a mi madre quien apuesto todos mis vestidos a que estaba perdida en su laptop y hablando por su celular.

- Dice que está bien que tenga cuidado - ahora necesitaba hablar con Silverio. Colgué y dejé presionado el uno, que era la marcación rápida para mí mejor amigo, llevé el celular a mi oído.

Claudio's POV

¿Con esa facilidad la dejaban quedarse en casa de Silverio? Se la había pasado todo el día fuera y porque simplemente no le apetecía llegar a su casa no lo hacía.

- ¿Silverio? ¿Dónde estás? - dijo pasando una de sus manos por su cabello- ¿Me puedo quedar en tu casa hoy? - preguntó y volteé a verla, una sonrisa se coló por sus labios - Gracias - dijo entusiasmada - Ahorita nos vemos -presionó el botón rojo.

Una vez más volteé a verla, ella también volteó y me sonrió arrugando la nariz. Regresé mi mirada al camino.

- ¿Y cuándo vendrás de nuevo? - le preguntó Mariana a Emilia al momento que se despedía

- P-Pues... Yo - balbuceó y levantó su mirada buscando la mía - Pues cuando tú me invites - le dijo sonriente

- ¡Ahora! - Mariana comenzó a saltar-
Quédate más, ¿Sí?

- Si dile Clau - me pidió Pablo

-No niños - dije con un tierno tono de voz - Es tarde, y mañana tienen colegio al igual yo - les expliqué pero era imposible hacerlos cambiar de opinión.

- Vayan adentro ya - les dije y ambos voltearon a verme ¿Tristes?

- Está bien - dijeron al unísono, ambos dieron un beso en la mejilla de Emilia y caminaron enfilados hacia la casa.

- Bueno... - alargó caminando hacia su auto - Adiós Meyer - ¿Qué? ¿Así nada mas? ¡Mierda! ¡Eso es! ¡Eso es lo que precisamente odio de ella! En un momento es una y a los pocos minutos ya es otra.

Caminé detrás de ella y cuando intentó abrir la puerta puse mi brazo y volví a cerrarla.

-¿Se puede saber qué haces? - preguntó dándose la media vuelta

- No dejaré que te vayas - dije firmemente acorralándola poniendo mis brazos a sus costados, ella abrió sus ojos como platos - No hasta que me prometas que no saldrás con Christian.

-¿Y por qué habría de prometerte eso? -frunció el ceño - ¿A ti que te importa si salgo con él o no?

- Solo no quiero que salgas con él. - ni siquiera yo sabía el por qué de mi petición.

-¿Celos? - preguntó tratando de provocarme, no le diría lo que quería escuchar.

- Sabes de sobra que no.

-Lo que yo sé es que te mueres de celos de que salga con Chris pero no tienes el suficiente valor para decirlo - te está provocando Claudio, no caigas - ¿Lo ves? - sonrió macabramente - Te gusto... - subió sus manos lentamente por mi pecho hasta mi cuello - Incluso sé que crees que soy linda - gracias Mariana.

-N-No.

- Oh por favor Clau - me interrumpió con fastidio - Deja de hacerme perder el tiempo y deja de perder tu tiempo -forcejeó tratando de hacerme a un lado pero no logró ni moverme un centímetro.

- Dejaré de hacerte perder el tiempo hasta que me digas que no saldrás con Christian - insisti, simplemente no quería que lo hiciera.

- ¿Por qué Claudio? - gritó molesta.

- Porque no quiero que salgas con él.

-¿Qué? ¿Ahora tú me dirás con quién salgo y con quién no?- dijo irónicamente. Realmente quería salir con Chris.

- Así es - sonreí.

- ¡Ah! ¿Y se puede saber con quién si puedo salir?

- Con nadie. - la acorralé aún más, pero esta vez posé mis manos sobre su cintura y sin darle tiempo a reclamarme algo uní nuestros labios. Por primera vez se negaba a corresponderme. Uní nuestras frentes dejando de besarla y subí mi mano a su cuello - No te creo en lo absoluto que quieras salir con él. - mentí. Tomó mi mano y la quitó.

-¿Tu qué crees Claudio? ¿Que voy a seguir detrás de ti soportando tus rechazos? Ya lo intenté. ¡Me gustas Claudio! Pero ya me cansé. - se dio la media vuelta y de nuevo intentó abrir su auto, esta vez no se lo impedí.

Me, myself & I (Claumilia)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora