Ya habían pasado unos días desde que le envié aquel mensaje a Alec.
Como no pude pensar con claridad en lo que me preocupaba de que Daniel se uniera a nuestra familia, decidí ir a pasar unas semanas a Inglaterra con mi hermana.
Eran las tres del mediodía y acababa de bajar del avión, comencé a correr para abrazar a mi hermana justo cuando la vi apoyada en la valla de la puerta de salidas.
- ¡Tataaaaaa! - grité
- Hola a ti también - dijo riéndose
- Te echaba de menos
- Y yo pequeña. ¿Qué tal va todo por ahí?
- Pues bueno... Muchas cosas que contar
Tras esa pequeña conversación, nos dirigimos a su apartamento y conseguí dormir un poco antes de que el olor a quemado me despertara.
Me puse una sudadera que encontré en el suelo y salí corriendo hacia la cocina.
Todas las ventanas estaban abiertas y una nuve de humo negro inundaba la cocina.- ¡¿Qué has hecho?!
- He intentado hacer la cena pero se me ha quemado
- ¿Entonces qué cenamos? - pregunté intrigada porqué tenía mucha hambre
No había comido nada desde que había subido al avión.La comida no tenía muy buena pinta así que opté por esperarme hasta pisar tierra firme.
Seguro que si mi madre lo supiera se enfadaría un montón.
- Yo no tengo mucha hambre pero seguro que si mamá se enterara... Mejor no imaginarlo- Entonces...
- Iremos a comprar algo a la pizzería de la esquina
- ¿No podemos cocinar algo? Podríamos hacer las tortillas que nos hacía la abuela cuando éramos pequeñas
- Suena genial, pero solo hay un inconveniente, se ha estropeado la única sartén que tenía y las tiendas ya han cerrado, así que no podemos comprar otra.
- Pues vamos a comprar las pizzas, ya compraremos la sartén mañana
Cuando llegamos al apartamento hacía tanto frío que dejamos la pizza en el sofá y nos apresuramos a cerrar todas las ventanas.
Nos sentamos en el suelo y Claudia trajo dos coca colas y yo empecé a servir las porciones de pizza en unos platos de plástico que había encontrado en un armario.
- Aún no me has contado como va todo por Madrid ¿Cómo está mamá?
- Bueno...es un poco difícil de contar
- ¿Por qué?
- Pues porqué... ¿Te acuerdas de Daniel? El novio de mamá, el director de cine
- Sí ¿Por?
- Pues porqué vino el otro día a casa a comer y me dijeron que se iban a casar ¿Lo sabías?
- El otro día estuvimos hablando y me lo dijo, se le veía muy emocionada
- Ya pero si a duras penas he superado la muerte de papá. ¿Cómo quieres que de la nada acepte que un desconocido entre en mi vida?
- No lo sé, lo que sí sé es que si no lo haces, en algún momento de tu vida té arrepentirás

ESTÁS LEYENDO
Nada es para siempre
Novela JuvenilMar era una chica joven, pero llevaba desde el principio de su existencia sin ningún propósito en la vida o eso pensaba ella. Al final del verano, tendría que asistir a una universidad del centro de Madrid. A parte de no saber qué estudiar, ha de in...