Capítulo 10

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~Tae~

Después de una larga charla, ignorando la película por completo, TN se ha quedado dormida en el sofá. No quisiera despertarla, parece un ángel así,  sin expresión alguna. Me genera paz.

Subo sigiloso por unas mantas para poder abrigarla un poco. Me acuesto en el otro sofá y me quedo mirándola.

Quién diría que la chica con las mallas rasgadas estaría hoy aquí conmigo, compartiendo historias que estoy seguro jamás se las había contado a nadie.

En poco tiempo se está convirtiendo en una persona especial para mí, no lo entiendo, pero al final creo que las cosas buenas siempre llegan así, cuando menos te lo esperas.

Me hace sentir como si de verdad todo mi pasado se quedará ahí, en el pasado, como si de verdad fuera la única persona que puede ver a través de esa pared que cree después de ese accidente.

La temperatura ha bajado un poco, lo noto porque ella se mueve tratando de hacerse rollito con la manta. Me levanto con cuidado para no hacer ruido y reclino el respaldo de ese sofá para hacerlo cama.

Me doy la libertad de acostarme junto a ella y abrazarla. Una parte de mi grita que es euna pesima idea pero la otra hace caso omiso. La rodeo entre mis brazos y ella se acomoda junto a mí, no tardo en quedarme dormido.

.

Aún faltan un par de horas para que amanezca. Ella ya se ha levantado y no sentí su ausencia. Tengo ambas mantas encima, ¿qué pasó?

Subo las escaleras y veo la puerta de su habitación medio abierta, me asomo y ahí esta sobre la cama. Ya entendí...gracias, me voy a mi habitación e intencionalmente azoto la puerta, como adolescente después de discutir con sus padres. Sabía que era mucho eso de quedarme a su lado, pero no pensé que le resultara repulsivo.


~TN~

Y de pronto ya no siento tanto frío, abro un poco los ojos y lo veo, lo tengo frente a frente. Siento los latidos de mi corazón como si se me fuera a salir del pecho, y esa sensación me parece molesta. 

No puedo evitar mirar cada parte de su rostro, el cabello largo cubriendo parte de él, esa mandibula bien marcada, las cejas definidas y esos labios...perfectamente delineados, y los tengo a centimetros de los míos y entonces imagino que se sentira rosarlos aunque sea un poco, y si en ese momento en que lo hiciera el sintiera esa misma curiosidad y no solo los rosaramos sino que comenzara a ser un beso sutil y puro...y no quedara más remedio que seguir a esa corazonada que se forma por la sensación de ese beso, se siente el calor y...¿qué?, no, <<Solo es por el dinero>> me repito dos veces para salir de ese pensamiento.

No puedo, simplemente no puedo estar en el mismo espacio que él por mucho que lo desee, <<basta!>>. Seguro que todo esto es normal, no es como si lo hiciera porque me cree especial, no es así.

Salgo de la cama y le coloco la manta que me cubria encima, el frío ya esta más presente y si se enferma no pienso conducir. 

Subo rápido las escaleras, como si estuviera huyendo de algo, me meto en la cama y me cubro con las cobijas. A los pocos minutos escucho pasos y el ligero rechinido de la puerta, no me muevo porque se que es él. No tarda mucho en escucharse su puerta, la azotó tan fuerte que doy por hecho que esta molesto, genial, tal vez ahora si tenga que buscar como regresar a la ciudad.

.

La mayor parte de la noche solo dormite, no podía sacar de mis pensamientos ese beso que habia imaginado y cada que el sueño me ganaba me jugaba mal mi mente y vivia esa escena. 

_TN_, no puedes sentir nada por él, nada.

Miro el reloj y son las 8 am, me levanto y bajo a la cocina. Si el preparo la cena lo justo es que prepare el desayuno, ¿no? Voy viendo que tiene para preparar, busco algo sencillo porque mis habilidades culinarias no son las mismas de él.

Hago los clasicos panqueques y saco la mermelada y la miel de la alacena. Preparo el café y pongo la mesa. Apenas termino entra en la cocina.

- Buenos días - le digo sin recibir una contestación -. Hice...

- Gracias - dice cortante, sin expresión alguna, como si estuviera en ese papel de maestro, de nuevo.

- ¿Y ahora qué?, regresamos al pricipio despues de nuestra charla.

- Dimelo tú, te fuiste anoche.

- ¿Qué? - recuerdo ese pensamiento del beso y me doy nauseas -. Disculpame por irme después de que invadiste mi espacio personal.

- Disculpame tú, por pensar que era lo correcto, después de todo tenías frío.

- Para eso hay mantas, sabes, para que no te de frío. 

- Que infantil eres, _TN_.

- Lo dice el chico que azoto la puerta y no me da los buenos días como la gente civilizada - loa dmito, si soy infantil pero no tiene porque tratarme así.

- Entonces si me escuchaste, te fuiste por mí.

- Suficiente.

Tomo mi desayuno, antes de decir cualquier cosa que pueda ser usada en mi contra, sobretodo esa escena que imagine una y otra vez. Salgo de la cocina y subo a la habitación y esta vez, por si no habia quedado clara mi actitud infantil, azoto la puerta.

.

El café ya esta frío, esperaba que viniera detrás de mí como en las películas después de esa breve discusión, patetica, lo sé. Eso no sucedio y ahora tengo un desayuno frío y cero apetito. 

Llama a la puerta y sin responderle abre. Lo miro, trae una charola con más panqueques y dos tazas de café.

- Perdón, tienes razón, no debí acostarme contigo - sonrío -, sin doble intención.

- Lo sé. Disculpame por dejarte solo y por hacerlo de nuevo en la cocina.

- No note tu ausencia - le lanzo la almohada a la cara -. Oye, cuidado con el café - esa sonrisa, esa maldita sonrisa. Me estoy haciendo fan ella,

- Desayunemos.

Nos acomodamos en la cama con la charola en el centro, a quien engaño, Tae me gusta y aparentemente también le gusto. ¿Le gustaría aún si supiera lo que firme con su padre?, por supuesto que no, pero no quiero dejarlo a un lado. <<Me encantas, Kim Tae-hyung>>.

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⏰ Última actualización: Apr 14, 2022 ⏰

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Bésame mientras bailamos ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora