‹ no puedo manejar lento, voy a exceso de velocidad, recostados en nuestra cuna para poder relajarnos › !
ಇ ──
beomgyu iba jalando la muñeca de taehyun, iba dando pequeños brincos de lo emocionado que se encontraba.
tenía todo planeado, este día debía de ser lindo en todos los aspectos y hacer que taehyun olvidara hasta lo más mínimo.
quería una sonrisa, una pequeña, porque extrañaba eso, extrañaba ver sus ojos rizados y la muestra de sus dientes al ser una sonrisa sincera, al sentirse bien.
y trataría conseguir una, esa era su principal motivación de hoy.
— me duelen los pies.
— ya casi llegamos, hyun. — siguió intentando no ser brusco con sus movimientos y que su mochila no se sacudiera de más por la comida. — te prometo que valdrá la pena, ¿sí?
él no respondió, pero beomgyu quiso tomarlo como una buena señal.
se metió entre los arbustos, buscando ese lugar donde solía refugiar los recuerdos de taehyun. este se dejó caer a un lado, haciendo que el agarre de beomgyu se perdiera.
el castaño mayor comenzó a sacar todo, la manta, la comida y pequeños dulces, seguido de dos diademas con orejitas en la parte de arriba. dejó todo listo, sin perder esa sonrisa que tanto solía caracterizarlo. después tomó la de orejitas de gato y la colocó sobre el cabello negro de su amigo.
sonrió más grande cuando sus ojitos lo miraron, estos brillaban pero no le decían cosas claras.
— ¿por qué? — preguntó, y una pequeña florecita del árbol cayó rozando su nariz hasta hacerlo arrugarla por la comenzón.
beomgyu quiso chillar, pero se aguantó. — me recuerdas a uno; llegas a ser tan mimoso como seco, incluso eres perezoso como uno, me recuerdas tanto a un pequeño gatito gordo, hyunnie, pero tú eres más hermoso.
sonrió leve, bajando su cabeza hasta sus manos que jugaban con la pequeña flor.
— y yo soy un perro. — acomodó la de orejas más grandes sobre su cabello, estas eran de color café claro, suaves y largas. — porque siempre necesito de alguien, quiero que alguien esté conmigo. porque estar solo me asusta, pero también sé que es necesario.
— gyu — chilló bajito, haciendo un puchero en el proceso.
— no, taehyun, nos tenemos. me tienes, te tengo, y sé que no te das cuenta de eso, que a veces incluso lo ignoras porque te da miedo. pero soy tu amigo, tenemos años conociéndonos, ¿por qué me iría cuándo más me necesitas? ¿cuándo más te necesito?
taehyun se lanzó a sus brazos cuando vio sus ojitos llenarse de lágrimas, lo abrazó con fuerza, no lo importó si mojaba ese suéter de lana color naranja, sólo quería hacerlo sentir como él se sentía a su lado.
bien, aunque a veces no tanto.
era tan confuso, tan malo, que tenía miedo de hacerle daño.
y aún así lo hacía, le hacía daño, y eso era más malo aún, porque no quería eso.
— tú me haces bien, pero yo a ti no.
— hyun, me gusta estar contigo. — taehyun se separó y negó, ignorando que sus mejillas estaban mojadas y que sus manos temblaban.
— pero eso no importa, ¿no te das cuenta de que te hago daño? ¿de qué por estar conmigo a veces te olvidas de ti mismo? ¡soy tan malo que olvidé el aniversario de muerte de tu mamá, beom! — cerró sus ojos, no queriendo ver los de su mayor.
— eso fue hace meses.
— era importante.
— pero ya no tiene importancia, yo sé que lo olvidaste por la recaída, taehyun.
— ¡aún así! ¡debí de estar ahí para ti, y yo no estaba, estaba en mi casa llorando por una estupidez!
beomgyu negó, tomó el rostro de taehyun y lo hizo que lo mirara, él se negó, poniéndose duro para que no notará la vergüenza en sus ojos.
— ¿cuándo vas a entender que nada de esto es una estupidez? porque no lo es, no lo será.
— te hago daño...
— te haces más daño tú del que tú a mí, y eso lo sabes, pero prefieres actuar como si nada pasara cuando pasa todo. yo te amo, taehyun, pero incluso verte dolido hace que me duela más de lo que debe. y lo sabes, porque tú sabes bien lo que siento, me conoces tanto como yo a ti pero te haces menso.
›› y te amo, juro que lo hago, pero me duele no poder hacer nada por ti cuando es necesario.
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hard on yourself ⎯ beomhyun
Conto‹ ¿por qué tienes que ser tan duro contigo mismo? ¿por qué no puedes verte cómo yo te veo? › ಇ ── habían tantas formas de gritarle que lo amaba, habían tantas formas de explicarle los motivos por los cuales le quería. y aunque no los hubiera, encont...