La noche fría pasa, y el amanecer se asoma con unos cálidos rayos de luz, dándole una caricia al magullado rostro de Lilith. Abre sus ojos cansados, rojos e hinchados de tanto llorar, se cobija junto a su perro sobre el pastizal húmedo. Se levanta y rasca sus ojos, frota sus rodillas Rojas por el frío, mira a ambos lados sin saber que hacer, angustiada aun, recuerda lo que pasó el día anterior y se pone de pie. Camina lentamente hacia la carretera, su cuerpo escuálido y frágil le da el protagonismo en una mañana fría y su fiel compañera la soledad se adentran en un camino sin destino alguno.
Camina y camina junto a su perro, llega al pueblo donde hay una pequeña gasolinera, un hombre gordo y viejo atiende en ese lugar de hace muchos años, caracterizado por su mal humor, Lilith teme al acercarse, pero no tiene alternativa ante su desesperación, tiene mucha hambre y más que por ella le preocupa su perro.Se acerca lentamente, y susurra. - señor, por favor... Tiene algo de comer? O si tiene un trabajo para mi sería mejor. El hombre voltea y grita. - ¡habla más fuerte muchacha!. - Lilith esta aun aturdida, y repite más fuerte. - quiero trabajo señor! Tenemos hambre! . El hombre prontamente reconoce quien es la chica y abre los ojos algo molesto. - ¡tu eres la hija del loco John! Eh? sabía que te había visto en algun lado, ese infeliz me debe dinero, ¿tu me lo vas a pagar, Ah?
Lilith, enojada réplica. -¿que?No!, yo no le debo nada, además el no es mi padre, por favor tenga compasión. - el hombre la queda mirando y ya más tranquilo le dice. - esta bien, limpia el baño y te daré algo. Lilith sonríe . - muchas gracias! . - se va al baño a limpiar y el viejo la toma del brazo, . - oye muchacha! Tienes que comer antes, después limpias, ven acá siéntate y te daré algo. Lilith sorprendida se sienta, el viejo le trae un pan con queso y jamón y una taza de té. Lilith esta agradecida y come, su estómago adolorido recibe aquel acto de gratitud de un casi desconocido. Alimenta también a su fiel perro Palomo, y luego se va al baño a limpiar, con más energía.
Son ya las 18 horas y Lilith ha terminado su labor. - gracias señor, ya está listo, brillante y huele muy bien su baño. - el hombre agradece y le pide que vuelva cuando lo necesite. - no te pierdas niña, si necesitas trabajo te lo daré. - gracias señor! Que Dios le bendiga siempre. - Lilith sonríe a pesar de su cruda vida. Se apronta a salir por la puerta del servicentro rápidamente, y casi por esas circunstancias de la vida que no entendemos el rostro de un desconocido aparece por el otro lado de la puerta, es alto y sus ojos son como perlas oscuras en un rostro pálido. Lilith se echa hacia atrás y agacha la mirada pidiendo disculpas. El desconocido da espacio para que Lilith salga, y ella se va rápidamente. Lo que para muchos no tiene importancia, puede quizás ser crucial en el hilo del destino.
Lilith y su perro caminan hacia su casa, por no decir hogar. Ya alimentada Lilith se siente un poco mejor, lo que no la mata la hace más fuerte o al menos eso refleja su cruda vida. El cielo truena, la lluvia esta por venir, el aire fresco golpean el rostro y cuerpo de Lilith, la Luna llena se asoma alumbrando casi por entre las nubes el camino. Lilith lleva rato caminando y las nubes grisis se han posado sobre ella ,siente frío y a pesar de que no quiere llegar a casa, sabe que si se queda afuera sería bastante aventurero y arriesgado ,las primeras gotas caen fuerte como peñiscos. Caminando por el costado de la carretera solitaria, sin abrigo apresura el paso.- oh, diablos! Por que tengo tanta mala suerte, que dices tú Palomo? estoy cansada, no quiero volver . - solloza con su rostro mojado por la primera bruma de lluvia, mira hacia el cielo y este se prende como si le dijera que la odia. - hasta el cielo esta en contra de mi. - exclama, apretando la quijada.
Un auto pasa muy rápido, con sus luces altas alumbra por la espalda a Lilith, esta se voltea poniendo su mano sobre la cara casi por un reflejo, y como si adivinara que el auto la salpicaria, y así fue, una oleada de barro embarro sus piernas y ropa. Lilith más sorprendida que enojada, voltea a ver el auto, que se detuvo más adelante. Un chico sale del auto, muy preocupado, pero se queda en la puerta. - perdón, estas bien? No te ví! . Lilith se queda quieta sin decir nada, solo voltea y sigue caminando, con su nula capacidad de socializar. Hey! Te hable, acaso estas sorda? Te pregunte si estabas bien! Replicaba el muchacho algo molesto por querer ayudar y no obedecer respuesta. Lilith voltea lentamente. - estoy bien. - dijo casi en un tono difícil de descifrar, el chico arrugó su seño, acercándose más ,la ve de pies a cabeza, y hace un gesto de repulsión y asombro a la vez.- oye, ¿tienes un problema? Ehh... ¿Que edad tienes? ¿Catorce ? Pareces muy niña, que haces sola, es peligroso que camines sola... Lilith algo molesta sube la mirada ante el muchacho que era mucho más alto que ella . - no soy una niña, tengo veintiuno. - el chico algo sorprendido sonríe con gesto de no creerle. - jajaja ok, como digas, te llevó a tu casa, vamos.
Lilith muy desconfiada, pero le cuesta trabajo interactuar con aquel joven, tanto que ni se acordaba que era el mismo chico que entró al local de la bencinera, la lluvia había cesado y algo de la luz de la Luna alumbró el rostro del chico, Lilith pudo ver sus ojos oscuros, y la casi plateada piel de su rostro, su cabello estaba empapado, salpicaba sus pestañas, lo que hacia que parpadeara seguidas veces.. - no te preocupes, prefiero caminar. - dijo Lilith en tono firme y siguió caminando, dejando al chico solo, este se subió en su auto y siguió su camino .No hay camino sin sentido, ni destino sin un porque, cada ser humano en este mundo tiene un lugar, y la injusticia se convierte en un verdugo, que no da tregua. No hay un tibio cobertor para Lilith, hasta los pájaros tienen su nido, pero Lilith es el despojo y la basura bajo la alfombra de las vergüenzas de sus antecesores. Aquel rostro sin vida, acompañada de su mente complicada eran la malesa que hay que arrancar, su madre así lo pensaba.
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Pozo De Espinas
Genç KurguLilith es una chica de 21 años, padece de Tea (trastorno espectro autista) vive con su madre, y su padrastro en una vieja casa. Lilith es maltratada constantemente en su hogar . Por circunstancias de la vida conoce a Ana de 24 años, estudiante de tr...