Al terminar de comer, levante la mesa y me puse a limpiar. Mi madre se estaba cambiando para trabajar, al igual que mi padrastro. Durante el almuerzo me estuve armando de coraje para decirles que esa tarde iría Eda a casa, pero lo que más nervios me daba era preguntarles si esa noche me dejarían ir a vóley.- Mamá- le dije tragando saliva y haciendo un pequeño silencio- esta tarde vendrá Eda a casa-. Mi madre miró de mala gana, lo próximo que diría no sería nada bueno.
- ¿Con que permiso ella va a venir?- dijo Jetro, quien hizo un gesto de desaprobación ante lo que escucho.
- ¿A quién le consultaste sobre eso Damne?- dijo mi madre.
- A nadie- dije en un tono más bajo de lo normal y con la cabeza baja. Guarde un rato de silencio pero no me aguante- Mamá, es Eda, solo va a venir a pasar la tarde.
- Tú no puedes traer a nadie a esta casa y menos sin pedir permiso, niña estúpida- habló Jetro con un tono de voz bastante elevado, sentí como el miedo recorría mis venas.
- Está bien, ya entendí, le diré que no venga- hable con la voz temblando.
- No, esta vez que venga, pero la próxima pregunta primero- respondió mi madre, tratando de calmar las aguas.
- Está bien mamá, no habrá próxima vez- aseguré. No quería que hubiera próxima, aparte no iba arriesgarme que vuelva a ocurrir lo de aquella noche, aun sentía terror de eso.
Seguidamente de eso, me puse a limpiar las vasijas. A los 20 minutos mi madre y Jetro se habían ido a trabajar, me encontraba yo sola en casa, esperando a Eda.
Aun no le había comentado a ella sobre la invitación de Aron, ya que antes tendría que pedirles permiso a mis padres. Pero, dada la ocasión decidí no decirle nada ya que era obvio que no me dejarían ir.
Opte por recostarme en la cama y agarré mi celular de la mochila para así contestarle aquel extraño, que me tenía sorprendida con su sentido del humor, y a la vez pasar el tiempo hasta que llegue mi amiga.
Y lo que tú no sabes, es que soy el hijo de Lord Voldemorth, el hechicero más poderoso y temido de todos los tiempos. Si lo eres, y eres mi pequeña.
Su mensaje me hizo reír, quede anonada al ver que nombrara a Voldy.
No te pases, ¿te gusta Harry Potter?. Wow cada vez me sorprendes mas asesino.
@m4t3o_fi3r5: Tú me pediste que te sorprenda, ¿verdad?
@d4mn3.silv3stri: ¿Te atreves a usar mis palabras contra mí?
@m4t3o_fi3rs: No lo sé, tú dime. ¿Por qué crees que no me atrevería?
Sin darme cuenta estaba con una sonrisa leyendo su mensaje ¿Quién era este niño?
@d4mn3.silv3stri: Porque si te atrevés, no te gustaran las consecuencias.
@m4t3o_fi3r5: Uy, la niña es mala. Mira como tiemblo de miedo.
@d4mn3.silv3stri: Pero, ¡SEÑOR! Usted no sabe a lo que se enfrenta.
@m4t3o_fi3r5: jajaja por favor, estoy en mi mejor momento.
@d4mn3.silv3stri: Jaja ¿Quién le mintió así?
@m4t3o_fi3rs: Un pajarito me lo dijo.
@d4amn3.silv3stri: ¿Y que pajarito?
Comencé a reírme tanto, que me empezó a doler la panza, ¿Por qué sentía como si lo cocinera de antes?¿Por qué me gustaba hablar con él?. Seguimos charlando por un rato más, hasta que un sonido me trajo a la realidad.
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¿Que hubiera pasado si...?
Любовные романыÉl era esa clase de amores que nunca llegan a ser más que en sueños, ya sabes, esos de palabras bonitas, deseo ligero y que te mira como si fueras magia, de esos que luego se llenan de tristezas y hojas secas. Uno de esos que se recuerdan como: ¿Qu...