INEFABLE

꧁Capítulo: 17꧂

♾NADIA♾
"Te muestro mis cadenas para que veas que si quiero salir de la oscuridad solo es que... no puedo"

Habían pasado los tres días de la desgracia, tres días, los cuales solo lloraba hasta quedarme dormida encerrada en mi alcoba. Por la ventana podía ver el amanecer hasta el atardecer, donde me preguntaba si él estaría aquí conmigo, dando la fuerza que necesito. Ya no me quedaban lágrimas y el dolor en mi pecho aumentaba, no sabía qué hacer.

"Es tu culpa"

Una y otra vez me repetía lo mismo, fui la causante de su muerte y no pude impedirlo. Su padre me había notificado que hicieron cenizas su cuerpo para poder llevárselo del reino, si, su padre renunció y ahora nos detesta. Antes de marcharse pude tocar la pequeña caja que contenía los restos de la persona que amaba, dejé un beso de despedida y vi como se marchaba para siempre.

Por otra parte, Ethan me seguía gritando que debía olvidarlo y enfocarnos en nuestro matrimonio que por cierto no estaba de acuerdo. En estos precisos momentos se debía estar coronando como el próximo líder de nuestras tierras y el nuevo dios que estará perteneciendo al clan. Mis hermanos se han alejado de toda la situación, ya que nos consideran letales, mis padres siguen siendo ellos mismos, aunque esta vez no estarán dirigiendo tanto al pueblo como antes.

— Pensé que estaba dormida —Moon entra cargando una pequeña bandeja— le traje una taza de té.

— No tengo hambre —acomodo mi almohada contemplando el dulce atardecer.

— Debe comer princesa —veo que coloca la bandeja en la pequeña mesa de al lado— le vendría bien una buena caminata.

— Quiero estar sola Moon —cierro mis ojos al sentir las nuevas lágrimas escaparse de ellos— lo extraño tanto.

Con mis ojos cerrados, siento como el colchón de mi cama se hunde y unas manos cálidas acarician mi cabello.

— Debe luchar por él —un leve sollozo se me escapa— a él le gustaría que siguiera batallando como siempre le dijo.

— Su vida es tan corta y por mi culpa murió —abro mis ojos sintiendo que ya no puedo más— era inocente y yo le acorté su tiempo.

— Debe luchar por la verdad —miro a Moon dolida— hágale justicia.

— No sé por donde comenzar y este dolor... —toco mi pecho justo encima de mi corazón— es demasiado fuerte... siento que el respirar me duele.

Me incorporo y veo como Moon aprieta sus labios y toma mis manos en forma de apoyo. Comienzo a llorar nuevamente mientras dejo mis manos en mi regazo, tomando la sabana que me arropa y apretándola.

— Todo es un proceso, pero verá que al final lo recordará sin dolor.

— Ni siquiera pude darle las gracias por su regalo —giro mi rostro para ver a la mariposa dorada reposando— siempre fue muy bueno conmigo.

— No se rinda ahora —Moon llama mi atención— es momento de levantarse y demostrarle a todos que puede con esto.

— No quiero casarme con mi hermano —miro a Moon quien asiente— debo escaparme de aquí.

Moon se tensa ante mi confesión, lo cual me hace fruncir el ceño. Ella se pone de pie y toma la charola para dejarla en mi regazo y unir sus manos para alejarse.