Emilio es el típico chico popular de la universidad, sí, ese chico de las novelas clichés de adolescentes, ese chico de las películas y series que por su atractivo y simpatía enamora a todos y todas.
Es guapo, muy guapo, simpático, encantador, inte...
- ¿Qué hiciste, imbécil? ¿Le haces brujería? ¿Inventaste un embarazo falso para que él se enganchara a tí? Cuéntanos.
Joaquín rodó los ojos para luego voltear a mirar a las 3 huecas que le habían hablado.
- Primero, creo que todos notaron que a Emilio le gusto, Seidy, ¿Hasta ahora lo notas? Segundo, ¿Algún problema con qué sea Emilio Osorio, Aysha? ¿Ó sólo porque tú intentaste meterse entre sus pantalones y no pudiste significa que nadie puede? Y tercero, Camila, tengo pene y no me puedo embarazarme, soy hombre y tampoco soy cómo tú, no hago brujería.
- Lo siento, es que seguro tu pene es tan diminuto que nadie lo nota, por eso dudo de si eres hombre ó mujer, supongo que no usas mucho ese... frijolito, sólo te gusta que te den.
Todos en el aula rieron, Joaquín recordó las palabras de Emilio.
- ¿Cómo sabes que lo tengo pequeño? ¿Me acosas en las duchas? No conocía esa faceta de tí. Les aviso a todos, Emilio amenazó con cortarle el pene a todo el que se burlara de mí.
- Somos mujeres así que...
- Y a las mujeres les cortaría el clítoris, yo de ustedes me asustaría.
- Qué lástima, porque recuerdo que Emilio se veía complacido con esa parte de mí hace varios días, no creo que quiera cortarlo sabiendo que tú jamás podrías provocarle una erección.
- Ni siquiera los he visto besarse.
- Yo creo que a Emilio le dá asco, ósea, tan sólo de imaginarlo.
- Ew.
La maestra entró al aula en un buen momento, ya que Joaquín no tenía respuesta para las palabras de aquellas harpías.
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- Emilio.
- Dime, bonito Joaco.
Joaquín comenzaba a pensar que Emilio estaba leyendo una revista ó un blog en internet para conquistarlo, porque todos los días aparecía con algo distinto, el lunes le confesó lo que sentía por él, el martes estuvo obsesionado por hacerlo reír todo el tiempo, ayer estuvo regalándole cosas y hoy lo ha llamado por apodos cariñosos todo el tiempo, siempre lo hace, pero ese día parecía exagerar un poco.
- Tú... pues... a tí... ¿Te daría asco besarme?
Emilio se atoró con el jugo que había estado bebiendo y tosió un par de veces.
- ¿Estás bien?
- Joaquín, ¿Cómo me preguntas eso?
- Es que... pues... alguien me dijo eso, que a tí te daría asco besarme, ¿Es cierto?
- Joaquín he estado deseando besarte desde que te ví por primera vez, todo el tiempo estoy tratando de controlarme porque me dá miedo hacer algo estúpido y que luego te alejes, pero deseo más un beso tuyo que ir a un concierto de Natalia Lafourcade, y te lo digo, amo a Natalia Lafourcade.
