𝑶𝒏𝒆-𝒔𝒉𝒐𝒕❜𝒔 2.0

𝓔𝓼𝓶𝓮𝓻𝓪𝓵𝓭𝓪, 𝓕𝓲𝓷𝓪𝓵.

 - Hajime Kokonoi X Sakura Haruno X Seishu Inui -

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Las cosas estaban hechas, ya no había marcha atrás. Sakura había escuchado aquella plática de Kakucho e Izana y supo que esté último llegaría hasta el final del conflicto... hasta matar a Mikey.

Una vez llegó -junto a Kokonoi - al escondite de Tenjiku quiso hablar con Izana, obviamente sin que Kokonoi lo supiera, su mejor amigo no le había dirigido la palabra en lo que llevaban del recorrido. Quería intentar razonar con Izana, hacerle saber que era una locura lo que planeaban hacer pero... Él no lo tomó de la mejor manera. 

 ═══ ∘◦𝐅𝐥𝐚𝐬𝐡𝐁𝐚𝐜𝐤◦∘ ═══

— ¿Dices que debo detener el crecimiento de mi pandilla solo porque tienes miedo de que Mikey salga herido? — preguntó el peli-blanco. 

Ella estaba frente a él, ya tenía puestos unos tenis pero seguía con su pijama, un escalofrío la recorrió al ver una maniática sonrisa en el chico. 

— Yo no dije eso — replicó, a pesar de sentir que su vida corría peligro ella se mantuvo firme — Dije que está organización que estás creando no tiene nada que ver con el legado que dejó Shinichiro-kun — 

El peli-blanco inclinó la cabeza hacia la derecha y negó soltando una risa seca. 

— Se me olvidaba que tú también fuiste como una hermana para él — dijo soltando un suspiro — Sakura esto, Sakura lo otro... Sakura la bella flor que florecerá, Sakura, Sakura, Sakura — ella lo miró confundida. 

— Izana... piensa en Shinichiro-kun... si tú matas a Mikey él no estará contento con eso — volvió a insistir la peli-rosa. 

El seño de Izana se frunció y poco a poco se acercó a la chica. 

— A estás alturas... ¿Realmente crees que eso me interesa? — preguntó. 

— Mikey no tiene la culpa de... — pero Izana no dejó que terminara de hablar. 

En un movimiento rápido él la había tomado del cuello alzándola a su altura. 

— Sakura... Te recomiendo cerrar la maldita boca — los ojos violeta brillaban con locura y ella jadeo al sentir el fuerte agarre en su cuello — Por supuesto que Mikey tiene la culpa... siempre la tuvo y si no quieres terminar con moscas en tu boca, toma este concejo... no te entrometas en mi camino, estoy 100% decidido a acabar de una vez por todas con la Tokyo Gang... con matar a Manjiro Sano, así tenga que borrar a quien sea, lo haré — el fuerte agarre cedió y ella se soltó de la mano del peli-blanco haciendo usó de su fuerza mayor a la promedio cayendo de rodillas. 

— E-estas demente — susurró ella intentado recuperar el aliento. 

— Losé — respondió él alejándose. 

Ella seguía arrodillada y con su corazón latiendo con fuerza. 

— ¿Estás bien? — 

Ella inmediatamente se puso de pie buscando el dueño de esa voz. 

— Tranquila, no te haré nada — aquella sombra oscura poco a poco se iluminó y ahí pudo ver a un chico con una gran cicatriz, Kakucho Hitto. 

— Lo estoy — respondió cortante. 

— ¿Kokonoi sabe que intentaste suicidarte? — le preguntó acercándose con cautela. 

Ella alzó una ceja rosada y sonrió.