Frey
Comencé a correr como loco hasta la carretera. La casa en la que Mamá decidió que viviríamos estaba oculta, así que solo un camino de terraceria podia llevarnos, pero T/N me necesitaba y no estaba dispuesto a esperar a papá por que ni siquiera sabíamos con exactitud a dónde había ido
Atrapame, Frey
Mierda, eso estaba mal. Y lo único que lograba a cada paso era enojarme aún más por haber permitido que se la quedarán esos días
Debí escuchar a Heist
-¡Frey, detente! - me gritaba Kaia, pero no podía.
No quería dejarla sola
De repente, sentí como un jalón me freno y Pierce, mi padre, estaba a lado mío. ¿¡Como carajos me había alcanzado tan rápido?!
-Para ya- dijo frio. Por que aunque quisiera, el jamás iba a entender mi desesperación; después de todo, los sociopatas no son capaces de amar
-Tengo que ir por ella - dije tratando de emprender mi camino otra vez; hacia algo de frío y mis pulmones pedían descansar pero hice caso omiso
-Hablo enserio, Frey. Valter y tu madre ya han ido por ella, pero necesito que vuelvas a casa y esperes ahí con Kaia - mi melliza nos alcanzó y me tomo la mano
-Papá... - casi le rogué. Necesitaba verla, saber que estaba bien; cuando robe y revise su expediente habían varias fechas con intentos de suicidio y me daba miedo que pudiera pasar por su cabeza una vez más y yo no estuviera ahí para ayudarle como ella hizo conmigo
-Es una orden. Quedate con Kaia, Heist y yo los alcanzaremos por si las cosas se ponen feas - analice mis opciones pero no eran muchas: correr hasta allá me llevaría un buen tiempo, papá me regañaría y retrasaría todo. Además, estaba seguro que Heist la cuidaría allá por mi
-Bien. Pero vayan rápido - accedí. Necesitaba tranquilizarme para no terminar matando a nadie; y es que desde que nos fuimos de Wilson y Leigh quedó mal herida después del secuestro de Heiner, mamá nos había hecho prometerle que no volveríamos a matar; aún más cuando la única que no pudo salvarse fue Hayden. Conseguimos un nuevo lugar para vivir y aunque Heist trataba de olvidar a la Fleming, todos sabíamos que se volverían a ver y para eso el tenía que dejar de ser un asesino, al igual que todos. Excepto Mayne; el seguía matando a diestra y siniestra pero lejos de aquí y creyendo que mamá no se daba cuenta para que no nos afectará y trajera de vuelta a la Reina Roja. Mi cabeza se había perdido en el limbo de pensamientos hasta que estábamos frente a la puerta y papá se fue junto a mi hermano en un auto deportivo en búsqueda de T/N.
-Vamos, te traeré una sudadera. Hace frío afuera y lo que menos necesitamos ahora es que enfermes - Kaia me dejó en un sillón y fue a mi habitación, trayendo con ella un suéter y una cobija no muy grande. Me tapó con ella y al ver que no dije nada, fue a la cocina
-No la odies - le dije fuerte desde la sala, sabiendo que me escuchaba ya que no había ningún otro ruido. Ollas se movían y ella no dudo en contestar
-No lo hago. Pero no me cae bien - me levante de mi lugar para ir a ver que hacía y la descubrí haciendo un té que Valter le había dicho que era bueno para relajarme
-Da lo mismo. Ella es especial para mí, Kaia- le dije y creí que se asustaria al verme aparecer tras ella, pero para mí sorpresa no fue así. Kaia era diferente a nosotros y me hacía tener la esperanza de que por lo menos para ella si había una vida allá afuera; su belleza y su inteligencia eran armas letales pero había sabido convertirlos en algo bueno y eso significaba poder salir del círculo de asesinos en el que había crecido, incluso la tía Jazmín le había ofrecido vivir con ella, pero aún así decidió quedarse para ayudar a nuestros padres cuando lo necesitaran.
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La próxima Cash
FanfictionHija menor de los Hidalgo. Desconocida, un completo desastre y una bolsa de enfermedades mentales. El hijo mayor cash, total mujeriego y un puto tormento ¿Que podría salir mal? La mayoría de personajes que aparecen en esta adaptación son correspondi...