Con mi Vida || Armin Arlet x Reader

10- "dejame ayudarte"

"Mientras que tu voz, me consuela. Mientras las horas pasan, te haré saber... Que necesito preguntarte antes de que este solo, como se siente descansar en tus labios pacientes para ser feliz para siempre, Estare contento por saberlo"

After dark- Mr. Kitty

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Al colgar la llamada volví a arrecostar mi cabeza sobre el regazo de Armin.

- ¿Quieres seguir durmiendo un rato más? - dijo en rubio rodando mi cabello a la parte trasera de mi oreja.

- Si...-

- Muy bien, entonces levantante - Habló con un tono de voz inocente.

- ¿Que? ¿Para que? - pregunté alzando mi mirada hacia el rubio.

- Te dije que te ayudaría con las heridas - respondió un con una sonrisa amable en su rostro.

Le seguí mirando con una expresión de confusión en mi rostro y antes de que pudiera decir algo el rubio movió un poco sus piernas provocando que me levantará. Se levantó de la cama y salió de la habitación dejándome algo confundida. Después de unos pocos minutos Armin regreso a la habitación está vez con el bolso que traía cuando llegó, encendio la luz y colocó su bolso en la cama para luego abrirlo y comenzar a buscar algo dentro de el.

Yo seguía mirandole con una expresión de rareza...

- ¿Podrías quitarte las vendas? - hablo sin quitar la mirada de su bolso.

Frunci el ceño ante su pedido, pero termine por obedecerle y me senté a la orilla de mi cama, comencé a quitar la venda de una de mis piernas, mientras la quitaba pude observar que el jodido sangrado aún no paraba. No lo entiendo... ¿Por que carajos se sigue abriendo la herida?.

- ¿Aun no ha parado el sangrado? - preguntó arrodillandose frente a mi manteniendo la mirada en mis piernas.

- Parece que no... Pero no entiendo por qué -

- Tal vez porque aprietas mucho la venda - dijo sacando una gaza de un estuche que parecía tener varias cosas médicas - ¿puedo... Quitarte esta? - preguntó señalando la venda que aún traía puesta. Asenti con mi cabeza en respuesta

Seguía estando algo avergonzada... El hecho de que el viera mis heridas era algo realmente íntimo desde mi punto de vista, pero por alguna razón.. La manera tan delicada y amable con la que desvendaba mi muslo me hacía sentir tranquila y segura.

- Definitivamente es por la manera en la que aprietas la venda -dijo observando mi pierna después de haber quitado la venda - no debes apretarla tanto, eso podría traer muchas consecuencias graves - Habló rebuscando en aquel estuche, para luego sacar un frasco el cual parecía ser un gel limpiador antiséptico y vertió un poco del líquido sobre una de las gasas - ¿puedo? -preguntó señalando mi pierna y nuevamente asenti con cabeza.

Llevo una de sus manos a la parte trasera de mi muslo y con su otra mano comenzó a limpiar las heridas con delicadeza y paciencia. El tacto de su fría mano con mi piel tibia hizo que en leve escalofrío recorriera mi espalda logrando erizar mi piel.

Observe su lindo rostro por un momento, se le veía bastante concentrado en lo que hacía, pero también se le notaba algo preocupado...

- Marcy... - Habló sin apartar la mirada de mis heridas.

- ¿Hm?-

- Puedo saber... ¿desde cuando... Lo hacías? - dijo sin mirarme. Sabía que se refería a mis autolesiones y no pude evitar quedarme unos segundos en silencio - está bien si no quieres contarme, no quiero obligarte a nada...-