𝐌𝐎𝐍𝐒𝐓𝐄𝐑 𝐈𝐍 𝐌𝐄 | ʳⁱᵛᵉⁿ [ᶠᵃᵗᵉ: ʷⁱⁿˣ ˢᵃᵍᵃ]

𝐯𝐢𝐢. niña ingenua

NIÑA INGENUA
también conocido como: episodio cuatro - angeles caídos

—Gracias por invitarme a comer—.comentó Circe, llevándose a la boca el tenedor con pasta pegada en su extremo.

Bloom hizo un gesto de indiferencia con la mano, apoyando las piernas sobre el escritorio. El hada pelirroja había invitado a Circe, queriendo acercarse a la hermana de Sky.—No te preocupes, tenía la sensación de que querrías evitar a Riven durante un tiempo—.

Circe enarcó una ceja, limpiándose el labio inferior.—¿Qué? ¿Por qué iba a...?—

—Briar nos contó lo de anoche—.Aisha habló mientras se paseaba por la habitación ordenando archivos.—Tengo que admitir... ¿Riven? ¿De verdad?—

Bloom asintió mientras Circe resoplaba pasándose los dedos por el pelo.—Sí, bueno, fue algo de una sola vez, así que no hace falta discutirlo más. Sólo fue un beso—.

—¿Qué, tú y Riven?—,añadió Musa, entrando en la habitación con una manzana en la mano mientras tomaba asiento, sonriendo a Circe, que gimió con fuerza mientras se golpeaba la frente contra el escritorio. Parecía que Briar no podía guardar un secreto.—He oído que fue más que un beso. Más bien que estuvisteis a punto de quitarse la ropa...—

—¡Bien!—interrumpió Circe, empujando su silla hacia atrás.—Estaba borracha—.

Aisha enarcó una ceja, echándose hacia atrás.—¿Entonces es verdad? ¿Sientes algo por él?—

Burlándose, Circe intentó disimular su sonrojo mientras negaba con la cabeza, divagando ligeramente de forma nerviosa.—¿Qué? No. ¿Gustar de él? De ninguna manera. No me gusta. Es ruidoso y odioso, y lo que hace con las manos cuando se enfada, es como la cosa más molesta de la historia.—

Las chicas la miraron fijamente, sonriendo ligeramente mientras esperaban que Circe se diera cuenta de lo que había dicho. Al darse cuenta, Circe se hundió en su asiento y suspiró lentamente mientras se desplomaba.—Bien. Tal vez...—

Musa gritó suavemente, lanzando un puño al aire.—Lo dije. Y no porque haya utilizado mis poderes para leer tus sentimientos. Simplemente fuiste así de obvia—.

—Pero... Tengo miedo. De lo que yo y Riven nos estamos convirtiendo—.

Aisha y Bloom compartieron una mirada.—Ya son enemigos. ¿Cuánto peor puede ser?—

Musa se inclinó, asintiendo.—Sí. En cuanto dejes de fingir que no te gusta, te darás cuenta de que realmente no es tan malo. Claro, Riven puede ser la peor opción de todos los chicos de la escuela. Pero al menos estás dando un paso fuera de la negación—.

—¿Negación?—añadió Terra, con la planta en la mano al ser la última en entrar en la habitación.—La negación es donde está Sky, al no poder ver que Stella está engañando a su... ¡Circe! Hola. No te había visto—.