One Shots

La prostituta

Cheryl Blossom:

- Por dios Verónica, no creo que esto sea una buena idea - dije angustiada. Estoy en el prostíbulo más conocido de toda la cuidad. No lo malinterpreten, tengo novia... Mi novia es muy egocéntrica, caprichosa, inmadura y demás pero no por eso voy a serle infiel.

La verdadera razón por la cual estoy aquí es porque Verónica quiere follarse a una rubia que vió antes.
Ella es soltera y no hay nada de malo en buscar placer pero este lugar es muy conocido y el chisme vuela, más aún cuando unas empresarias multimillonarias se van a un lugar clandestino como este.

- Claro que lo es, es una grandiosa idea... Además podrás tener sexo con alguien de aquí, ¿no dices que estos últimos meses no has tenido acción? - ella tenía razón.
Estos últimos meses Minerva y yo no hemos tenido sexo, ella es muy linda pero por alguna razón dejamos de tener sexo, el sexo se volvió aburrido, rápido y sin pasión. Tal vez estamos en un mal momento pero ¿serle infiel?

Es mejor decirle a tu pareja que ya no te gusta o la razón por la que quieres terminar con ella en vez de que te falten los huevos para decirle y serle infiel.

- Como sea... ¡Mierda! Allá está - me señaló a una rubia bailando en un tubo, tenía un antifaz y su mirada se detuvo en nuestra dirección.

- ¡Me guiñó el ojo! - ¡Vaya! Si que le gusta esa chica. Suspiré antes de ver a Vero ir tras ella. La perdí de vista y decidí ir al mini bar que había.

- Un cóctel, por favor - vi como comenzaron a preparar el cóctel y sentí una mirada penetrante en mí.
Me giré un poco y en frente de mí había una chica morena, con escultural cuerpo, pelo rosa, liso y un antifaz. Estaba bailando en un tubo con una música muy sensual.

- Ella es nuestra nueva estrella, no tiene ningún nombre artístico y sólo tiene sexo con chicas - la chica me entregó el cóctel y la miré con extrañes.

- Pero... Aquí sólo vienen hombres - dije confundida. Literalmente Verónica es la única chica que viene pero sólo a ver a la rubia.

- Ella lo sabe... Tal vez lo hace para no tener que acostarse con cualquiera - ¡vaya! Es muy inteligente.

Seguí mirando a la misteriosa chica y tomé el trago que tenía.
Sus caderas se movían al compas de la música, sus piernas estaban tonificadas y ni hablar del resto de su cuerpo, sus pechos tenían el tamaño perfecto y su trasero ¡Dios! Es muy hermosa.

Su presentación terminó y desapareció por toda la multitud.

- Mierda - murmuré incómoda. Estar pensando en esa chica hizo que mi amigo despertara.

- ¿D-dónde está el baño? - la chica me señaló una puerta y que siguiera derecho, ahí estaba el baño.

Me levanté incómoda y seguí las instrucciones de la chica, la puerta que me señaló era un camerino así que seguí derecho y había sólo una puerta en el fondo. Ese debe ser el baño.

Abrí la puerta y entré rápidamente, aún con mi mano derecha en mi bulto.
Cerré la puerta y suspiré. Odio cuando esto me pasa en un lugar indebido.

- Cheryl Blossom... - me exalté de inmediato. La chica misteriosa estaba enfrente de mí y ahora tenía otro tipo de lencería, una más provocativa.