—Disculpe, ¿Se registró en este hotel un hombre llamado Wei WuXian?
Yang Ziding [1], la aprendiz y asistente de mayor confianza que tenía Jiang Cheng, había llegado con un par de horas de retraso por situaciones familiares. Aunque la reunión con los empresarios proveedores era hasta la siguiente mañana, era necesario reunirse con Wei WuXian, el representante de Lotus Pear en la ciudad, para acordar detalles profesionales y personales que Jiang Cheng había dejado bajo su responsabilidad.
Sin embargo, cuando llamó a su teléfono no respondió. La recepcionista la observó con recelo, aunque acababa de registrarse en el hotel, se le había instruido para mantener la confidencialidad de quienes se hospedaban, pero dudó al ver el rostro de preocupación que tenía la chica.
—Es un hombre con el cabello negro largo, seguramente vestido con colores oscuros, delgado, rostro muy pálido y un poco alto. Es necesario que me diga si está registrado aquí, o si lo vio irse, su familia esta preocupada por él.
La recepcionista guardó silencio, dudando si debía o no decirle. Sin embargo, no fue necesario que lo hiciera, porque
Yang Ziding giró la cabeza tratando de buscar con su mirada al hombre, y visualizó muy levemente a alguien que se parecía mucho a él. Estaba de pie observando los productos frescos a la venta al otro lado de la calle.—Gracias— Expresó sin esperar respuesta, y salió corriendo para alcanzar a Wei WuXian.
—¡Maestro Wei! ¡Maestro Wei!
El hombre de pie no respondió, ella tocó su hombro, pero cuando volteó el rostro se dio cuenta que no era la persona que buscaba.
—¿Se te ofrece algo?
—Discúlpeme, me equivoqué de persona.
La joven provenía de una familia importante en el mundo legal, pero ella no estaba interesada en esos temas. En la ausencia de sus padres y su deseo de perseguir sus sueños encontró a Jiang Cheng anunciando su necesidad de tener un asistente, no lo pensó dos veces ni requirió el permiso de sus padres para ser la primera en asistir a la entrevista. Era una joven con personalidad agradable, amable con sus mayores y considerada con los más jóvenes que ella, firme cuando era necesario y sus aportes sobre la confección hicieron que Jiang Cheng decidiera tomarla como su asistente de forma permanente, demostró ser también responsable y confiable, no necesitó arrepentirse jamás de su decisión.
Jiang Cheng había puesto mucha confianza sobre ella, aunque su relación era casi exclusivamente laboral los vínculos que formaron eran estrechos y podía encargarle sin preocupaciones asuntos familiares ligeros. Al no encontrar a Wei WuXian, Yang Ziding se sintió desesperada. No por fallar en su responsabilidad, sino por el temor del peligro que está persona podía correr.
Observó a todas direcciones, hasta que finalmente vio la sucursal de la familia Lan, con la elegancia característica de la familia, le sorprendió saber que este lugar se encontraba tan cerca de su alojamiento. Esto no podía haber sido una casualidad. Por un instante pensó en entrar, pero descartó el pensamiento inmediatamente al recordar lo que buscaba.
Tratando de obtener alguna clave sin respuesta solamente pensó en regresar al hotel y esperar a que Wei WuXian regresara en algún momento, empezó a caminar cuando su teléfono sonó de repente. En la pantalla marcaba el indistinguible nombre de su jefe, quien por unos instantes se convirtió para Yang Ziding en el ser más terrorífico del planeta.
No era miedo por él lo que sentía, sabía que Jiang Wanyin no era una persona violenta con otros, incluso menos con ella, su furia explosiva estaba reservada a su familia más cercana, pero temía ver decepción en su mirada. No tenía donde escapar, ocultarle esa información sería mucho peor, por lo que ignoró sus incesantes latidos y respondió
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Un sólo latido
Short StoryWei WuXian perdió al amor más grande de su vida Se hundió en la depresión por años, solo en su propio dolor; mientras Lan WangJi padecía una enfermedad cardíaca que constantemente amenzaba su vida, recibió milagrosamente un trasplante. Sin embargo...