Lan WangJi no era alguien que esperaba mucho de otros, de hecho no le sorprendían ciertas actitudes decepcionantes de las demás personas, empezando por sus padres.
La persona que lo crió no fue su padre ni su madre, sino su tío Lan QiRen. Cuando nació, Lan WangJi no sabe si estuvo en los brazos de su madre el tiempo que normalmente un recién nacido debería compartir con ella, pero cuando fue consciente de sí mismo, supo que podía contar con sus pequeños dedos las veces que pudo verla, y luego de los cinco años, jamás volvió a hacerlo.
Hasta la fecha nadie se había molestado en explicarle exactamente qué pasó con ella y evadían descaradamente el tema cada vez que intentaba sacarles la verdad, tuvo que resignarse a nunca más saber nada sobre su madre. Pero a pesar de esas limitadas visitas, las recuerda con mucho cariño y nostalgia debido a que eran los únicos momentos en los que alguien le expresaba sincero afecto, a excepción de su hermano y algunas veces su tío, se sentía realmente amado y especial en los brazos de su mamá.
Por otro lado su padre, quién sabe qué estaba pensando, entró en una clase de reclusión mental en la que sus dos pequeños hijos eran la última de sus preocupaciones. Con la reclusión de su esposa, se concentró en su empresa de joyería casi exclusivamente desde el ámbito administrativo, mientras dejó a cargo a su hermano de todas las otras responsabilidades que él no cumplió, que no eran pocas, e incluían a sus propios hijos. Y luego de años de ignorar a Lan WangJi y Lan XiChen durante casi 20 años, murió de un ataque al corazón mientras dormía una fría noche nevada.
Su muerte les dejó a los jóvenes jades una profunda marca de por vida. La repentina ausencia de su madre de por sí los afectó significativamente al ser tan pequeños, y con la muerte de su padre, muchas situaciones sin aclarar se fueron con él a la tumba. Los dejó en la soledad y la confusión, incluso su propio hermano no fue capaz de comprender ni aceptar muchas de sus acciones, pero los ancianos de la familia que aún vivían le impidieron intervenir.
La enfermedad cardíaca de Lan WangJi siempre necesitó de la disponibilidad de su tío, tal vez hubiese sido más fácil para todos si su padre se hubiese preocupado al menos por eso, sin embargo, en lo único que aportó fue en el aspecto económico. Quien debía salir corriendo con él a los hospitales siempre fue Lan QiRen, fue el que se encargó de supervisar su medicación, las actividades en las que podía participar sin peligro, sus dietas, qué hacer en caso de emergencia, entre muchas complicaciones más no fue otro que él, y Lan WangJi se lo agradecía profundamente, más de lo que podía expresar con palabras.
Fue él su apoyo para desarrollarse, para desenvolverse en la música, en la educación, en la sociedad.
Así que cuando su éxito fue en ascenso, tampoco esperó nada de nadie fuera de su hermano y su tío. Pero el joven con el que compartió un fugaz momento de su juventud rompió muchos de esos esquemas.
Para empezar, Lan WangJi jamás en toda su vida había conocido a alguien parecido a ese sujeto, incluso las personas más problemáticas con las que compartió clases eran una brisa apacible comparados con el huracán que representaba Wei WuXian, carecía de toda vergüenza, los castigos nunca servían para nada, y siempre estaba ideando nuevas formas de mortificar a los otros y ser el más ruidoso entre la multitud. Sin embargo, aunque WangJi jamás iba aceptarlo frente a nadie, estos rasgos habían llamado su atención desde el primer momento.
Este joven poseía siempre una sonrisa que ocultaba picardía en su rostro, aunque era muy amistoso y sociable, se juntaba únicamente con su hermano adoptivo y Nie Huaisang, el medio hermano del antiguo dueño de la empresa científica enfocada en producción de medicamentos más grande del país, Nie Mingjue quien actualmente se encontraba muerto. Nie Huaisang era un joven sin mucha complejidad, pero era un dolor de cabeza para todo docente en YunShan, incluso para su tío no fue un desafío fácil, seguía a Wei WuXian a cada juego estúpido que se le ocurría sin importar las consecuencias, que se vieron reflejadas en sus calificaciones debido a que, aunque para los estudiantes externos un solo año en YunShan bastaba, Nie Huaisang tuvo que asistir durante 3 años seguidos para poder ser aceptado en el siguiente nivel.
En la actualidad, aunque no tenía muchas quejas sobre su vida, miraba con nostalgia y recelo esos recuerdos del pasado. La luz del sol se filtraba entre la ventana y la cortina de su estudio, que compartió durante varios meses con Wei WuXian, miraba hacia ese punto para tratar de ignorar sus divagaciones y tomar un descanso visual para concentrarse en el libro que estaba leyendo. Viéndolo ahora, parecía más solitario, más frío.
No sabe exactamente cuando pasó, pero una cosa es innegable: le gusta. Lo ha hecho desde entonces.
Cuando menos se lo esperó, se dio cuenta que pensaba en él de forma diferente a las otras personas. No sabía cómo explicarlo, pero tenía una sensación extraña en su corazón que junto con la sangre que bombeaba recorría todo su cuerpo, hasta la punta de sus dedos. Experimentó ese extraño sentimiento desde que su tío lo forzó a compartir las actividades extra curriculares con él, y aún hasta
Verlo sufrir durante tantos años, ha sido casi tan doloroso para él, lamentaba constantemente no haber tenido la oportunidad de acompañarlo y darle su apoyo cuando más lo necesitaba. ¿Si él hubiera estado a su lado, habría terminado de una forma tan lamentable? Porque aunque no sentía lástima por él, sabía que otros sí lo hacían.
No sentía lástima, sino compasión. Trataba de ser empático, aunque a veces no comprendía, se sentía igual a cuando estudiaban juntos y Lan WangJi no tenía ni idea de qué cosa estaba pensando Wei WuXian. Pero sentía el corazón dolerle cuando pensaba que no había hecho nada por él ¿cómo pudo dejarlo a su suerte durante todo este tiempo? Con el tiempo recordaba que no estuvo totalmente solo, su sobrino, su hermano adoptivo y el cabeza hueca de su amigo Wen Ning lo ayudaron más de lo que él pudo haberlo hecho.
Sin embargo, ahora que tuvo la oportunidad de volver a verlo, estaba enfocado a no permitir que los errores del pasado sucedieran de nuevo, aún si no estaba del todo seguro cómo evitarlos. Seguramente con esa actitud fría que le mostró ya había cometido muchos errores graves, pero no podía permitir que llegase a romper las reglas de su hogar.
Después que Wei WuXian se marchó, Lan WangJi se quedó un poco preocupado por él. Se notaba lo importante que había sido esa llamada y lo preocupado que estaba por la salud de su sobrino, aunque todavía se le quedaron atoradas en la garganta todas las cosas que quería decirle, entendía la emergencia, pero secretamente esperaba que su hermano adoptivo siguiera enviándolo a él para que tuviera la oportunidad de reunirse, de todas formas el campo de trabajo de Lan WangJi no es el mismo de Jiang Wanyin, pero era más compatible con el cargo que Wei WuXian desempeñaba si estaba dispuesto a continuar.
Su hermano continuaba ocupado con otros asuntos y su tío manejaba parte del colegio Yun Shan mientras él se ocupaba de lo restante en la alianza. Pero después de su fallida reunión con Lotus Pear, se quedó trabajando hasta tarde perfeccionando otros proyectos relevantes y finalmente se sintió tan cansado que se fue directamente a la cama saltándose la cena a falta de apetito.
Apenas tocó el mullido colchón, sintió cómo el cansancio, estrés acumulado y sueño invadía todo su cuerpo, por lo que se quedó dormido casi de inmediato a las 9 de la noche en punto. Se sintió relajado y tuvo un buen descanso, hasta que tuvo uno de los extraños sueños que solían aparecer mucho en su juventud, pero que habían cesado después de la operación de trasplante de corazón.
No sabía si tenían algún significado en particular, pero sus sueños casi siempre se ubicaban en un escenario que parecía ambientado hace más de dos mil años en su país, China, y siempre eran sobre una batalla sangrienta, o sobre una conversación ambigua. Lan WangJi siempre sintió que sus sueños eran más raros que los de personas como su tío o sus compañeros de clase, aunque nunca se los había contado a otra persona, debido a que sus sueños nunca parecían tener un inicio o final definidos.
También sentía lo particular que eran, debido a que siempre soñaba en primera persona, nunca se había visto a sí mismo en sus propios sueños. Pero lo más extraño era cuando los sueños se enfocaban en conversaciones, no siempre era la misma persona, pero la imagen con quien entablaba conversaciones siempre era difusa e indistinguible, y parecía que los diálogos no tenían ninguna coherencia. Cuando se centraban en batallas, a Lan WangJi sinceramente le preocupaba tener algún problema psicológico.
Nunca fue una persona beligerante, ya sean acciones o pensamientos, pensaba firmemente que sólo se debía recurrir a la violencia moderadamente en casos extremos, pero las batallas de sus sueños eran tan sangrientas que parecían más una masacre, no tenía la menor idea de donde podrían provenir imágenes tan brutales y crudas, ni siquiera le gustaban las películas de ese tipo.
Había tenido esta clase de sueños casi desde que tenía uso de razón, cuando era pequeño, las imágenes eran tan aterradoras que se despertaba temblando y corría a buscar la calidez de su hermano, quien siempre hacía un espacio en su propia cama para permitirle a su hermano pequeño descansar junto a él, nunca preguntaba la razón porque sabía que no recibiría respuesta, y cuando despertaba al día siguiente, su hermano ya estaba en su propia habitación.
Con el tiempo se acostumbró a vivir con pesadillas durante la noche, durante 21 años rara vez pudo dormir sin ninguno de ellos. Pero cuando su estado de salud se volvió crítico repentinamente y tuvieron que hacer la operación de trasplante de emergencia, las pesadillas se detuvieron. Después de pensar mucho tiempo la razón, se convenció a sí mismo que era la respuesta psíquica de su cuerpo al estado grave de su corazón, el rechazo entre su propia mente y su corazón provocaba un estado caótico que se manifestaba como sueños durante la noche, o al menos eso fue lo que escuchó de un supuesto monje budista de cabeza calva de apellido Liao.
Pensó que nunca más volvería a tener un sueño de ese tipo, incluso tuvo un sueño absolutamente normal en que criaba una pareja de conejos que pronto se convertían en más de 30 y terminaban arremolinándose sobre él mientras intentaba no asfixiarse entre ellos. Pero sucedió.
Cuando abrió lo ojos, estaba fuera de una cueva, un lugar escondido por inmensos árboles. Había un frío penetrante en el aire, obligaba a cualquiera a buscar refugio.
“¿Viste la luna esta noche? Es preciosa”
“Habrá luna llena en dos noches”
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Un sólo latido
Short StoryWei WuXian perdió al amor más grande de su vida Se hundió en la depresión por años, solo en su propio dolor; mientras Lan WangJi padecía una enfermedad cardíaca que constantemente amenzaba su vida, recibió milagrosamente un trasplante. Sin embargo...