Si te amo, ¿a ti qué te importa? · [ JIKOOK ]

(18) Ayuda inesperada

—Deberíamos decírselo.

—Tengo un mal presentimiento sobre eso. No creo que debiéramos decírselo.

—Esconder esto solo nos va a morder en el culo después. Estoy seguro de que no nos va a traer nada bueno.

Hubo unos cuantos segundos de silencio, como si esa posibilidad estuviera siendo ponderada dentro de sus mentes.

—Tae, si estás horny no quiero saberlo, no me hables de morder culos desde por la mañana —Hoseok intentó bromear sin mucho éxito.

—Hyung, no tiene gracia. Estoy hablando en serio, a Jungkook no le va a gustar que le hayamos ocultado eso.

Se mantuvieron la mirada sentados cada uno a un lado de la mesa de la cocina. La comida enfriándose pacientemente en el medio. Taehyung no pensaba seguir dando carta blanca a su hyung y mirar para otro lado cuando sabía que últimamente no se estaba comportando bien. No entendía por qué sentía tanto odio contra aquel muchacho. Era obvio que Jimin tampoco era su persona favorita en el mundo y que le costaría aceptarlo si de verdad tenían que empezar a verlo más en caso de que Jungkook y él empezaran una relación; pero lo haría por él. Sin embargo, su hyung había afirmado de forma casi categórica que no lo toleraría. No entendía de dónde venía un sentimiento tan visceral.

Además, desde que Kook les había confirmado que había dormido con él aquella noche, estaba aún más raro, más esquivo con el tema... ¿Sería porque estaba viendo que aunque no quisiera aquella relación cualquiera que fuese la etiqueta que quisieran usar (el pequeño había insistido mucho en esto cuando habían hablado) se estaba afianzando?

Taehyung no lo sabía. Sin embargo, tenía claro que en algún momento deberían decirle que ellos también estaban en el Black Swan aquel 27 de noviembre cuando todo ocurrió. No era como si hubieran ido a espiarle o algo así, ni siquiera sabían que iría allí. No esperaban que fuera. Ellos habían ido, si eran sinceros, para enterarse de qué había ocurrido con aquel post de Instagram, para intentar encontrar una oportunidad de preguntar qué había detrás de aquella publicación, si realmente lo habían hecho a propósito, si realmente Jimin había tenido algo que ver.

Al principio ni siquiera se había enterado de que Jungkook había entrado al local. Taehyung estaba de espaldas a la puerta así que no podía ver quién entraba ni quién salía. Fue Hoseok quien tuvo que decírselo y, la verdad, al principio no se lo creyó. ¿Cómo iba a ir ahí? De todos los posibles sitios en Seúl, ¿por qué elegiría aquel? A menos que quisiera partirle la boca a Daehoon. Una alarma se encendió dentro de él. No podía ser, ¿verdad?

—No me estás escuchando, ¿verdad? —la voz de su hyung interrumpió sus pensamientos.

—La verdad es que no, perdón. ¿Qué decías?

—Que está bien... cuando quedemos con él se lo diremos, pero no entiendo por qué sería tan importante que le dijéramos que estuvimos allí aquel día.