CAPÍTULO 2 - Narra Aitana

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Eran las 3 de la mañana y mis padres ya estaban durmiendo, era una noche de tormenta, no podía dormir ya que escuchaba continuamente las gotas impactar fuertemente contra el cristal

Así que decidí que hoy iba a realizar la invocación la verdad es que me daba bastante morbo, todas estas cosas de invocaciones, dioses, seres de otros mundos me llamaba mucho la atención

Y hacer estos rituales me ponía la piel de gallina

Coloque las 3 velas en triángulo y las prendí, cogí un tanga de mi armario y lo puse en el centro

Al hacer esto me sonroje por la situación que mi perversa mente había imaginado

Y me prepare para susurrarlo

Aitana: de-deseo que todos reciban un merecido por lo que me han hecho, especialmente alex-notaba como mis ojos iban picando al recordar lo que me hacía pasar en clase-y deseo encontrar a mi alma gemela, enamorarme de alguien que tenga todo lo que exijo

De repente cayó un rayo atronador delante de mis ojos y las velas se apagaron al instante

No evite soltar un grito que se disimulo con el rayo

Yo corrí disparada hacia mi cama y me tape con las sábanas sin pensarlo

Empecé a respirar sofocadamente pero notaba como mi respiración poco a poco se iba calmando

Fui quitándome la sábana de mis ojos para poder ver entre la oscuridad y ahí ví una figura alta viniendo hacia mi

No podía moverme, solo de la impresión que me estaba dando

No podía pensar, solo hacer preguntas, que era, o quién era, cómo había entrado en casa, acaso esto era real?

Note como me agarró de las piernas y me atrajo hacia él una vez que se había metido en la cama

Estaba asustada, no sabía ni lo que me iba a hacer, acaso me mataría, o me torturaria, o mataría a mis padres

Pero entonces fue cuando un beso que no podría haberme imaginado me saco de todos mis pensamientos

Esos besos que no podía corresponder ya que estaba paralizada empezaron a bajar hacia mi escote

Me tumbo totalmente poniéndose arriba y empezó a quitarme mi sugetador

Era fuerte, tenía una gran compresión física, así que deduci que era un hombre de unos 20 años

No sabía que decir, acaso esto es lo que quería?

Acaso me estaba gustando los besos y caricias de un...

En verdad no sabía si era humano

Y otra vez volvió a sacarme de mis pensamientos cuando tiro de uno de mis pezones haciendo que chillara del placer

De pronto se encendió la luz y pude ver su rostro aunque cuando volví a parpadear ya había desaparecido

Belén: hija, pero que te pasa?

Mire mi cuerpo y estaba cubierto por la ropa

Lo había soñado?

Belén: y que hacen esas velas y tu ropa ahí tirada
Aitana: perdona mamá, ya me vuelvo a dormir, solo era una pesadilla
Belén: no no, si ya es la hora, prepararé o Marta se enfadara y no te esperara

Ella salió de mi cuarto y yo me estire en la cama cerrando los ojos e intenté recordar su cara, por lo menos era un humano, de este mundo si era

Madre mía, cualquiera que me oiga pensará que estoy loca

Era rubio, ojos azules, musculoso y ya no recordaba más

Belén: venga hija, levanta ya
Aitana: ay que si, ahora voy

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