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Jiraiya estaba molesto,y Dan y Mei lo sabían,era algo raro en él,pero se habían dado cuenta de que el peliblanco era alguien muy sensible con su comida.
--Jira,¿Estas molesto? -una pregunta tonta,pero tenían que confirmarlo.
--Mei,no es el momento para preguntar eso,es obvio que está molesto -murmuró entre dientes el Kato.
--Son unos hijos de-... -antes de terminar de hablar la rubia lo interrumpió.
--Perra.
La pelirroja y el ojiazul la miraron confundidos.
--¿Qué fue eso? -pregunto confundido el mayor.
--Jiraiya no puede maldecir o decir groserías,así que yo lo hago por él -sonrió.
Terumi enarco la ceja,incrédula.
--¿No lo haces solo por que disfrutas insultar a los demás? -pregunto.
--Tal vez,pero eso no hace menos importante mi trabajo -aclaró.
Antes de que uno de los dos pudiera decir algo,se volvió a oir la voz del menor.
--Oh,vete mucho a la-... -se le había caído la bandeja donde tenía unas galletas que había horneado apenas,pero antes de poder completar la frase la Senju volvió a interrumpir.
--Mierda -termino la oración con una pequeña sonrisa.
Mei y Dan seguían confundidos,pero era mejor eso a que Jiraiya estuviera molesto con ellos y los regañara.
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