CAP. 16 Robo

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Luego de encontrar la casa vacía y de leer la nota que me dejo Lucy las ideas vinieron y escribí en una semana entera mi próxima historia de Amor, basándome en historias que había escrito cuando era un adolescente pero con ligeras modificaciones, en el que escribí todo lo que quería decirle a Lucy y no me animaba, creo que en parte aquello me demostró cuantas cosas me había guardado.

Mi hermana y Elliot estaban preocupados por mi salud, no salia, tampoco comía sanamente, creo que perdí 5 kg. y otra vez descuide mi aspecto, como habían prometido el nuevo editor había llegado, era un hombre de unos 25 años, bastante joven a quien entregue el manuscrito y quien quedo sorprendido por la narrativa, y susurro algo como: " con esto seré famoso".

Fui un idiota...

horas después me llamaron avisándome que el editor llamo informándoles que yo no le había entregado el manuscrito y que por mi incompetencia el renunciaba, mi ira era demasiado grande, les explique la situación y ellos quedaron horrorizados, pero no pudimos hacer nada sin saber que haría con la historia, no era prudente sacar una historia similar, solo podría sacar un libro mejor que el que me habían robado y así lo hice, pero tenia cosas parecidas a la robada, pocos días mas tarde una editorial X saco a la Luz mi historia pero con otro autor, el del Editor, y como lo esperaba trajo repercusiones.

Muchos críticos literarios lo compararon a él conmigo y se dividieron en dos, unos amaban su trama, otros la mía, pero la duda quedo allí, estaba tan deprimido que por un momento pensé que iba a dejar de escribir, no podía mostrar mis manuscritos como prueba, después de todo hoy en día es fácil modificar la fecha de creación de los documentos.

No tenia noticias de Lucy, creo que lo peor de alejarnos es no saber si me extraña o ya me ha olvidado...

Ring Ring

mi celular sonó y para mi sorpresa era el numero de Amanda.

- Hola Amanda, no estoy de humor para hablar contigo.

- Alex, se que no me has perdonado por lo que hice, pero creo que ya se como demostrar que el libro de ese idiota es tuyo.

-¿Así? - ahora yo era el sorprendido, pensé que luego de aquella ruptura no tendría mas contacto con ella.

-si, ven a la editorial, aquí te explico. - dicho eso colgó.

llegue tan rápido como pude y Amanda me esperaba con su padre quien no estaba muy feliz de verme.

- Aquí tienes el manuscrito original. - me entrego un Libro algo viejo y descuidado.

- ¿ que es esto? - pregunte incrédulo.

- No me digas que olvidaste el primer libro que te impulso a ser escritor.

lo mire perdido, inseguro, pero entonces lo recordé, era el libro que presente para un concurso en la Universidad que gane y decidieron publicar.

- Gracias, yo...

-No tienes nada que decir, es mi manera de pedirte disculpa por todo lo que te hice en aquel tiempo.

- no tienes que pedirme disculpas, te perdone hace mucho tiempo.

Creo que gracias a Lucy muchas cosas inconclusas se habían arreglado, ella se encargo de demostrar a los canales de televisión las pruebas y aquel libro se conoció como mio legítimamente y la empresa X perdió gran cantidad de dinero por la venta de todos los libros que publicaron y el editor que robo mi historia ya no podrá publicar ningún libro.

Estaba feliz de que todo se resolviera, pero aun me faltaba lo mas importante.

Lucy ya no me llamo desde la vez que peleamos y su presencia me hacia mucha falta, mis días se volvieron grises aunque el otoño tardaría en llegar, su risa que era música para mis oídos y su sonrisa un motivo para despertar cada mañana.

llegue a casa y para mi sorpresa ella estaba parada allí y por un momento pensé estar soñando, y corrí a su encuentro, ella estaba un poco bronceada, ella al verme también me espero con una sonrisa y nos abrasamos, sus abrazos me hacían falta, yo la extrañaba demasiado y al parecer ella a mi.

- Alex, lo siento tu hermana me llamo y contó todo lo que tuviste que pasar, quería verte, pero no pude tuve un viaje de emergencia y regrese esta mañana.

- ya no importa, ahora estas aqui. - cerré los ojos y olí su esencia, pero ella grito.

- ¡Alex cuidado!.

voltee y allí estaba el chico de 25 años que había robado mi novela, el parecía sacado, fuera de si, histérico y grito algo como: " Me arruinaste la carrera, ahora yo acabare con tu vida"

- Lucy, entra a la casa.

-¿Alex?

- hazme caso y solo entra. - grite aterrado por lo que le podía pasarle.

ella tomo la llave y abrió, cerrándose adentro.

El muchacho se acerco decidido, en su mano tenia un cuchillo de cocina.

- hey tranquilo, cálmate, respira, tu vida no se ha arruinado, puedes conseguir cualquier otro trabajo, solo déjame ayudarte.

- ¡ya ayudaste suficiente!. - corrió hacia mi encuentro, retrocedí rápidamente y para mi mala suerte Lucy salio para avisarme que había llamado a Elliot y pensé lo peor, él se acerco a ella y yo me abalance sobre él, forcejeamos unos minutos mientras Lucy asustada miraba sin poder moverse, a lo lejos escuche las sirenas de los policías y pensé que debía resistir un poco mas pero un descuido mio ocasiono que cumpliera con el objetivo de lastimarme.

había recibido una puñalada en el abdomen o eso creo, iba a lastimar a Lucy, pero oportunamente Elliot y los policías habían llegado ocasionando que él escape.

Lucy lloraba desconsoladamente a mi lado mientras Elliot llamaba desesperadamente a una ambulancia y yo sentía que por cada minuto que pasaba perdía mas sangre.

- lo siento, lo siento - decía ella entre lagrimas - si te hubiera hecho caso esto nunca hubiera pasado, te lastimo por mi culpa.

- no seas idiota - le dije - tu no tienes nada que ver, su acción fue obra de las consecuencias de mis acciones. - tosí y sentí que de mi boca un sabor a metal se hacia presente.

- ¡oh por dios Alex! - grito ella desconsoladamente -¡ Elliot, Alex se esta muriendo!

De inmediato vi que Elliot estaba al lado mio y susurro algo como:

- ¡aguanta hermano, la ambulancia ya esta cerca! - reí por el tono de voz que uso, nunca lo escuche tan desesperado.

sonido de sirenas, voces, caras, luces, paredes blancas, se aparecían de vez en cuando en mi conciencia, creo haber estado lucido en esas ocasiones, pero el sueño me ganaba y sin darme cuenta cerre los ojos.


EL ESCRITOR QUE SE ENAMORO POR SEGUNDA VEZDonde viven las historias. Descúbrelo ahora