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-¡Uff! Por alguna razón, el clima decidió ser frío el día de hoy- dijo Miguel acomodándose en el asiento frente a Joaquín, no era su lugar, pero quería platicar un momento con él, y hasta que el maestro llegara, no se movería de ahí, aunque su compañera lo viera con mala cara para después darse por vencida con una de sus sonrisas seductoras.

-No estamos muy lejos del otoño, creo- dijo Joaquín mientras comenzaba a frotar sus manos para entrar en calor, Miguel tenía razón, hacía un poco de frío. росо

-¿En qué fecha estamos?- preguntó Miguel.

-Amm ¿Diecisiete?- sacó el celular para ver la fecha, a veces perdía la noción del tiempo, sobre todo cuando estaba distraído. -Sí, lunes 17 de agosto, ¿cuándo se supone que entra el otoño?- volvió a guardar su móvil en el bolsillo de su pantalón, que conversación tan aburrida estaban teniendo; es decir, el clima no era tan interesante para una charla demasiado profunda, aunque bien podría ser para iniciar algo que llevara a algo todavía mejor.

-Finales de septiembre.- contestó Miguel.

-Je, este clima sí que está algo descolocado, creo que ya nunca va de acuerdo a las estaciones.- comentó Joaquín divertido.

-Hablando de finales de fecha, la próxima semana termina el trimestre ¿verdad?-

-Sip, y tendremos dos semanas de vacaciones.- dijo Joaquín. -Pero antes de cantar victoria, debemos asegurarnos el diez en el trabajo.

-Me parece bien, ¿tu casa o la mía?- dijo con una sonrisa pícara.

-Ninguna.- respondió rápidamente Joaquín. -Haremos la revisión final en la biblioteca.

-Seguro termino por dormirme.- comentó Miguel divertido.

-Miguel, fuera de mi asiento, ya viene el profesor.- dijo Laura interrumpiendo la conversación de ambos jóvenes.

-Seguimos más tarde.- se levantó y fue hasta su respectivo lugar. Laura se sentó y antes de que pasara nada más y se arrepintiera, le habló a Joaquín, era la primera vez que lo hacía.

-Di-disculpa Joaquín.- se notaba que estaba realmente nerviosa, Joaquín se quedó sorprendido, casi nadie hablaba con él.

-Dime.- dijo con una sonrisa amable, logrando que la chica se relajara un poco.

-¿Tu y Miguel son cercanos? ¿Sabes si está saliendo con alguien ahora?- Joaquín soltó una risita por lo bajo para después contestar.

-Apenas y lo conozco, antes del trabajo en equipo no nos
hablábamos. Pero, creo que no está saliendo con nadie.- "más bien está cazando para  ver qué encuentra"pensó Joaquín.

-Oh, bien. T-tú, ¿crees que acepte salir conmigo?- ¿acaso era el mediador para conseguirle una cita a Miguel? Eso parecía.

-Si te soy sincero, yo creo que aceptara salir contigo.- la chica sonrió de oreja a oreja. -Pero...- continuó Joaquín. -...probablemente sea solo para pasar el rato sonrió de lado con un poco de lástima. La chica se desilusionó por completo. ¿Quizá había sido demasiado duro?

-Sí, tienes razón. No por nada es conocido como el rompecorazones en la universidad.- Joaquín le sonrió, ya no había nada más que decir.

Las clases comenzaron y se dedicó a hacer todos los apuntes necesarios para sus exámenes finales, sintió vibrar su celular en su bolsillo y lo sacó para leer el mensaje que le había llegado. Era de Emilio.

"Nos acompañaran Lilia y Pablo en el almuerzo.¿Nos vemos en la cafetería?"

La cafetería era el lugar dónde transitaba la mayoría de los alumnos, seguramente también estaría Amanda, vigilándolos.

Juguemos a ser novios [Emiliaco](adaptación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora