Deseo destructor

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Kocho estaba descansando, hace tiempo que no tenía sexo con Douma y además hace tiempo no comía nada con semen, ciertamente haberse embarazado le resultó mejor, no esperaba que él fuera así, seguramente quería ser padre desde hace tiempo.

Douma llegó a la habitación con lo que Kocho le había pedido para después mirarla comer.

Douma: Vaya que tenías hambre, seguramente nuestro bebé también.

Shinobu: Ya son 7 meses, solamente faltan dos para que nazca, necesitaré un doctor para ese tiempo.

Douma: ¡Tonterías! Yo lo haré.

Shinobu: ¿Eh?

Douma: No necesitamos un doctor si el bebé me lo comeré.

Ahí Kocho soltó el vaso de té que tenía y miró a Douma completamente horrorizada.

Douma: ¿Por qué la mirada?

Shinobu: Dijiste qué seríamos una familia...

Douma: ¡Claro que sí! El bebé vivirá dentro mío eternamente, así estaremos los tres juntos por siempre, la carne de los bebés es mucho más suave y deliciosa, si es niña las cosas aumentan.

Shinobu: ¡¡Estás loco!! ¡¡No te dejaré comerte a mi bebé!!

Douma: Mi amor, no me hagas sacarlo antes de tiempo, ahora come. Debe estar sano para el nacimiento.

Douma se fue de la habitación y Kocho se puso a llorar acariciando su vientre, no quería que matara a su bebé, ya había acabado con todo lo que ella amaba y ahora quería acabar con lo que ella pensó que sería su felicidad en ese infierno, no lo iba a dejar.

En el día cuando él no podía salir ella escapó ya que ya no la vigiliaba como antes, se fue corriendo de aquel lugar aunque por estar embarazada no podía hacerlo tan rápido pero después de un buen tiempo pudo llegar a su finca y cayó rendida siendo vista por las niñas, inmediatamente llamaron Aoi y a los demás.

Niñas: ¡¿Está embarazada?!

Aoi: Ay...
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Kocho despertó en la cama inmediatamente tocando su vientre, pero cuando vio Aoi enfrente suya llorando ella también empezó a llorar.

Aoi: ¿Qué le pasó?

Shinobu: No quiero hablar de eso... ¿Cómo está mi bebé?

Aoi: Está bien no se preocupe.

Kocho suspiró para después ver por la puerta que Tomioka estaba mirando pero después de ello se fue, Aoi le tomó el hombro a Kocho.

Aoi: Él estuvo aquí desde que volvió sin Kanao, ¿quiere que los demás vengan?

Shinobu: No, no quiero que nadie más se entere de esto, por favor.

Aoi: Cómo desee.

Después de eso Kocho se mantuvo recuperándose, pero estaba demasiado temerosa de que llegara la noche, solamente no quería que la encontrara.

Shinobu: No te preocupes... No nos va a encontrar, tranquilo...

Dijo mientras se mantenía en la cama, después de que Aoi le curara las incontables heridas que tenía en todo el cuerpo a excepción del vientre, ya había entendido porqué tanto cuidado, ya no quería pensar en nada más, simplemente por tanto cansancio se quedó dormida.