Deseo destructor

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Kamado estaba caminando, pero él se sentía bastante mal, todo parecía estar acabado.

Tanjiro: Supongo que todo acabó...

Le habló a su hermana mientras bajaba la cabeza, pero un olor familiar. Suspirando tomó su espada, sabía lo que debía hacer.

Tanjiro: Sé que estás ahí.

Después de escuchar eso Kocho se quitó de su escondite, estaba bastante mal, se le notaba que estaba embarazada nuevamente, también su cuerpo estaba lleno de marcas, tanto chupetones como mordidas tanto en el cuello cómo en el pecho.

Tanjiro: Señorita Kocho...

Shinobu: Oh, Tanjiro. Hace mucho que no te veía.

La mirada de Kanado era de impresión, también de desesperación, no podía matar a Kocho, estando embarazada. No sabía que hacer, aprestaba a ese demonio.

Tanjiro: Señorita Kocho, siento decirle que la llevaré a la cede para que sea juzgada y seguramente ejecutada cuando su bebé nazca.

Shinobu: ¿Estás seguro que es lo correcto?

Tanjiro: No, pero es necesario.

Después de decir eso Kamado se acercó rápidamente a Kocho pero en el momento donde si quiera estuvo cerca de tocar su brazo vio cómo la cara de Kocho se manchó de sangre.

Tanjiro: (Pero qué...)

Shinobu: Estaba segura que no era buena idea.

Kamado cayó al suelo tapándose el ojo, parece que le habían clavado un pequeño cuchillo.

Tanjiro: (Sigue siendo hábil, la subestimé demasiado... Ni siquiera vi cuando me lo clavó, pero es de día, ese demonio no podrá protegerla, debo llevarmela pronto)

Kamado se levantó sacándose el cuchillo, a pesar del increíble grito que dio y la sangre que salió esta vez pensó mucho mejor y pon fin la pudo atrapar, en ese momento no la soltó, pero ella lo miró con la sonrisa que solía tener.

Tanjiro: Hueles a ese demonio... Es el peor olor sentido.

Shinobu: Yo que tú vería esa herida, fue demasiado profunda lo que probablemente hará que pierdas el ojo.

Tanjiro: No me importa, lo que importa es que tú dejes tus crímenes.

Shinobu: Sabes que él vendrá por mí, ¿no te lo dijo Tomioka-san?

Tanjiro: Lo podremos enfrentar.

Shinobu: Siempre tan positivo.

Kamado se llevó a Kocho hasta la cede donde inmigración Iguro se enojó de manera increíble que ni siquiera se fijó en lo que le había hecho Kocho.

Obanai: Se dio la orden de que se matara.

Tanjiro: Está embarazada, no podremos hacerlo ahora.

Himejima: Tiene razón... Así que tendremos que esperar.

Mitsuri: Shinobu-chan...

Sanemi: Momento, ¿no creen que esto es una trampa?

Tokio: Eso pensé yo.

Obanai: Estaremos preparados para eso, después de todo solamente es una luna la que quiere a Kocho.

Tanjiro: Pero es demasiado poderosa, mató a todos mis amigos menos a Zenitsu y Tomioka.

Obanai: Ellos no eran tan fuertes, así que era de esperarse, pero no importa.

Kocho en ese momento vómito todavía siendo agarrada por Kamado.

Tanjiro: ¡Dios eso es sangre!

Mitsuri: ¡¿Está herida?!

Tanjiro: No... Es lo que comió.

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Douma estaba feliz mientras esperaba que fuera de noche, estaba a pocos momento de conseguir lo que quería.

Cuando fue de noche Kamado siguió caminando por el lugar, Kocho estaba bajo vigilancia hasta que diera a luz, pero él todavía estaba nervioso, no podía dejar de pensar si era lo correcto. Al menos ya había sido atendido

Nezuko: Te ves inquieto.

Tanjiro: Todavía no puedo creer todo lo que está pasando.

Nezuko: Tranquilo, estoy segura que todavía hay bondad en la señorita Kocho.

Tanjiro: No lo sé...

Nezuko quería darle ánimos a su hermano pero en esa fría noche sintió de un momento a otro que la tomaron con demasiada fuerza.

Douma: Así que tú eres la chica que él quería, es una pena por el que te hayas vuelto humana, pero una felicidad para mí.

Tanjiro: ¡¡Tú!! ¡¡Déjala!!

Douma sonrió y en un segundo que Kamado quiso sacar su espada ya Douma le había mordido el cuello a Nezuko y literalmente la dejó caer al suelo.

Kamado viendo a Nezuko en el suelo sin una gran parte del cuello le hizo explorar de ira, ni siquiera esperó a los demás y atacó a Douma pero este sonrió sabiendo que era más poderoso no dudó en atacar también provocando gran daño en Kamado, mientras este sangraba de grandes partes del cuerpo alguien gritó fuertemente.

Sanemi salió del lugar gritando que Kocho había escapado.

Sanemi vio a Douma, no dudó en atacar pero él tomó el cadáver de Nezuko y se fue rápidamente, Sanemi lo iba a seguir pero vio a Kamado.

Sanemi: ¡¿A quién se llevó?!

Tanjiro: A Nezuko...