Otro mundo ➤ YoonMin ☽

29: En este y otro mundo

- ... Te amo.

Lo había dicho, aquellas dos palabras solo salieron de mi boca,a pesar del intento de mantenerlas solo para mi.
¿Y Min?... Bueno el solo me observa con una expresión.... ¿Asombrada? ¿Confundida?... ¡No lo sé!

¡Por la luna, di algo!

- Yo... Es muy rápido, pero... Debía decirlo, sentía las palabras ya en mi garganta... Y...- No supe que más decir y solo atiné a tomar la copa con vino y lo bebí de un solo. Luego de que la copa estaba vacía serví más hasta llenarla toda.-  ¿No vas a decir nada?- ¿Sonaba desesperado? Tal vez.- Mierda, fue muy rápido, yo entiendo que no sea el tiempo adecuado, pero-

- Ey, Jimin.

Yoon se puso de pie rápidamente y se inclinó hacia mi. Tomó mi rostro entre sus cálidas manos y lo acercó al suyo, hasta el punto que nuestras narices se rozaban ligeramente.

- Te amo. Te amo tanto que me sorprendió escucharlo. Te amo tanto que desde que estoy contigo supe entender porque las personas hablan sobre lo rápido que se puede amar a alguien.

Sentí mi ser aliviarse y cosquillear con sus palabras.

- Tonto.- Le dije y el sonrió.

- ¿Por qué ese cambio tan repentino?

- Te quedaste callado y creí que ibas a salir con alguna mierda de "es muy rápido para decir que me amas" o cualquier vaina que suelen salir en las novelas.

Yoongi me dio un piquito y luego uno más.

- El Omega más bello y sexy del planeta dijo que me ama, es imposible que diga algo así.

- Más te vale, Min.

Esta vez yo le di un  beso, que luego se transformó en uno más deseoso en el momento que sentí su lengua haciendo paso para jugar con la mía.
Sus manos dejaron a un lado mi rostro y se deslizaron hacia mi cintura, la cual recorrió lentamente, pero su tacto sobre la camisa solo me estaba desesperando, tanto que solté un quejido en el momento que cortamos el beso para poder tomar aire.

- Yoon.- Miré sus ojos y luego sus labios rojos e hinchados.- Dime por favor que tienes una habitación reservada.

¿Vergüenza? ¿Qué era eso?

- Realmente no.- Respondió.- Pero dame cinco y la tengo.

No me dio tiempo ni para decir algo, porque ya estaba fuera del restaurante pidiendo una habitación.

• ☾ •

La tensión que sentíamos -mientras subíamos hacia la habitación, en el elevador- era realmente sofocante. Lastima que no podíamos hacer aquellas escenas de las películas, en donde los protagonistas se devoran en el elavador, ya que no éramos los únicos presentes. Dos jóvenes también venían a nuestro lado y noté que una de ellas se cubría la nariz. Tal vez por las feromonas que de seguro estaba soltando. Aún es difícil controlarlas.
La observé a la joven y con una mirada traté de pedirle disculpas.

El sonido del ascensor detenerse fue como música de felicidad para mis oídos.
Tomé la mano de Yoongi y casi corrimos por los pasillos, hasta que llegamos a nuestra habitación. Él abrió la puerta con una tarjeta y a penas ingresamos, me lancé a su boca.
El aroma a canela que emana su cuerpo, se volvió aún más concentrado, haciéndome perder por segundos, tanto que no me había dando cuenta en qué momento sus brazos me tenían acorralados contra el colchón.