Flores para Namjoon[nammin]

Hibiscus

"Hasta ahora, sin duda, esta ha sido la flor con el nombre más raro. Namjoon, hoy no se exactamente como expresarme, he estado pensando en cómo plasmar mis palabras correctamente.

Te puedo hablar de la flor en diferentes aspectos, en como es representativa para Hawaii, en cómo su significado puede cambiar dependiendo del país, en cómo la belleza está inscrita en más medios que solo su imagen, pero hoy quería centrarme un poco más en ti, en escribir para ti. Es complicado hacerlo, pues diento que las palabras se me están quedando cortas.

Aún tengo cosas que confesarte, palabras cursis que escribirte y mensajes por entregarte. También he estado pensando en como me acercare a ti, para decirte quien soy. Pienso, y últimamente se me encoge el corazón al imaginar tu reacción al saber quien  soy.

Namjoon, estoy preocupado.

¿Qué si no te gusto?

¿Estoy arriesgando mucho?

Namjoon, usted quizás no me entienda. Mi corazón se agita solo con verlo, mis mejillas se sonrojan solo por su causa, y mis pensamientos se vuelven un desastre cuando tu te cuelas en ellos."

Namjoon termina de leer la tarjeta por tercera vez, ha estado meditando en las palabras allí escritas. La emoción es notoria, si, y claro que quiere conocer al chico detrás de las tarjetas, pero...¿qué hará entonces?

Quiere dejar de solo imaginar un rostro, quiere encontrarse con el desconocido y escuchar de su boca directamente...¿qué ve en el?

No es que Namjoon se desprecie, sabe que tiene cierto encanto, pero aún así, no es sencillo solo aceptar que es la razón para que alguien pierda su cordura, que él precisamente esta creando un desastre en un chico. Es dificil solo aceptar que el puede afectar tanto a una perdona.

No ha sido un día fácil, y la tarjeta no ayuda mucho en su cansancio. La cafetería estuvo a reventar, demasiado trabajo tomando en cuenta que era lunes, pero claro que la noticia de que Min Yoongi volvía a ser parte de la cafetería de forma permanente no había tardado en correrse.

Muchas chicas e incluso algunos chicos preguntaban por él.

Pero igualmente se rindieron de preguntar después de un rato, cuando el tan solicitado chico salió echando corazones junto a Kim Seokjin, pero si bien las preguntas por él terminaron, había comenzado algo tal vez un poquito peor. Después de la aparición de la parejita, habían llegado incluso más clientes, todos buscando por un trozo de la pareja.

Namjoon vio a muchos indiscretos tomando fotogafrías.

Le encantaba su trabajo, pero estaba seguro de no querer otro día tan atareado como ese. Incluso si eso significaba no recibir tan buenas propinas.

Namjoon terminó por dormirse con la tarjeta en la mano. leyéndola una vez más sin llegar a terminarla.

*

*

*

-No es que no quiera ayudar pero, ¿pensaste en las consecuencias de lo que estás haciendo?

-Todos los días, incluso desde antes de decidirme por darle las tarjetas.

-No quiero parecer una pesimista, pero hay dos escenarios Jimin. Uno positivo donde todo sería cual cuento de hadas y otro donde todo esto se caiga a pedazos. ¿Podrás con eso?

-Tengo que poder, estoy arriesgando todo por esto Hoseok. Sea cual sea el fin. Si ya lo comencé debo terminarlo. -Jimin terminó de escribir la tarjeta y la guardó en un sobre para entregarla al día siguiente.

 -Bueno dejemos esta charla para después, el amiente se ha puesto muy tenso. -Hoseok intento aligerar la situación. -¿Cuando dejare de usar estas gorras y sombreros?

-Hasta que esto de las tarjetas termine, fue tu culpa. -Jimin se encogió de hombros. -Tuviste que ir con el color mas llamativo a entregar mi tarjeta ese día. Pudiste al menos intentar no ser tan torpe con eso. -Jimin intentó no reír. -El chico al que se la entregaste, Seokjin. Podría reconocerte si ve tu cabello. Así que evita toda a costa pararte en la cafetería si no llevas algo para cubrirlo.

-Eish, y ¿hasta cuando piensas terminar con esto.

-Cuando llegue a 30 tal vez, será un mes. Es un buen número, no parecerá tan apresurado...