Aidan:
Miraba el paisaje desde la ventana del auto donde ahora me encontraba, de regreso al sitio donde he transcurrido los últimos 17 años y 362 días
Cada kilómetro que avanzábamos veis cosas ya vistas antes y cosas que desearía volver a ver
Por ejemplo, querría volver a ver esos verdes arbustos que se teñian de flores color granada y el pequeño lago que hacía un hermoso efecto de espejismo con el cielo, y este cielo, era uno de esos que no piensan en la lluvia
Amaba con mi ser aunque solamente recordar lo que había vivido ahí, en una playa que seguía al piel de la letra las descripciones de libros y deseos, donde desearía volver y tal vez no mirar atrás con la duda del regreso o del quedarme.
Sabía que ahora que habíamos casi regresado a casa podría ser solamente un recuerdo que se pierde entre mis pensamientos blanquecinos, a veces cegados por las nubes de la malinconia y confundidos por la nostalgia traicionera.
Me percate de que habíamos llegado solamente cuando ella tocó mi hombro, con una delicadeza que podría conmover a cualquiera
- Hemos llegado - me mostró una de sus sonrisas - ¿Deseas que te ayude?
- No - comenzé a bajar por la rampa puesta en la parte trasera del auto - No, gracias - tal vez había dado una respuesta demasiado seca
- Bien - una vez abajo, ella tomó el control de mi silla y nos dirigimos a la puerta de mi hogar
Sabía que probablemente no estaría mi madre esperándome en su interior, no nos abriría la puerta para darnos una cálida bienvenida.
No, ella debía trabajar
Con las llaves que le di, ___ abrió la puerta y nos adentramos a mi solita casa.
Exactamente como la recordaba, no había cambiado nisiquiera una coma.
Volvía a esos momentos pasados a alguien al quien le dije adiós en una hoja de papel, sin mirar sus ojos volverse tristes y su mentón tremar solamente por la imposibilidad de hacerlo posible
- Yo debo irme, Aidan - sus palabras llamaron mi atención, casi por completo
- ¿Como?
- Debo irme a mi casa, sabes, tengo una - bromeó citando una de las frases que le había ducho - volveré mañana a las siete y cuarto, aunque no debes despertarte temprano si no quieres
- Suelo despertar temprano - me apure a decir - Está bien
- Bien - se notaba su incomodidad en no saber cómo decirme adiós - hasta mañana, Aidan
- Adiós - pronuncie mirándola a los ojos
Una vez que se había dado la vuelta, le sonreí, pero no logró verlo.
Ella miraba más allá de lo que yo podía ver, miraba el profundo lado bueno de Cualsease cosa, incluso de mi
[ 03:27 a.m.]
-
¿Hey? - se escuchó através de la línea del celular que mi madre me había prestado ya que estaría en casa, solo
- Hey - contesté
- ¿Aidan? - cerraba los ojos ante en sonido de su voz - ¿Todo bien? ¿Porque una llamada a esta hora?
- Solo te llamo porque necesitaba sentirte en línea - susurraba como si alguien más fuera a escucharnos
- Es tarde, deberías dormir - me contestó con un tono de cansancio
- Yo ... Yo suelo tener pesadillas y no puedo hacer nada al respecto, pero no lo quiero - conté con necesidad de hablar -
Es terrible ver cómo todo es tan real incluso en los sueños - mi respiración era pesada y apostaría a que oía solamente está en las pasadas donde no escuchaba mi voz - la realidad es el sueño más aterrador que podrías tener- ¿Quieres habla...- le corté la llamada en preda a la pena y los nervios
Posando el celular sobre mi mesilla de noche, me recosté lentamente sobre mi almohada nuevamente, mirando a la nada eterna e infinita.
Cerraba los ojos y escuchaba su voz.
Sonreía ante tal sensación tan encantadora, recordando el sonido de su voz en mi mente y deleitándome con esta sin necesidad de oírla.
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𝘗𝘪𝘦𝘭 𝘥𝘦 𝘝𝘪𝘥𝘳𝘪𝘰 ▍Aidan Gallagher [✓]
Romance«¿𝘗𝘰𝘥𝘳𝘢́𝘴 𝘢𝘮𝘢𝘳𝘮𝘦 𝘴𝘪𝘯 𝘥𝘦𝘱𝘦𝘯𝘥𝘦𝘳 𝘲𝘶𝘪𝘦𝘯 𝘴𝘰𝘺? 𝘚𝘢𝘣𝘦𝘴 𝘮𝘪𝘴 𝘭𝘪𝘮𝘪𝘵𝘦𝘴, 𝘮𝘪𝘴 𝘧𝘳𝘰𝘯𝘵𝘦𝘳𝘢𝘴. 𝘚𝘰𝘺 𝘮𝘶𝘤𝘩𝘰 𝘮𝘦𝘯𝘰𝘴 𝘲𝘶𝘦 𝘵𝘶, 𝘺 𝘢𝘶́𝘯 𝘢𝘴𝘪́ 𝘮𝘦 𝘢𝘮𝘢𝘴. 𝘗𝘳𝘦𝘴𝘶𝘱𝘰𝘯𝘨𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘦𝘯𝘤𝘰𝘯𝘵...