TIMELY!! ──Genshin Impact One-Shots

˗ˏˋ Ayato | 💧 ˎˊ˗

✁・・・Nota: Es de mi agrado informarles que me salió Ayato. Luego de 176 tiradas porque Mona me arruinó el pity, pero lo logré. ｡ﾟ(TヮT)ﾟ｡

—Mi señor, eche un vistazo entre bastidores.

—Sí, muy entretenido.

           Los ojos zafiro del jefe del clan Kamisato se encontraron con la mirada de la joven y alegre mujer que posaba al lado de Arataki Itto en el escenario. En ese instante, su sonrisa divertida se borró e intercambió por una expresión nerviosa, sus mejillas se coloraron de un tono rojizo; de entre los cinco integrantes de la pandilla Arataki ella era la única que ya no sonreía ampliamente, ante su reacción, Ayato, sin apartar su mirada, curvó sus labios dejando salir una imperceptible risita. Esto en vez de tener el efecto que el jefe de la Comisión Yashiro esperaba solo la puso más inquieta.

           Una vez Itto gritó el nombre de su pandilla la muchacha recobró la compostura, dirigió su vista hacia otro punto el público por donde comenzaban a llegar hombres uniformados con lanzas apartando a los espectadores que no hacían más de disfrutar de un show callejero. Acto seguido sus compañeros iniciaron una huida para evitar ser encarcelados por veinticuatro horas acusados de disturbio del orden público por tercera vez en el mes.

—Es una pena que la Comisión Tenryō haya venido...

           Antes de salir corriendo junto a los demás la chica miró fugazmente hacia donde el Comisionado Yashiro los veía expectante. Éste alzó la mano de manera discreta hasta la altura de su pecho para después despedirla con un gesto amable, casi como queriéndole dar a entender que se volverían a ver.

           Cuando por fin lograron escapar y llegar a su guarida, (TN) llegó para contarle todo lo que había sucedido a Shinobu Kuki, puesto que ella era la única que sabía de su amor por Kamisato Ayato. Era un secreto entre las dos, y aunque para la peliverde no representaba nada negativo que gustara de alguien con la posición de él, la muchacha se sentía abatida por lo que sus demás compañeros pudieran pensar sobre ella, se supone que la Banda Arataki va a su propio ritmo, hace las cosas a su manera sin importar lo que las leyes de Inazuma les quieran imponer. Pensar en querer estar con alguien como Ayato sonaba descabellado.

           Kuki tuvo que escuchar todas sus dudas e ilusiones por el resto de la noche hasta altas horas de la madrugada, a veces sonaba como una niña perdidamente enamorada por primera vez, nadie podía bajarla de las nubes, aunque la ninja hacía lo posible para traerla a la realidad.