Seattle
Era una noche bastante tranquila en la ciudad. Al menos lo era hasta que a unos ladrones de bancos se les ocurrió robar un camión de policía con bastante dinero dentro. Varias patrullas policiales les perseguían, pero estos les lanzaban varias bombas para poder perderlos de vista. Por si fuera poco, tenían al conductor secuestrado, así que era una situación de vida o muerte.
En la cima de uno de los edificios de la ciudad, se encontraba cierto niño de 12 años que vio la situación pasar y se preparó para entrar a escena. Se acomodó los calcetines, estiró un poco, tronó sus dedos, simuló una pelea con la energía que emanaba de su cuerpo, comió un chilidog y se lanzó desde el edificio, listo para salvar el día. Una vez llegó a la carretera, comenzó a esquivar todos los autos para llegar rápidamente hasta la persecución.
- ¡Cuidado! ¡Permiso! ¡Disculpen! ¡Abran Paso! - exclamaba aquel niño al pasar por los autos
Cuando finalmente llegó hasta el camión robado, se hizo bolita y entro por la ventana abierta del lado del copiloto. En ese mismo instante, dejó al copiloto inconsciente y al conductor lo dejó colgando desde la puerta.
- ¡Buenas noches caballeros! ¿Les importa si manejo? ¡Pónganse el cinturón!
A su vez, giró el vehículo bruscamente hacia la derecha, mientras la policía los seguía persiguiendo. Ese giro hizo que una de las bombas que sostenían los ladrones en la parte trasera terminase cayendo justo al frente a una patrulla de policía, y al explotar le bloqueó el paso.
- ¿Como vamos allá atrás?
Tras preguntar esto, comenzó a mover el camión bruscamente hacia ambos lados, este movimiento dejó a los dos ladrones de atrás inconscientes. Al mismo tiempo, todo el dinero que habían robado se terminó perdiendo por la parte trasera del vehículo. A su vez, el verdadero conductor del camión intentaba decirle algo a Sonic, pero al tener la boca tapada no se le entendía nada. El peli-azul tardó en percatarse, pero al final se dio cuenta.
- Ay perdón, no entiendo pujidoles - comentó para luego quitarle la cinta
- ¡¿Y tú cuantos años tienes?! - preguntó el conductor asustado y sorprendido
- ¿Eso que importa? No tenéis por qué temer ciudadano. ¡Soy el héroe que necesitas Y que te mereces! El amanecer azul que desvanece a la oscuri- ¡Ay virgen santísima!
Por no ver el camino, Sonic casi atropella a una mujer que cruzaba la calle mientras leía una lista en la mano. Rápidamente dio un giro muy brusco hacia la derecha para no lastimarla. Tanto Sonic como el conductor gritaron, pero luego fue solo el conductor.
- ¡Tranquilo! ¡Nadie va a salir herido!
Logró enderezar el camión luego de dar otro giro brusco, pero ese giro hizo que la bolsa con las bombas pasara al frente, justo al lado de Sonic.
- Ja, ¿qué es eso? - preguntó el oji-verde
- Bombas... ¡Bombas! ¡Son bombas! ¡ESAS SON BOMBAS! - gritó aterrado el conductor
- Relájate. No están activadas. Así que te repito que nadie va a salir...
Pero en ese momento, TODAS las bombas en la bolsa se activaron. Sonic y el conductor vieron horrorizados la bolsa.
- ¡ME EQUIVOQUÉ, VAMOS A MORIR!
- ¡¿Por qué no te detienes?!
- Necesitaría frenos
El primer ladrón al que había noqueado cuando entró cayó justo encima de los pedales, bloqueando a Sonic tanto el acelerador como el freno. Con su pie, el peli-azul levantó la bolsa con las bombas para tratar de apagarlas.
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Sonic 2: La Película
FanfictionDespués de establecerse en Green Hills, Sonic quiere demostrar que tiene lo que se necesita para ser un héroe. Su prueba de llega cuando Robotnik regresa, esta vez con un nuevo compañero, Knuckles, en busca de una esmeralda que puede construir y des...