La noche cubría Seúl, el frío arropa con decisión a todos los habitantes y sus alrededores, las luces de los edificios y hogares ajenos iluminaban de forma tenue las calles de los barrios, los faroles defectuosos continuaban tiritando, esperando su inminente fin. La mayoría de las luces provenían de las tiendas y demás tales como aquel comercio de comestibles y algo más en donde un pelirojo miraba estupefacto a un pelirosa relajado que parecía estar bien con lo que acababa de confesar.—¿¡Tú hiciste que mierda!?
Por otro lado y en simultáneo Sunoo estuvo a tres segundos de cubrir la boca de Heeseung con un trapo sucio con desinfectante que había cerca de sus manos debido a la gran exclamación del más alto que debió ser escuchado hasta en el polo sur.
—Habla más fuerte, en el periódico no te entendieron bien— el más alto se coloró por la vergüenza debido a las palabras sarcásticas del menor.
—Lo siento.
Sunoo rodó los ojos a la vez que se permitía suspirar.
¿Qué tenía de sorprendente salir con un delincuente?
O besarlo.
O salir con él de nuevo.
Y besarlo otra vez.
Y repetir.
Según él aquello fácilmente podría ser una rutina diaria considerando todas las cosas que sucedían regularmente en aquella comunidad, pero Heeseung parecía que se iba a desmayar por aquella insignificante confesión.
Jongseong lo había invitado a salir hace ya dos semanas, ese mismo día el decidió probar suerte dejándose llevar por los confusos y sarcásticos encantos del pelinegro dando así un resultado bastante obvio para este punto. Sorprendentemente el que ahora sé sabía era menor no se había arrepentido en los más mínimo.
Saltó cercas, huyó de la policía con un vaso de alcohol y algo más en su mano, se sentó en la orilla del río en medio de la madrugada y grito, desahogo todo lo que lo atormentaba con palabras mayormente irreverentes que se llevó la lluvia y el río junto a sus lágrimas que fueron pacientemente secadas por quién había tomado la iniciativa para todo eso. Quizás fue alocado o arriesgado, pero ahora se sentía bastante liviano.
Y como buen chico quería contarle aquello a alguien, ese alguien afortunado acabó siendo Heeseung, aunque no haya tomado la información de la mejor manera.
Tal vez Sunoo debió haberselo comentado al buzón de mensajes de esa pizzería que nunca le contestaba el jodido teléfono en lugar del pelirojo dramático.
—¿Te enamoraste de un delincuente?— interrogó Heeseung, aún sin procesar todo.
—¿Qué? No, solo somos algo cercanos.
—¿Lo suficiente cercanos para besarse?
—Algo así.
Heeseung estaba por argumentar su punto de vista sobre la situación presente cuando la campana de la puerta indicó la llegada de un nuevo cliente, uno el cuál pudo haber sido mejor recibido si no fuera un pelinegro que le ponía los pelos de punta a Heeseung, el que se encontraba laborando en ese momento. —Buenas noches, muchachos— saludó Jongseong con una sonrisa un tanto irónica, al menos con un mínimo deje de ello que hizo a Heeseung chillar internamente.
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«Convenience Store»ꨄ︎
Fanfic•Relatos de un trabajador nocturno de una tienda de conveniencia que se enamoró del delincuente del barrio• ☘︎Adaptacion ☘︎Drama+ Romance ☘︎Actitudes incorrectas y lenguje vulgar ☘︎Contenido homosexual ♪ Sunjay-Jaynoo (Sunoo ×Jay) *Hist...