Save me -shin soukoku-

10

Las cosas no se podían poner peor ¿cierto?

¿Cierto?

Pero por supuesto que si...

El albino se había hecho con u cuchillo y estaba sentado en una esquina de la casa tratando de que Akutagawa no se acercara.

-Jinko escúchame -le hablo tal vez por quinta vez el azabache que no podía usar a Rashōmon ya que las dos veces que había intentado usarlo Atsushi al ver que de verdad le preocupaba que se lastimara había amenazado con apuñalarse, el celular ya había marcado a Yosano que iba en camino.

-No, aléjate de mi -dijo el albino desesperado.

-Jinko, sea lo que sea que recuerdes lo podemos hablar...

- ¡Cállate! solo... cállate, no quiero escucharte me quieres lastimar ¿crees que no lo sé? todos me han lastimado, por dios ¿Quién eres? ¡Solo déjame irme a casa!

Akutagawa negó con la cabeza, estaba desesperado, el albino no lo recordaba, y por lo que ya había dado a entender más de una vez desde que había iniciado con ese problema definitivamente no, no confiaba en él en esta ocasión y ahora estaba seguro de que lo lastimaría.

-Atsushi tienes que reaccionar-le pidió el azabache- nadie te va a hacer daño, yo mucho menos, tienes que recordar.

-Me lastimaras... yo no te conozco ¿Qué demonios hago en tu casa? ¿Qué me vas a hacer?

-No hare nada contra ti, si quieres salir, sal, pero tienes que darme ese cuchillo antes.

-Ya no... ya no quiero que me hagan daño, ¡me matare si te acercas!

-Hey, no me acercare si no quieres, ¿esta bien? aquí me voy a quedar -Akutagawa se sentó estaba a tres metros del albino.

-Que es lo que quieres -pregunto el albino entre lágrimas.

-C-conocerte, solo conocerte... te encontré, estabas un poco enfermo, te encontré y te traje a casa, pero no te quiero hacer daño -mintió el azabache, aunque el albino lo vio como si dudara.

-Él me decía lo mismo, que solo quería conocerme -hablo el albino con la voz rota- pero ya no, no lo permitiré, nunca más, no sabes lo harto que estoy, ya no dejare que me lastimen.

-Jinko, baja el cuchillo ahora -le ordeno el azabache al ver que Atsushi tomaba el objeto con fuerza amenazando son clavárselo.

-N-no... se lo que planeas hacer...

-Atsushi Nakajima suelta ese cuchillo ahora -hablo el azabache sacando a Rashōmon el albino lo vio asustado, le dolía ver tanto terror en sus ojos.

-Lo sabía... lo sabía, solo me lastimaras...

Tocaron a la puerta ambos voltearon a ver.

- ¿V-vienen más? ¿Serán muchos? n-no... n-no quiero... por favor... solo déjenme solo...

El albino vio al azabache, este trato de detenerlo, pero no lo logro, esos malditos tres metros que los separaban.

Atsushi movió el cuchillo sobre su cuello cortándolo limpia y profundamente, comenzó a sangrar de inmediato y ahogarse con su propia sangre.

Akutagawa corrió tratando de detener el sangrado con Rashōmon.

- ¡Yosano! -grito, pidiendo que fuera ella quien había tocado, abrieron la puerta rompiendo el cerrojo, eran Chuuya, Dazai y Yosano.

La mujer vio lo que el albino había hecho, corrió y uso su habilidad el albino quedó inconsciente tras eso, Akutagawa tiro a un lado el cuchillo viendo su ropa y manos ensangrentadas, y al albino completamente pintado de rojo.