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Pov's Kiara

Un ruido fuerte me despierta provocándome una jaqueca horrible, logro descifrar por fin el molesto sonido

-Jaden...- golpeo su hombro sin ni siquiera levantar mi rostro de la almohada

No recibo respuesta de su parte

-Jay Jay- ahora golpeo su espalda sin ser brusca

-¿Qué sucede cariño?- escucho su voz adormilada y puedo jurar que al igual que yo, no levanta la cabeza de la almohada

-El teléfono- escucho un suspiro de su parte y siento como se levanta de la cama

-¿Es el tuyo o el mío?-

-El tuyo, apagué el mío antes de acostarme- escucho cómo mueve cosas de un lugar a otro hasta que por fin parece conseguirlo

-¿Qué pasa? ¿Por qué llaman a estas horas de la madrugada?- puedo notar el pequeño tono de molestia que tiene

Pobre de mi bebé, estaba tan cansado cuando llegó del trabajo y ahora lo desperté de madrugada para que contestara

-¡¿Qué?!- su grito hace que me despierte de un brinco -¡Ya mismo vamos para allá!- cuelga y sale corriendo al armario

-¿Pasó algo malo?- me lanza un conjunto de ropa deportiva

-Es Emili, va a dar a luz- creo que se me bajó la tensión -Tranquila Kiara, ella está bien, ahora vístete para que vayamos al hospital- asiento un tanto aturdida y aún con el sueño encima, logro cambiarme y sujetar mi cabello en una coleta alta

-Llaves- lanzo las llaves de la camioneta y Jaden las atrapa en el aire

-Gracias mi amor, te espero abajo- sé que está preocupado por su hermana, pero aún así veo una sonrisa en su rostro antes de que salga por completo de la habitación

Está tan emocionado de ser tío y poder consentir a la criatura

Salgo y voy directo a la cocina, en mi bolso meto algunas galletas y golosinas. Pueden ser las tres de la mañana, pero conozco bastante bien a Jaden y sé que cuando está despierto en tales horas, le dan ganas de comer algo

Termino de salir del apartamento y me aseguro de cerrar con llave, bajo en el ascensor hasta el estacionamiento subterráneo y ahí está mi lindo y cansado hombre esperándome dentro del vehículo

Abro la puerta del copiloto y subo

-Aún no termino de acostumbrarme a la altura de esta camioneta, el Jeep era un poco más bajo y no se me dificultaba tanto subir- escucho una risita burlona de su parte

-Eres una enana- salimos del lugar por completo y emprendemos camino al hospital -Por cierto mi amor, trajiste...-

-Sí, traje galletas oreo- lo interrumpo antes de que termine, ya sé lo que quiere

Escucho de nuevo una risa de su parte, con su mano izquierda toma el volante, y enlaza la derecha con la mía

-En siete meses ya has logrado conocer mis hábitos, me impresionas-

-Y tu los míos- planta un beso en mi mano -Estás más cariñoso de lo normal, cosa que es rara porque sé que tienes sueño, y eso significa mal humor-

-Sí fuera otra ocasión te aseguro que estaría de mal humor, pero ahora mismo estoy emocionado por conocer a mi sobrinita- y dale con eso, desde el cuarto mes asegura que es una niña

Lexis y Emili decidieron no saber el sexo del bebé hasta el día del parto, y según Jaden será una niña

-¿Aún sigues confiado de que será una niña no?- asiente

Lucharé por TíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora