× 14 ×

851 48 0
                                    

Pov's Jaden

—¡Apúrense! Hay muchas cosas que hacer hoy— grito desde el auto, Emili llega corriendo y sube al auto —¿Dónde está Mia?— ella levanta los hombros indicando que no sabe. Izan y Kiara suben al auto —¿Han visto a Mia?—

—Sí ya viene, estaba en el baño— dice Kiara. Pasan dos minutos y Mia llega

—Lo siento, estaba en el baño— dice agitada de correr

—Está bien, vámonos— enciendo el auto y emprendo camino

—Izan, los chicos nos invitaron a su casa hoy para cenar con sus padres— dice Kiara

—Si chicos, por favor— Mia hace un pucherito

—¿A qué hora debemos ir?— dice Izan

—Paso por ustedes a las siete— digo sin dejar de ver el camino

—Claro, está bien— dice Izan. En cinco minutos más ya estamos frente a la casa de Kiara

—Adiós, nos vemos ahora— Kia lanza un beso al aire y cierra la puerta

—Oigan, les quería contar algo— dice Emili

—Claro dinos ¿Qué pasó?— habla Mia

—Estaba pensando en pedir trabajo en las Industrias Black, al parecer abrieron una nueva sede y están en busca de personal—

—Es una muy buena idea, pero debes esforzarte— dice Mia

—Conseguir un puesto en esa empresa es complicado, debes dar lo mejor de tí— digo mirándola por el espejo retrovisor

—Lo sé, por eso iba a dar una entrevista la próxima semana, un día que tenga libre de la universidad y así no debo estar con el tiempo en mano—

—Bueno la verdad me parece una muy buena idea, te apoyo—

—Yo también te apoyo preciosa— dice Mia

—Bueno, ya llegamos— aparco el auto en el estacionamiento y bajamos del auto —Bien chicas, cada quien tendrá una labor para que todo esté listo ¿Entienden?—

—Sí capitán— dice Mia colocando su mano en su frente al estilo militar

—Bien, manos a la obra—

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Pov's Kiara

—¡Izan!— grito furiosa

—¿Qué pasa preciosa?— se para en el marco de la pared

—¿Tomaste la barra chocolate que dejé aquí?— cierro la puerta de la nevera

—No...— me acerco de manera amenazante, aunque es gracioso porque soy pequeña a su lado

—¿Y por qué hueles a chocolate entonces?—

—Bien lo admito, tomé tu chocolate, pero en mi defensa yo no sabía que era tuyo—

—Ahora vas a ir a la tienda y me comprarás uno si no quieres que te castre ¿Entendiste?— abre sus ojos con asombro

—Ok ok, tranquila enana— levanta las manos en paz, toma su billetera y sale de la casa. Me siento en el sillón y prendo la televisión para ver alguna película o algo interesante

Mi teléfono comienza a sonar y miro la pantalla, es una llamada de Parker

—¿Bueno?— contesto

—Hola Kia—

—Hola amigo ¿Cómo estás?—

—Estoy muy bien preciosa, perdona lo directo pero necesito tu ayuda—

Lucharé por TíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora