Cruel

Ocho

C O L E T T E

-Joder.. - gruñí . Un chico de mi edad rubio y ojos azules tartamudeo un poco y me miro.

-Mierda...Eh, lo siento de verdad .- él se puso rojo como un tomate y eso me hizo gracia.

-No pasa nada .-

-Oye, mmm te invito luego a un café para recompensar .- sonrió mientras sacaba de su bolsillo un pañuelo para que yo pudiera limpiarme.

-Claro, pero siempre que el café acabe en mi estomago y no encima mío .- sonreí.

-Genial, nos vemos luego en la cafetería .- asentí y comenzó la clase.

- ¿Vienes a cenar a mi casa Colette ? .- me pregunto Bella mientras un chico le sonreía saliendo de clase.

- Me ha invitado un chico a tomar un café .-

-Oh vale pero mañana no te libras de venir a mi casa .- asentí y entré a la cafetería.

El chico rubio estaba en una mesa del fondo y levantó su mano para que lo encontrara.

- ¡Hola! Aun no sé tu nombre .- sonrió y yo me senté en la silla.

-Colette .- 

- Yo soy Eric .- se levantó y trajo los cafés.

- ¿Eres nueva? .- me dio el café y yo lo cogí - No te había visto nunca en el instituto .-

-Sí, tengo que estar un año con mi padre .- no me gustaba hablar de mi vida. Era algo mío que nadie debía saber. Ni siquiera mis amigas de toda la vida sabían la verdad. En cierta forma me avergonzaba de que mi padre hubiera actuado así y contárselo a la gente no iba a solucionar nada.

─ Oh bueno ¿ Pero te llevas bien con él  .─ pregunto el intentando sacarme información. Me chocó que preguntara aquella pregunta de forma tan directa.

─ Bueno..─ corte rápidamente la conversación. Después de un incomodo silencio él hablo .

─ Perdona.. No quería...─ dijo el levantándose para pagar los cafés.

─ Tranquilo, no pasa nada.─ sonreí. Estuvimos unos diez minutos hablando de otros temas sobre el instituto de forma superficial pero cómoda.

─ Bueno hasta mañana, tengo que ir ya a casa .─ dije y nos despedimos.

Salí a la entrada del instituto y me senté en las escaleras de cemento.

Marqué el numero de mi padre en mi móvil.

─ ¿Si? .─ dijo su grave voz

─ ¿Puedes venir a buscarme ?.─

─Colette no puedo, tengo mucho trabajo.; preguntase lo a Anne seguro que puede .─

Bufe y colgué.

No sabia si llamar a Aaron, pero no quería que pensara que lo trataba de taxista personal.

Decidí ir yo misma a casa cuando alguien me tocó el hombro. Eric de nuevo.

─ ¿Te llevo a casa? .─ pregunto Eric. No sabia que contestar. No lo conocía de nada. Cuando me subí por primera vez a la moto de Aaron debo admitir que no se por qué lo hice pero pensándolo fríamente eran dos malditos desconocidos.

─ Si no molesto sí.. ─ dije muriéndome de vergüenza. El simplemente sonrió y me subí en su coche.

Baje la ventanilla del coche, faltaba poco para llegar a casa. 

Eric conducía pero paso por el barrio donde vivía Aaron.

─Mmm, ¿Eric no puedes dar la vuelta ? .─ pregunté como si alguien pudiera oírnos.

El negó.

Miraba las casas, eran casas viejas.

Un porche de madera, y en su puerta una moto negra. Tenía que ser la suya.

Aaron estaba sentado en las escaleras del porche con un cigarro y una botella en sus manos.

No tuve tiempo para agachar mi cabeza porque simplemente me quedé de piedra.

¿Sabes esas veces en las que los libros pones típicas frases como "Me quede de piedra, mis músculos no reaccionaban " y tu piensas que eso es imposible ?

Pues pasaba.

No tenía miedo al simple hecho de que Aaron pudiera verme. Tenia miedo de como podría actuar. Se que no me haría daño, lo de ayer era un combate y de eso se trata. Pero la forma en la que miró al contrincante y me miró me provocaba terror.

Ayer en el combate descubrí como verdaderamente era.

Demasiado agresivo.

Aaron levantó la vista hacia el coche y clavó de nuevo sus ojos en mi. Ninguno de los dos hicimos nada.

Entré en casa y mi hermanastra Cathy estaba sentada en medio de las escaleras

─ Hola Cathy .─ intente sonreír pero cada vez que veía sus ojos la rabia me consumía.

Tenia exactamente mis ojos grises, los ojos de mi padre que siempre los dos habíamos compartido.

Era algo "nuestro"; todo el mundo que me veía por primera vez, sabían que mi padre seria Charlie, mi padre.

Era algo nuestro, de lo poco que quedaba.

─ ¿El del coche es tu novio ? .─ dijo la niña y yo negué.

─ Colette tiene novio, Colette tiene novio...─ comenzó a gritar la niña.

El timbre sonó y mire por la ventana.

Una moto negra estaba aparcada.

─Cathy, sube a tu cuarto .─ susurre a Cathy.

Ella negó riendo.

Abrí la puerta encontrándome a Aaron.

─ Hola Aaron .─ intente sonreír

─ Hola Colette, solo venía a decir que lo siento por lo de la pelea .─

─ Oh,  lo entiendo es la vida de un boxeador, tranquilo lo entiendo .─ nos quedamos unos segundos en un silencio incomodo.

─ ¿Quieres pasar ? .─ Él asintió y entramos en el salón vació. Excepto Cathy que estaba sentada en un lado.

─ Cathy ¿Está Anne ? .─ pregunté

─ No, se ha ido al medico .─

─ Por favor sube Cathy a tu cuarto .─Ella negó

─ Te daré 2$ para que te compres lo que quieras .─

─ Que sean 3$ .─ dijo ella y yo asentí ─ Los quiero ahora .─

Le di el dinero y ella subió. No me puedo creer que le haya dado 3$ a esta cría.

Aaron se sentó y yo hice lo mismo.

─ ¿Mañana vengo a por ti en moto como siempre ? .─dijo el mientras yo miraba los tatuajes de sus brazos.

─ Perfecto .─ sonreí

─ Te he visto antes en el coche .─ dijo el mientras cada palabra que decía me ponía mas nerviosa.

─ ¿Era el coche de tu padre ? .─ yo asentí sin mirarle a los ojos. Me pareció la excusa perfecta par no entrar en líos.

El agarro mi mentón fuertemente para que pudiera mirarle a los ojos.

─ No mientas .─ una lagrima se me escapo. Después de haber visto el combate sabia que el podía hacer cualquier cosa.

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Hola! Espero que os este gustando la historia.

Eric va mover todos los planes igual que Anne.

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