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Estaba cenando con el rizado en el enorme comedor. Apenas habían empezado con el primer plato y Louis ya estaba lleno. Harry estaba sentado al lado del castaño, ninguno miraba al otro.

Una cocinera trajo unos cuantos platos más y en cuanto fue a servir a Louis este se negó.

"No tengo más hambre, gracias" La cocinera asintió, pero en cuanto se fue a marchar Harry la detuvo.

"Sírvele más" Ordenó. La mujer lo hizo y se marchó.

"No puedo comer más, estoy lleno"

"Come más, hazme caso" Le dio una mirada gentil.

Louis hizo caso sumiso e intentó comer algo más, pues negarse no era una buena opción. Al castaño le surgió una duda.

"¿Qué significa 'red room'?" Harry se atragantó.

"¿Dónde has visto eso"

"En un cartel de una habitación del fondo"

"¿Has entrado en ella?"

"No, estaba cerrada" Hubo unos segundos de silencio.

"No es nada, no preguntes"

"Esta bien"

Pasaron unos minutos en los que solo se escuchaban los ruidos de los cubiertos.

"Mañana hay una reunión de oficina, quiero que vallas, quiero que te conozcan, así empezaran a respetarte."

"¿M-mañana?" El rizado asintió "¿Qué tipo de gente habrá?"

"Me gustaría decirte que personas honestas y simpáticas, pero habrá de todo salvo eso" Louis comprendió "No hace falta que vengas si no quieres"

"No, esta bien"

"¿Has terminado de comer?"

"Sí, Daddy"

"Bien, a dormir"

La luz ya entraba por el balcón despertando a Louis. Se quedó unos cuantos minutos pensando en todo lo ocurrido y en lo que no. Como por ejemplo el hecho de que su comprador aún no lo había usado sexualmente. Lo había llevado de compras, inflado a comida y lo iba a llevar a una reunión. Ahora, Harry estaba a su lado durmiendo y aún estando en la misma cama no había más intenciones de por medio. Lo que agradecía profundamente.

El reloj de alarma empezó a sonar y un perezoso ojiverde se levantó.

"Me voy, te vendré a buscar sobre las 21:00" Susurró al terminar de alistarse.

"Ok, Daddy" Harry se acerco a el.

"Beso" Este se lo dio.

Louis se pasó toda la mañana durmiendo e investigando más a fondo la casa. Eran las 20:45, ya se había duchado y solo faltaba escoger la ropa para ponerse. Harry no le había especificado que tipo de ropa, pero supuso que algo formal.

Agarró un conjunto a cuadros que constaba de una falda, una camiseta pegada negra y una americana. *conjunto de multimedia*

Harry llegó unos minutos después y nada más ver al castaño una sonrisa pícara se mostro junto con un hoyuelo. Parecía que el rizado deseaba tener rayos x en ese momento para poder ver debajo de esa falda.

"¿Vamos?" Preguntó Louis.

"S-sí" Tartamudeó.

Subieron a la limusina, les esperaba un largo camino.

Dos minutos de viaje y Harry ya tenía la mano apoyada en el muslo del contrarío. Louis debería de estar molesto, pero sinceramente adoraba ese acto de control.





All the love:

Anónimo

Reunión en el siguiente capitulo.

Subastado/ Larry StylinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora